viernes, 4 de marzo de 2016

¿Qué es el ego?

Alexandro, me envió un cuento Zen que es muy interesante, habla sobre el EGO:
“El Primer ministro de la dinastía Tang era un héroe nacional por su éxito como estadista y líder militar. Pero a pesar de su fama, poder y riqueza, se consideraba él mismo como un devoto y humilde budista. Visitaba a menudo  a su maestro preferido de ZEN para estudiar bajo su instrucción, y parecían llevarse muy bien. El hecho de que era primer ministro no tenía, aparentemente, ningún efecto en su relación, la cual parecía ser simplemente una de un reverendo maestro y un respetuoso estudiante. Un día, durante su visita, el primer ministro le preguntó al maestro:
         -Su reverencia, según el Budismo ¿qué es el EGO?
         La cara del maestro se puso roja, y en un tono muy condescendiente e insultante, increpó a modo de respuesta:¿Qué clase de pregunta estúpida es ésa?.
         ESTA IMPREVISTA RESPUESTA CONMOCIONÓ TANTO AL PRIMER MINISTRO QUE LLEGÓ A FRUNCIR EL CEÑO Y A ENFADARSE.
                   ENTONCES, EL MAESTRO zen, SONRIÓ Y DIJO:
         -ESTO, SU EXCELENCIA, ES EL EGO”
         Todos entendemos lo que es el ego, a lo mejor no lo controlamos, estamos ávidos de tener reconocimientos y sumisiones en la vida, olvidamos el trato humilde y necesario para con los demás, normalmente, todos o casi todos pretendemos obtener cosas y sumisiones para nuestro beneficio. En política pocas veces se llega a dominar el ego, este es inflado por los lambiscones que con tal de tener reconocimiento y aceptación por el que manda, son capaces de pelear y matar si es necesario, sobre todo cuando se trata de puestos y de presupuestos y de poder. La lucha encarnizada del poder no domina al ego, al contrario, lo infla, y con eso destruyen muchas cosas y muchas ilusiones y gentes. Todos sabemos que las reuniones entre políticos y periodistas siempre tienen mucho de ego de las dos partes; unos porque se sienten indispensables para ser los vínculos o medio para darles lustre y reconocimiento a los políticos, y los políticos porque creen que brillan tanto que pueden iluminar a los demás mortales con lo que dicen y explican. En tal relación es importante definir los egos, y sobre todo, entender que las formas dicen mucho de los fondos, y por tal motivo, las declaraciones de Manlio Fabio Beltrones, ante los periodistas en una reunión convocada por él, definió mucho de lo que se vive en la actualidad.
         Le preguntaron a boca de jarro si él buscará la candidatura a la presidencia de la república para el 2018. Él, declaraba con firmeza: “NO. Porque sería inequitativo y desleal”, y aclaraba la razón: “Completamente, además, se me partiría el PRI. Mira lo que está pasando en el PAN. Imagínate si estuviera saliendo en los spots de radio y televisión todo el día. Cómo pediría unidad a los candidatos en los estados, lo que ya de por sí es bastante complicado. Cómo los convencería de que hay un proyecto común, neutral por el partido”.
         Y como señalaba que la forma es fondo, la realidad es que podemos entender que estamos escuchando a un político formado en la política de la vieja escuela con la modernidad que se requiere en la actualidad. Sin duda, lo aprendido desde que era estudiante y colaboraba con Fernando Gutiérrez Barrios, le ha sido de mucha utilidad. Saber esperar los tiempos o dejar que se vayan las oportunidades antes de desviar los destinos de un país, o actuar cuando se requiera actuar para evitar una tragedia. En la actualidad hay que recomponer el tejido social, pero también hay que reconstruir a las organizaciones políticas que perdieron confianza y credibilidad, por ser, ahora, un nicho de mafiosos que se controlan por esos egos y ambiciones que vemos en muchos de los mal llamados “dirigentes”, cuando solamente son suspirantes en la lucha por el poder, y en esa lucha se ha destrozado al país de tal forma que si queremos sobrevivir debemos reconstruir la fuerza y la confianza en los partidos políticos, y si un dirigente, como Manlio Fabio Beltrones, dice que no buscará la presidencia, se debe entender que su palabra tiene valor y no lo va hacer. Esto pone una muestra de serenidad y dominio del EGO para privilegiar lo que hoy en día, cuando menos, él, cree que puede servir mejor a la recuperación de la confianza y fuerza de su organización política para dar paso a que los políticos y no los oportunistas y ambiciosos sean los que se integren a la escena política nacional.     

         La política no se hace de simples declaraciones que como pericos nos brindan en los spots las chachalacas de los partidos, así aleguen lo que aleguen, la política requiere de acciones y de desplantes propios que brinden confianza y certeza de que el que dirige en verdad sabe respetar las reglas del juego, y esto obliga a que los demás las respeten… sin duda una gran jugada de convicción de parte de Manlio Fabio Beltrones y asegura la tranquilidad de los suspirantes y del mismo presidente… uff, seguramente sabrán valorar ese ejemplo de dignidad y modestia. Si no, perderemos un tiempo precioso…

No hay comentarios: