“NÚNCA FALTA UN ÁNGEL DONDE APARECE UN DIABLO”.
Y bueno, esto es lo que quisieran que sucediera, como milagro, en la calles de todas las ciudades donde la inseguridad es la constante y las matazones son la nota diaria de todos los medios de comunicación. Por ello, cuando vemos notas donde algún desquiciado mata impunemente a los niños de una guardería, donde los militares y miembros de la CIA detienen y torturan o asesinan a los que consideran posibles terroristas o peligrosos, cuando vemos que el cinismo de los políticos llega a cualquier extremo y que declaran lo que no podrán hacer o se envician o se enriquecen con total impunidad y vemos que arreglan sus diferencias con asesinatos en las calles moviendo a sus sicarios y pistoleros con toda impunidad y prepotencia, sabemos que estamos ya en los principios de los procesos electorales y es así que en esa “viciosa guerra,” donde aseguran que todo se vale y que no hay límite para arreglar las diferencias, vemos que cada vez más los asesinatos políticos se acercan a los escándalos diarios en las poblaciones del país y, muchos de ellos, se ocultan a la opinión pública presentándoles como “ajustes de cuentas” en la lucha por el control de los grupos de la delincuencia organizada.
Algunos me preguntarán el por qué pongo en la lista a la CIA y es claro que los grupos paramilitares del país y algunos policías y otros militares, tienen relaciones de este nivel y permiten o se hacen guajes ante las diferentes cárceles clandestinas que operan en muchos lugares, con la total protección e impunidad de funcionarios, políticos y policías ligados con esas organizaciones internacionales y, por esa misma razón, el actual presidente Obama, acaba de declarar que se deben cancelar y eliminar esas cárceles clandestinas con las que operan en muchos sitios de todo el mundo, incluyendo, sin duda alguna, México.
El día de ayer en el puente internacional de Nuevo Laredo, se encontró y desactivo una bomba, con lo cual se viene demostrando que existen esas raras operaciones encubiertas, realizadas por los grupos de policía y los grupos de inteligencia, con el fin de generar las condiciones de impacto publicitario y de comunicación, para realizar, con este tipo de pretexto, operaciones de barrido donde pueden eliminar todos los derechos humanos y de seguridad de la población, con el argumento de que combatirán a los delincuentes o a sus grupos y esto es lo que sucederá, próximamente, en toda la zona fronteriza del Norte del país, donde los grupos de policías, espias y militares de ambos lados, podrán actuar en el lado mexicano, con total impunidad y protección de las autoridades mexicanas, con el criterio de que se debe eliminar a los delincuentes que tienen el control de la región y en forma especia, enfocarán sus baterías para eliminar de paso a todas las organizaciones y personas que se consideran políticamente inadecuadas y contrarias a su forma de pensar, a las podrán acusar como posibles “terroristas”, con lo que pretenden garantizar la paz social ante las muchos signos de que, con la crisis económica, con la explotación y la marginación de millones de gentes en el desempleo, se pueden producir movimientos de protesta que puedan poner en riesgo la seguridad norteamericana.
Por esta razón, los retenes, que son totalmente anticonstitucionales, los operan los policías, disfrazados de bandidos, con capuchas, para que con esa inmunidad, puedan realizar toda clase de tropelías contra los ciudadanos y, con el pretexto de que están luchando en contra de verdaderos criminales, cuando en sus filas se encuentran muchos criminales que son totalmente protegidos y usados para eliminar a enemigos políticos de muchos policías y de muchos políticos,
En varios lados del país se conocen historias de gentes que han tenido que soportar los famosos cateos y los “levantotes”, operados por los sicarios y asesinos con los que cuentan los policías o sus mandos y, con este pretexto, han entrado a secuestrar o robar a muchas familias a las que roban sus joyas, papeles y documentos cobrables o bien, les obligan a firmar las facturas de sus vehículos o de sus propiedades, como si las hubieran adquirido honestamente. Los grupos operativos de asesinos , secuestradores y matones, rateros y demás gandayas que están al servicio de los policías o de sus mandos, todos, visten igual y cuando en bola y armados han entrado a las propiedades, sin ordenes de cateos o violaciones oficiales, autorizadas por los jueces, pues nadie puede solicitar las identificaciones y esto, lo hacen así, los policías, con el fin de que si existe el riesgo de denuncias ciudadanas, no se puedan dar mayores datos sobre esos rateros y asesinos con los que debemos enfrentarnos, todos los días y que están realizando verdaderas tropelías autorizadas por sus jefes y mandos, bajo el pretexto de que, como ganan poco y arriesgan sus vidas, pues tienen derecho a robar y saquear los domicilios en lo que se llama “botín de guerra”, o bien, si encuentran los vehículos o las propiedades que se han robado con todos los documentos y firmados a la fuerza por las víctimas, no puedan tener elementos para las demandas ya que todos saben que, de hacerlo, lo más seguro es que lo carguen a uno con drogas o bien le brinden un “levantón” para que aparezca sin cabeza o con un tiro de gracia, para aparentar que es un crimen de la mafia.
