El día de la familia y la mujer.

Hace algunos años escuchábamos mucho aquello. De que no vayas a salir con tu domingo siete y no hay duda de que los domingos siete, son buenos, cuando se saben gozar con la familia y el día siete, fue el Día de la Familia y, al igual que hoy, el Día de la Mujer, los festejos se dieron con ese amplio afán de publicidad, más no de reflexión y bueno, pensamos de que aquello de que no debería uno salir con el famoso domingo siete, sigue vigente. Muchos festejos, los políticos, hacen se conviertan en domingos sietes…

La verdad es que cuando se conoce la realidad y vemos a nuestras mujeres salir cada día a laborar con muchas opciones en contra, luchando porque se les reconozca la capacidad para ser igual que nosotros y veamos que simplemente, en muchos casos, se utilizan como un simple parapeto para que ellas den la cara y ellos gocen de los contratos o los negocios que se hacen en el campo de la política, tenemos que pensar que eso de la igualdad de género simplemente es una farsa y que en el caso de la política no existe tal convicción. Solamente son declaraciones demagógicas y no tienen nada que ver con la realidad. Es lógico que por ejemplo, en estados de enorme retraso social, eso de la igualdad de género solamente son declaraciones y se usan para darnos “atole con el dedo”. Sobre todo cuando vemos que muchas de las famosas POLÍTICAS no tienen un dedo de frente ni conocen lo que son valores y convicciones ideológicas, porque en general manejan un atraso en tales temas y creen, en muchos casos que solamente, enseñando pierna o balanceando el trasero, pueden conquistar posiciones políticas en las que cobran mucho más que cualquier profesionista bien capacitado y esto, no muestra la igualdad de género, sino la forma en que se manipulan y generan las farsas en este sistema. Por supuesto que no dejamos de reconocer que existen mujeres en la política que muestran grandes dotes y gran capacidad, que tienen convicciones y saben ejercer la política y han conquistado sus posiciones a base de talento y no por prestarse a ser simples “acompañantes” de los políticos que les han dado oportunidades y les pagan grandes cantidades de dinero, por esas “dotes” que siempre muestran, pero que nada tienen que ver con el campo de la política, porque a lo mejor, servirían mostrarse en algún mediocre concurso de belleza, pero no para la política. Mostrar las dotes, no es lo mismo que servir en forma adecuada en la acción comunitaria y dar lo mejor en el campo de la política a los demás. Por desgracia, al igual que en otros muchos casos, NO VIVEN PARA LA POLÍTICA, VIVEN DE LA POLÍTICA y por medio de la política realizan transas, negocios y ganan dinero, porque lograran despacharse con la cuchara grande y que los recursos públicos lleguen a sus bolsillos.

En todas las partes del país, cuando vemos que en cuatro años el número de pobres ha aumentado en más de ocho millones, nos podemos imaginar que las peores consecuencias las sufren las mujeres, en esos campos vemos que ellas llevan el peor peso de la pobreza y de la marginación, ahí vemos a millones de ellas, de mujeres mexicanas que no van a la escuela, que van a los ríos o alguna fuente de agua para lavar y lavar en cualquier condición que se viva, que todos los días cumplen con un trabajo monótono, sufren agresiones de todo tipo, explotación y discriminación, sin embargo, los políticos y las políticas, se dan vuelo con el tema y aprovechan el día y la festividad para dar discursos y pláticas, no soluciones a los graves problemas que enfrentan las mujeres y, sin duda, a esas políticas les sirven tales días porque salen en fotos, discursos, entrevistas y se van cotizando más y gozando del vivir de la política con el cuento de la igualdad de género… pero la realidad las debe centrar en el tema y no hay duda de que tal igualdad es una simple esperanza que ojala, algún día, se cumpla y se logre, porque no tenemos duda de que en los tiempos actuales, las mujeres, se van labrando un camino en todas las sociedades, ellas, nos han dado muestras del talento artístico, de la entrega y valor por amor a la familia y a sus actividades, ellas, nos han demostrado su capacidad y talento en la administración, en el campo científico o en el campo civil y administrativo y, donde muchos tenemos dudas es en los caminos que han logrado en la política, porque sin duda, hay muchas mujeres talentosas y entregadas, con capacidad que ejercen la política, pero en otros casos, algunas, aprovechan el trampolín político para vivir de la política y no vivir para la política y así, han sido utilizadas por sus propios maridos para alcanzar contratos o lograr vivir de los sueldos y negocios que se generan por medio de la política y claro, así, no sirven de nada, porque, simplemente, son utilizadas, explotadas para conseguir, no para servir…

