lunes, 12 de enero de 2009

Violencia en puerta por el transporte

Uno de los mayores problemas que tenemos en puerta, los mexicanos, es la crisis general del transporte que, aunque ninguneada por los políticos y los funcionarios públicos, por los burócratas ladrones de PEMEX, los ineficientes funcionarios que controlan el sector, seguramente, está a punto de estallar. Nadie puede negar que los grandes pulpos camioneros, los controladores de las rutas de peseras en todo el país, los grupos aliados de mafiosos taxistas y los camioneros de carga están más que dispuestos después de los nulos resultados en las negociaciones entre pescadores y autoridades de solidarizarse con este movimiento con el fin de generar uno que tenga como salida, dicen ellos, lograr los aumentos de precios en cargas y pasajes, con lo que se detona la escalada de precios en todos los artículos y servicios.

Cuando hablamos de las ineficiencias de los programas sociales recordamos que, en un problema similar, con los pescadores del Istmo de Tehuantepec en el año de 1993, el entonces presidente Municipal, firmaba una minuta de acuerdos con Petróleos Mexicanos y diferentes funcionarios del gobierno federal y estatal entre los que resaltaban el de la instalación de una gasolinera rural, incentivar el cultivo y la explotación del pepino de mar y la construcción de arrecifes. Sin embargo, en más de 15 años, jamás se implementaron los acuerdos por los grandes intereses de los burócratas de PEMEX y los funcionarios federales y estatales, y resulta indignante y curioso que, en poco menos de dos años, a Juan Camilo Mouriño, se le otorgaban concesiones en todo el corredor del Istmo. Esto, sería algo que tendrían que aclarar los burócratas y ladrones en PEMEX y volver a respetar aquellos acuerdos firmados y que no se han cumplido.

Claro, por esa misma razón entendemos que los esfuerzos electorales en esa región están encausados para retomar el control por parte de los hombres del poder y dentro de este esquema, tendremos muchas sorpresas. De lo que no tenemos mayores dudas es que el movimiento camionero y transportista en general continuará progresando en todo el país y que generará grandes choques y conflictos entre los grupos sociales ya que solo se han beneficiado y se beneficiarán a los grandes grupos, a los mafiosos, a los dueños de los pulpos camioneros y de transporte, los pequeños transportistas, los taxistas y peseros independientes, solamente tienen como final, el de dejar sus concesiones, sus placas y unidades, a los grandes mafiosos del transporte nacional.

En muchas empresas del transporte nacional se tienen acuerdos con las autoridades para manifestar menores salarios a los operadores con el fin de no cubrir adecuadamente las cuotas del seguro social y las del Infonavit y las demás prestaciones que les corresponden por ley a los trabajadores, los mantienen drogados, con jornadas increíbles de operación y por esa razón, son las grandes tragedias nacionales y, por si fuera poco, existe una enorme complicidad con las mafias de robo de combustibles en el país ya que en muchos sitios se distribuyen millones de litros de combustibles que son “ordeñados” en los ductos de PEMEX, ante las complicidades y corruptelas de los burócratas, los funcionarios, los policías de caminos y los empleados de esas empresas, mientras esto sucede y los grandes dueños de los PULPOS Camioneros se enriquecen, los mexicanos, continuamos pagando precios superiores a los de otros países que ni siquiera tienen petróleo.

Recordemos que en todos los estados y municipios los camioneros, los transportistas y los taxistas, juegan un papel vital en el desarrollo de los procesos electorales y a la hora de las votaciones ya que, con su apoyo y ayuda, los políticos que mantienen el control de los grupos de poder operan el acarreo de votantes y de gentes que tienen que controlar las casillas y en base a esos “servicios”, los funcionarios públicos, los presidentes municipales y los funcionarios estatales y federales, les dan enormes canonjías con las cuales se continúan operando y explotando unidades inservibles con operadores que son verdaderos matarifes y asesinos en potencia. Con unidades que sostienen una alta contaminación y mal operados, los dueños de las líneas donde se esconden muchos políticos y policías, así como en las concesiones de taxis, se les brindan a los “dirigentes sociales” o a los cuates del gobernador o del jefe de tránsito se cargan con mezclas de combustibles altamente contaminantes y, por esa razón, vemos los escapes con humo negro que afecta al ambiente con toda la protección y complacencia de las misma autoridades, por esa razón, vemos que los vehículos que operan utilizan gasolinas robadas y las mezclan con otros productos y contaminan mucho, igual sucede con las unidades de diesel, por esa razón, las utilidades de los transportistas son enormes, al grado tal que un vehículo de transporte público en ciudades normales recupera la inversión del mismo en menos de seis meses y después, los dejan en renta a los operadores, con cuotas que van desde los mil pesos por turno a los dos o tres mil, dependiendo las rutas y el estado en el que se encuentran y, en el caso de los taxis, muchas de las placas y de las concesiones, se rentan, y ni siquiera tienen que comprar las unidades, por esa razón se las brindan a los “dirigentes sociales” y a los grandes mafiosos de las instituciones, con un sentido electorero y de control político.

Por esas y otras muchas razones vemos, en todas las carreteras del país, a los policías de caminos, haciendo los grandes negocios con los transportistas de combustibles, porque saben que una parte está documentada y otra muy importante y que les deja grandes cantidades de dinero son las que andan sin documentación, porque es combustible robado o similares que vienen de contrabando desde los Estados Unidos y que son los que nos venden en las gasolineras, a todos los consumidores, porque no existen autoridades que pongan freno a esos pulpos gasolineros que controlan a las estaciones en todo el país. Nos venden litros de menos cantidad, mezclan las gasolinas con otros combustibles, ya sean robados o los similares y, con ello, en la distribución a gran escala, ellos, controlan también parte del transporte a nivel estatal y nacional. El negocio es junto y por esa razón, los mexicanos, los consumidores, estamos totalmente indefensos ante las trácalas, robos y fraudes que realizan esos mafiosos a los que protegen las autoridades y los funcionarios, no solamente porque les deben muchos favores, sino, porque ellos, están también en los negocios.

En fin, el nudo de complicidades, de corruptelas y de ineficiencias es enorme y dudamos que con las ligas y compromisos que sostienen los burócratas, los políticos, los policías y los dueños de las líneas de transporte de carga, pasajeros y de urbanos, se puedan doblegar y por ello, en muchos centros universitarios que son altamente receptivos a las demandas sociales, se preparan ya los lideres para enfrentar este complejo problema, como en aquellos años de 1970, cuando la crisis llegaba a las calles, con camiones secuestrados, paros camioneros, carreteras bloqueadas, desabasto de mercancías y de alimentos, crisis en la industria y, miles de ciudadanos y estudiantes daban la batalla para obligar al gobierno a atender el conflicto y ayudar a los verdaderos dueños del transporte que lo requerían y meter en cintura a los grandes pulpos camioneros que controlaban en aquel tiempo, como hoy lo hacen incluyendo a algunos ex gobernadores y ex presidentes municipales, el transporte, en muchas ciudades del país.

En las crisis del transporte los costos políticos y sociales son enormes y por ello creemos que los panistas no están poniendo la atención necesaria para solucionarlo y si crece, tendremos graves y serios conflictos políticos y sociales que desembocarán en una violencia callejera que puede aumentar en muchas zonas y niveles sociales en el país.

No hay comentarios: