EL PASADO DOMINGO 3 ENERO DEL 2016, murió a la edad de 89 años, el legendario Francisco de la Cruz, fundador en el DF del campamento 2 de Octubre, fundado en marzo de 1975 en la delegación Iztacalco. Oriundo de la Mixteca oaxaqueña nació el 20 de enero de 1926 y fue encarcelado varias veces por su activismo en la laucha por la vivienda popular.
Héctor González, “El Tinta Negra”, reportero de policía ha sido despedido por sus compañeros. Descanse en paz.
Ya hemos estado hablando de la contribución de los viejos en los tiempos actuales. Hoy en día la realidad económica donde no hay oportunidades de empleo y de desarrollo, porque todo se ha vendido a las empresas trasnacionales y a los grupos empresariales, dejando sin nada a los mexicanos, la situación empeora; hay que decir que el esfuerzo social estaba etiquetado en las empresas sociales y que el valor de éstas era el resultado de los trabajos de varias generaciones de los mexicanos. Los administradores del gobierno se encargaron de destruirlas para dar la idea de que no eran “rentables” y que, por tanto, había que darlas o venderlas a pecios de remate a los empresarios y así nos desmantelan de las empresas y nos dejan sin recursos. La realidad destruye el presente y el futuro de muchas generaciones, por ello, de acuerdo a los datos del censo del 2010 los jóvenes entre 20 y 29 años viven con sus padres en un porcentaje del 39.8%. Según investigaciones actualizadas el 50.7% de los jóvenes no quiere salir de sus hogares paternos muchos alegan que porque no quieren otras responsabilidades, la realidad es que al no existir fuentes de empleo que garanticen condiciones adecuadas de vida, prefieren estar contribuyendo al gasto de la casa porque simplemente no les alcanzaría lo que ganan para independizarse. La famosa generación NINI que está entre los 20 y 29 años es la que más está en los hogares paternos de tal forma que el censo de 2010 explica que viven con sus padres el 39.8% en esas edades.
Además hay que reconocer que la esperanza de vida es mayor. En 1900, “uno de cada cuatro niños veía morir a su progenitor antes de cumplir los 15 años. En 1980 las personas mayores de 55 años tenían al menos un descendiente”… ahora la gente vive más y los hijos se quedan más tiempo en las casas de sus padres… no hay de otra o se joden… y no se crea que solamente en México hay esa tendencia, está en todo el mundo y esto muestra que las condiciones de empleo son brutales y no existen y que por tanto la realidad económica obliga a la tendencia actual…. Bueno, no se piense que tenemos mamitis, lo que tenemos es necesidad de empleos bien pagados, es lo que señalan los chavos.
Y bueno todos pensaríamos que al estar los hijos con los padres y éstos aportar algo a los gastos, se ampliarían las relaciones entre la familia, pero no es así. Si bien decían los viejos: “Cuando la necesidad entra por la puerta, el amor se va por la ventana”, así, de acuerdo con las investigaciones, los viejos explican, en un 40%, que ellos se sienten solos, no hay comunicación ni buenas relaciones entre padres e hijos en la inmensa mayoría de los casos… la necesidad es cabrona y provoca distanciamientos, no solidaridad ni amor. La explicación es clara de acuerdo a la composición social de las estructuras familiares “tienen que ver con cómo se distribuye la pobreza en México, proporcionalmente la gente mayor de edad es menos pobre que los jóvenes. Cuando los ancianos son propietarios del hogar se convierten en un soporte importante. La propiedad o el domicilio es determinante en el devenir de un adulto mayor, de cómo se organiza el grupo; y en términos de abuso se pueden derivar casos de despojo y maltrato”. En todo el mundo avanza el maltrato a los viejos en el maltrato físico o emocional e incluso en el financiero, ya sea que no reciba apoyo o le roben o quiten sus ingresos. Claro que con los valores de educación y de tendencias, los mexicanos, pensamos, en la mayoría de los casos, de que los padres deben sostener a los hijos o cuando menos apoyarlos y en este chantaje vemos cosas violentas y brutales. Así, muchos piensan que por ejemplo que el cuidado de los viejos debe ser responsabilidad de la familia y en otros casos, en un treinta por ciento de cada uno, señalan que debe ser del estado y solamente el 11 % estima que es responsabilidad de ellos mismos. Así que en las condiciones de descomposición social y brutal desempleo y desigualdad económica los viejos y los jóvenes están sufriendo y las relaciones se deterioran mucho más ante la pobreza y la desigualdad.
Sin duda nuestro país empieza a entrar en la clasificación de envejecido, lo grave del asunto es que no existen condiciones para mejorar la situación y la atención a los viejos ni a los jóvenes. La política social y económica debe dar un giro importante y voltear a privilegiar la atención ciudadana y no la privatización de nuestros propios recursos sociales en impuestos y recursos naturales para que éstos sean utilizados por los políticos, empresarios y banqueros en hacer negocios privados. Así, los más grandes capitales en el país se han desarrollado por las concesiones a empresarios ligados con los políticos y han vendido los recursos nuestros y utilizado los fondos públicos para patrocinar o financiar negocios privados que no benefician a la sociedad.
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