Los ejemplos de mujeres heroicas en la cotidianidad las tenemos en cada casa del país, ellas son las que llevan el peso de la formación de los hijos, de la atención a los mismos, del cuidado de su alimentación, de su limpieza, de la atención general y las condiciones actuales además, les exigen el que trabajen en cualquier cosa, porque con ese amplio amor y entrega, ellas, son las que también aportan una parte importante en el ingreso familiar, sin embargo, esos millones de mujeres que todos los días entregan su talento, su capacidad, su emoción, su amor y su trabajo, no tienen ni cuentan con lo que tanto se pregona en la igualdad de género y esas mujeres, no tienen ni voz y, en muchos casos, tampoco cuentan con voto, porque en sus actividades cotidianas ellas no tienen tiempo para andar en las grillas y en los teje manejes de las que se dedican a la política tal como vemos, en muchos casos, que se usan y explotan a esas “políticas”, para la foto y para dar cause a los negocios y las transas del poder.

Por esa razón los días donde se dice que se festeja algo, no son más que días que se han creado para ocultar la realidad, para generar negocios o para que un grupo de políticos se muestre en los medios, para justificar el mal manejo de los recursos presupuestales y el que, esos recursos, se destinen a sus cuentas bancarias o a aumentar sus riquezas, porque por desgracia, la realidad, nos viene marcando que la política es convertida en el mejor negocio del mundo, mientras tanto, en el país, se ven las transas y las componendas que se realizan al margen de lo que debería ser respetado: la división de los poderes y es así que entre diputados, partidos y funcionarios, gobernadores, se transan los acuerdos que deberían ser rechazados o aprobados solamente por el Congreso, y esto nos muestra que en el país, eso de la división de poderes es un cuento más en los festejos del centenario y del bicentenario… total, los mexicanos nos tragamos todo y pagamos por todo para no recibir nada. La política no solamente es un gran negocio, también, es una gran farsa, una enorme mentira.

Tal vez por esa razón cuando vemos que en el país se dan manifestaciones de violencia y de protesta de carácter popular vemos que se inician y aproximan los movimientos que pueden llevarnos a la desestabilización, a la anarquía y a la violencia y no es este el mejor camino que podemos darnos porque al perder la PAZ SOCIAL estamos poniendo en riesgo el presente y el futuro de México y, por desgracia, no vemos en el horizonte de la política que contemos con líderes que puedan mostrarnos el mejor camino, porque si desde ahora se protege el “triunfo” futuro de Enrique Peña Nieto, por medio de transas y acuerdos entre funcionarios y dirigentes de partidos, violando el libre ejercicio de la democracia y atando las manos al libre juego de la vida política del país y se transan acuerdos que deberían ser tomados por diputados y senadores, por dirigentes políticos y funcionarios, vemos que se han torcido los caminos de la vida democrática del país y se pone en riesgo la división de poderes que debería de existir para garantizar un mejor juego democrático. Si seguimos en este camino, lo mejor, para los políticos es imponer una dictadura y dejarse de mentiras y de jueguitos que solamente demuestran que, en la política, se busca proteger el juego de unos cuántos, no de dar pie a la manifestación democrática y la voluntad libre de los mexicanos. La política en el país es pues: UNA FARSA Y UNA MENTIRA.