lunes, 26 de noviembre de 2012

Jesús Murillo Karam


Señalan las crónicas que Don Benito Juárez no era especialmente brillante como abogado, era un hombre sin duda honesto, recto, estudioso, convencido, leal a los principios, comprometido con sus ideas y, sobre todo, que lo que decía y predicaba lo hacía con gran convicción de tal suerte que su máxima más hermosa era: “NO se me juzgue por mis dichos, júzgueseme por mis hechos. Mis dicho son hechos”, lo importante es que durante su mandato, por varios años acusan los mochos y reaccionarios, no tomando en cuenta de que gobernó en medio del caos y de la tragedia, en medio de la lucha interna y contra la invasión de franceses y de otros intereses, logró, siempre, agrupar en su gabinete a hombres de iguales lealtades, convicciones, honestidad y valor para salir avantes.
         Estamos convencidos de que un gobernante no es un “sabelotodo” ni un hombre superior a los demás, por  esa razón, las gentes que le rodean son vitales para su buen desempeño. Ya lo vimos en varios sitios donde las “burbujas” de los que rodean a los políticos en el poder causan las grandes tragedias y logran los grandes saqueos y robos a los bienes de los pueblos y las administraciones. Esto, lo hemos visto repetidas veces y, los que gozan del poder, los que se benefician del mismo, son, por supuesto, los que rodean a los funcionarios y gobernantes para que no vean sus raterías y debilidades o para que no descubran sus complicidades y sociedades. Esas cúpulas o burbujas del poder son las que generan las grandes tragedias y las que encubren los robos, ineficiencias, complicidades y corruptelas y es así que, por esa razón, los políticos en el poder o los funcionarios tratan de ocultar quiénes son en la realidad los que les van a acompañar en su mandato o gobierno. Así, se van formando los grupos de protegidos y de privilegiados por la amistad y el brazo poderosos de los que mandan y ordenan y es así que, ese grupo se enriquece y logra hacer muchos negocios y complicidades que les brinda el poder, por el cual se enriquecen. Ejemplos actuales hay muchos en muchos gobiernos.
         En el gabinete que proyecta Enrique Peña Nieto, se habla de que Jesús Murillo Karam será el nuevo procurador General de la República, sin duda, es un hombre que tiene mucha experiencia y virtudes, ha sido dirigente estudiantil en la Universidad de Hidalgo, funcionario de la Reforma Agraria, secretario general de gobierno, militante del PRI desde joven, Gobernador y delegado de su partido en varios estados, diputado y senador, no se podrá negar la experiencia que tiene en la política y en la función pública, poco le podrán contar sobre este tema, sobre todo cuando el Presidente Peña Nieto establece como una prioridad la política contra la corrupción y ahí, sin duda, tendrá que actuar con honestidad, claridad, valor y eficiencia Jesús Murillo Karam, así que se puede esperar en este inicio de sexenio, una acción de la justicia en contra de muchos corruptos de este y anteriores gobiernos, ojalá, no quede como ha quedado en Oaxaca, que se habló mucho de llevar ante la justicia a los responsables del saqueo en ese estado ante la justicia, para quedar en la nada, en la complicidad y la impunidad… como Don Benito Juárez, esperamos que los dichos sean hechos en este nuevo gobierno del PRI, sino, todo habrá sido en vano…
         SE TIENE LA CONVICCIÓN DE QUE EN LA Secretaría de Hacienda estará uno de sus hombres de confianza, Luís Videgaray Caso y en la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong y de ahí seguirán las Secretaría de Educación, Trabajo, Turismo, Defensa Nacional, Marina, pero hay que reconocer que las modificaciones que se han aprobado en la Secretaría de Gobernación, muestran la preocupación sobre las grandes fallas y el terrible baño de sangre que ha dejado una política perversa y de ineficiencia que solamente tuvo, como tendencia, el dar entrada a las acciones de los norteamericanos en el control de la seguridad y en el manejo, venta de armas y equipo de su economía de guerra, donde se ha generado un baño de sangre que, dicen los enterados que, llegan a los cien mil asesinados en este sexenio, miles de desaparecidos, miles de mutilados y miles y miles de desplazados en más del cincuenta por ciento del territorio nacional y, cuando vemos la ineficiencia, las complicidades y las corruptelas generadas por una política represiva operada por lo que fue la Secretaría de Seguridad tenemos que entender la preocupación para fortalecer a la Procuraduría General de la Republica y colocar al frente de la misma a un político de confianza y experimentado en varios niveles de la política y la administración, para garantizar un adecuado manejo de la ley y aplicación de la justicia y no dar palos de ciego, como se han venido dando en las administraciones panistas,  donde la acción judicial se aplico en contra de los enemigos del poder y de los poderosos y se hizo un uso político de la justicia para intimidar a los demás grupos políticos y a los políticos que se oponían a las acciones caprichosas de Felipe calderón…
         Reformar la Secretaría de Gobernación no es darle un súper poder al nuevo secretario del ramo, simplemente es evitar que la utilización de la información, el espionaje y la “inteligencia” operada por los cuerpos de seguridad, no sean utilizados como se venían usando en las venganzas políticas de funcionarios y políticos en el poder. No se puede negar que muchas acciones de la policía se hicieron siendo instrucciones políticas y venganzas operadas desde el poder y que no tenían más intención que la eliminación de los “enemigos de los políticos y de los funcionarios”, también ,se debe entender que no se puede continuar usando a las policías y a la inteligencia del estado en contra de los grupos y organizaciones políticas y menos se puede utilizar esa fuerza que debe ser para el servicio de los mexicanos y para garantizar la seguridad pública y nacional, en el beneficio de los policías y espías del gobierno norteamericano que han impuesto un control en los cuerpos de policía y de seguridad, para beneficiarse ellos a costa de la propia seguridad de los mexicanos. Garantizar la seguridad pública y la nacional es una urgencia y necesidad.
         Utilizar la “guerra” contra el narcotráfico como un pretexto que encubra la represión política a nivel nacional es un verdadero crimen que genera desconfianza en la acción del gobierno y sacude conciencias para luchar en su contra. Sabemos que las policías siguen con sus complicidades y corruptelas con los grupos de delincuentes y que, muchos encarcelados en este sexenio son inocentes, como miles de asesinados por los delincuentes y los policías también nada tenían que ver con la delincuencia y, por esa razón, las organizaciones internacionales hablan de la violación a los derechos y garantías de los mexicanos y del aumento a la tortura de parte del gobierno y las policías políticas del país. Así que el cambio tiene un gran sentido humano y de justicia para todos…y servirá para recuperar la seguridad nacional y no dejarla en manos de los policías y espías norteamericanos como se encuentra en la actualidad…socrates_campos8@yahoo.com.mx Véanos en el canal 95 de cable, lunes y viernes en el programa Voces a las 7 de la noche.

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