En este escenario violento en el que vivimos, sumidos en el terror y el horror, los policías no cuentan con controles adecuados para sus propios asesinos y rateros que tienen bajo su mando y es por esa razón, por la que también, el Ejército Mexicano, que cuenta con muchos oficiales totalmente probados y capacitados, están tomando los mandos en la Secretaría de Seguridad Pública Federal y otras instituciones de inteligencia, solamente, faltaría que se posicionaran en las aduanas y otros puertos de entrada en el país, ya que, sin duda alguna, tendremos en las limpias de los policías a cientos de delincuentes que saldrán, con toda la protección de sus cuates y ex jefes, a continuar robando, secuestrando, contrabandeando, afiliándose a los distintos grupos mafiosos que ahora, nos aseguran, han pactado una tregua para no continuar las matanzas.
Y si fuera cierto este pacto de los cárteles de narcotraficantes, es claro que a los grupos que van a operar con policías y soldados, miembros de la inteligencia norteamericana que estarán en los operativos contra determinados líderes de los cárteles y que, encapuchados y con una buena banda de policías y paramilitares mexicanos, generarán una violencia terrible y actos de provocación, que son utilizados para justificar esa violencia que, en su gran mayoría, se ejerce en contra de los ciudadanos inocentes a los que violan todos sus derechos y garantías constitucionales y, como son las propias autoridades, los políticos y los funcionarios que están metidos en este complot contra el país, no hay forma ni de queja ni de investigación, porque como decíamos siempre, en la política: socios o cómplices y esto es lo que se genera en los acuerdos de la aplicación de la violencia en contra de los mexicanos, con grupos combinados de sicarios y miembros de la inteligencia de los Estados Unidos, tal y como lo han venido haciendo ya, en muchas partes del país.
Por esa razón, donde se aparecen los diablos, también tenemos la esperanza que se parezcan los ángeles, pero sobre todo, que exista la organización social y política que sea capaz y honesta para defender los derechos y las garantías de los mexicanos que son violentadas todos los días, por los policías mexicanos, apoyados por muchos extranjeros que operan con total impunidad en nuestro territorio… así que a rezar y encomendarnos a todos los santos.
Y bueno, esto es lo que quisieran que sucediera, como milagro, en la calles de todas las ciudades donde la inseguridad es la constante y las matazones son la nota diaria de todos los medios de comunicación. Por ello, cuando vemos notas donde algún desquiciado mata impunemente a los niños de una guardería, donde los militares y miembros de la CIA detienen y torturan o asesinan a los que consideran posibles terroristas o peligrosos, cuando vemos que el cinismo de los políticos llega a cualquier extremo y que declaran lo que no podrán hacer o se envician o se enriquecen con total impunidad y vemos que arreglan sus diferencias con asesinatos en las calles moviendo a sus sicarios y pistoleros con toda impunidad y prepotencia, sabemos que estamos ya en los principios de los procesos electorales y es así que en esa “viciosa guerra,” donde aseguran que todo se vale y que no hay límite para arreglar las diferencias, vemos que cada vez más los asesinatos políticos se acercan a los escándalos diarios en las poblaciones del país y, muchos de ellos, se ocultan a la opinión pública presentándoles como “ajustes de cuentas” en la lucha por el control de los grupos de la delincuencia organizada.
Algunos me preguntarán el por qué pongo en la lista a la CIA y es claro que los grupos paramilitares del país y algunos policías y otros militares, tienen relaciones de este nivel y permiten o se hacen guajes ante las diferentes cárceles clandestinas que operan en muchos lugares, con la total protección e impunidad de funcionarios, políticos y policías ligados con esas organizaciones internacionales y, por esa misma razón, el actual presidente Obama, acaba de declarar que se deben cancelar y eliminar esas cárceles clandestinas con las que operan en muchos sitios de todo el mundo, incluyendo, sin duda alguna, México.
El día de ayer en el puente internacional de Nuevo Laredo, se encontró y desactivo una bomba, con lo cual se viene demostrando que existen esas raras operaciones encubiertas, realizadas por los grupos de policía y los grupos de inteligencia, con el fin de generar las condiciones de impacto publicitario y de comunicación, para realizar, con este tipo de pretexto, operaciones de barrido donde pueden eliminar todos los derechos humanos y de seguridad de la población, con el argumento de que combatirán a los delincuentes o a sus grupos y esto es lo que sucederá, próximamente, en toda la zona fronteriza del Norte del país, donde los grupos de policías, espias y militares de ambos lados, podrán actuar en el lado mexicano, con total impunidad y protección de las autoridades mexicanas, con el criterio de que se debe eliminar a los delincuentes que tienen el control de la región y en forma especia, enfocarán sus baterías para eliminar de paso a todas las organizaciones y personas que se consideran políticamente inadecuadas y contrarias a su forma de pensar, a las podrán acusar como posibles “terroristas”, con lo que pretenden garantizar la paz social ante las muchos signos de que, con la crisis económica, con la explotación y la marginación de millones de gentes en el desempleo, se pueden producir movimientos de protesta que puedan poner en riesgo la seguridad norteamericana.
Por esta razón, los retenes, que son totalmente anticonstitucionales, los operan los policías, disfrazados de bandidos, con capuchas, para que con esa inmunidad, puedan realizar toda clase de tropelías contra los ciudadanos y, con el pretexto de que están luchando en contra de verdaderos criminales, cuando en sus filas se encuentran muchos criminales que son totalmente protegidos y usados para eliminar a enemigos políticos de muchos policías y de muchos políticos,
En varios lados del país se conocen historias de gentes que han tenido que soportar los famosos cateos y los “levantotes”, operados por los sicarios y asesinos con los que cuentan los policías o sus mandos y, con este pretexto, han entrado a secuestrar o robar a muchas familias a las que roban sus joyas, papeles y documentos cobrables o bien, les obligan a firmar las facturas de sus vehículos o de sus propiedades, como si las hubieran adquirido honestamente. Los grupos operativos de asesinos , secuestradores y matones, rateros y demás gandayas que están al servicio de los policías o de sus mandos, todos, visten igual y cuando en bola y armados han entrado a las propiedades, sin ordenes de cateos o violaciones oficiales, autorizadas por los jueces, pues nadie puede solicitar las identificaciones y esto, lo hacen así, los policías, con el fin de que si existe el riesgo de denuncias ciudadanas, no se puedan dar mayores datos sobre esos rateros y asesinos con los que debemos enfrentarnos, todos los días y que están realizando verdaderas tropelías autorizadas por sus jefes y mandos, bajo el pretexto de que, como ganan poco y arriesgan sus vidas, pues tienen derecho a robar y saquear los domicilios en lo que se llama “botín de guerra”, o bien, si encuentran los vehículos o las propiedades que se han robado con todos los documentos y firmados a la fuerza por las víctimas, no puedan tener elementos para las demandas ya que todos saben que, de hacerlo, lo más seguro es que lo carguen a uno con drogas o bien le brinden un “levantón” para que aparezca sin cabeza o con un tiro de gracia, para aparentar que es un crimen de la mafia.
En este escenario violento en el que vivimos, sumidos en el terror y el horror, los policías no cuentan con controles adecuados para sus propios asesinos y rateros que tienen bajo su mando y es por esa razón, por la que también, el Ejército Mexicano, que cuenta con muchos oficiales totalmente probados y capacitados, están tomando los mandos en la Secretaría de Seguridad Pública Federal y otras instituciones de inteligencia, solamente, faltaría que se posicionaran en las aduanas y otros puertos de entrada en el país, ya que, sin duda alguna, tendremos en las limpias de los policías a cientos de delincuentes que saldrán, con toda la protección de sus cuates y ex jefes, a continuar robando, secuestrando, contrabandeando, afiliándose a los distintos grupos mafiosos que ahora, nos aseguran, han pactado una tregua para no continuar las matanzas.
Y si fuera cierto este pacto de los cárteles de narcotraficantes, es claro que a los grupos que van a operar con policías y soldados, miembros de la inteligencia norteamericana que estarán en los operativos contra determinados líderes de los cárteles y que, encapuchados y con una buena banda de policías y paramilitares mexicanos, generarán una violencia terrible y actos de provocación, que son utilizados para justificar esa violencia que, en su gran mayoría, se ejerce en contra de los ciudadanos inocentes a los que violan todos sus derechos y garantías constitucionales y, como son las propias autoridades, los políticos y los funcionarios que están metidos en este complot contra el país, no hay forma ni de queja ni de investigación, porque como decíamos siempre, en la política: socios o cómplices y esto es lo que se genera en los acuerdos de la aplicación de la violencia en contra de los mexicanos, con grupos combinados de sicarios y miembros de la inteligencia de los Estados Unidos, tal y como lo han venido haciendo ya, en muchas partes del país.
Por esa razón, donde se aparecen los diablos, también tenemos la esperanza que se parezcan los ángeles, pero sobre todo, que exista la organización social y política que sea capaz y honesta para defender los derechos y las garantías de los mexicanos que son violentadas todos los días, por los policías mexicanos, apoyados por muchos extranjeros que operan con total impunidad en nuestro territorio… así que a rezar y encomendarnos a todos los santos.
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