Siempre hemos sostenido que anteriormente nos reíamos de los comediantes y tomábamos en serio a los políticos, pero desde hace algunos años tomamos en serio a los comediantes y nos reímos de los políticos, total serios o carcajeándose nos friegan.
A la gente en general ya poco le importa lo que sucede en la política, todos hemos entendido que la política está destinada a un selecto grupo de hampones de “cuello blanco” que propicia que la misma sea un enorme negocio, donde nos distraen para que cuando nos damos cuenta, aumentaron los impuestos, inventaron algún otro, nos aumentan las penas para que las “mordidas” sean jugosas y atractivas para los servidores públicos que supuestamente deben conocer de la seguridad, nos cambian de funcionarios o nos dan “atole con el dedo”, en fin, la política como es un espectáculo y los espectáculos se hacen política es como vemos las transformaciones de los “viudos” de la política y ahora podemos esperar que Enrique Peña Nieto, uno de los nuevos “galanes de la política mexicana” nos brinde una boda al mejor estilo de televisa o de telerisa con toda las sencillez y las cursilerías de las que nos han venido acostumbrando para que los políticos aparezcan en las revistas de espectáculos y esto lo podemos esperar ya que el mismo Galán toluqueño, dejando el “chorizo” a un lado se destapó en otro programa que conduce Katia D´Artiqgues y Sabina Berman, declarando con picoretes que efectivamente sostenía una relación formal, seria, que seguramente culminaría en boda de rancho con caballos y mariachis con “La Gaviota”, Angélica Rivera.
Y lo decía de esta forma: “Bueno, que juntos decidimos, en razón de la campaña que me hizo favor de hacer para el Estado de México, realmente ahí la conocí. Salimos y como todo proceso de noviazgo, surge que te ves alguna vez o varias veces y luego empiezas a ser novio, entonces… quería ser su novia, para darle formalidad a la relación, a la que catalogó como “un noviazgo joven”… derrochó inteligencia, poesía, se le iluminó el coco ya que sus asesores no le podían pasar tarjetas para decir lo que debería decir y tomado por sorpresa, pues se ilumina y se desnuda de alma no de cuerpo. Seguro que el otro artistilla, galán de verdad, empresario tequilero, amoroso y sincero estará destrozado por lo que se podrá producir otra telenovela para idiotizar más a las vieja y viejos que pierden el tiempo con tales pentonterías.
Ya vemos las actitudes del “galán de las estrellas” Enrique Peña Nieto que como cacique de pueblo o como virrey de estado, dice que todo empieza en su amor, “con la campaña que le hizo el favor de hacer para el Estado de México” y por loa que le pagaron por sus servicios y por la promoción de “la Gaviota” en las pantallas chicas, de tal suerte que, ahora, los chorizos no son los toluqueños, sino los tacos de moronga que se pueden comprar en el camino, en La Marquesa”, en la región de las “cabezas” y de los ejecutados, o promoviendo las empresas al estilo del chino Shenli Ye Gong.
En fin locaciones le sobrarán a Don Enrique Peña Nieto, claro que el otro galán, Eduardo Yañez, el despreciado en la telenovela y que sufría los estragos, las mal querencias, las mentiras, las intrigas rancheras y de vecindad, ahora se estará revolcando de dolor ante la confesión de Enrique Peña Nietro que seguramente tiene sobra de tiempo para andar de novio y de galán, promoviendo, apareciendo en los programas de tele, y tal vez, buscando la locación de boda que bien puede ser en la Hacienda del Chope Albarrán o en los sitios turísticos del Estado de México o en los campos de golf donde puedan estar los miles de invitados para esta boda del año, que promocionará en mucho ante la clase media y media baja a Enrique y La Gaviota,
Claro que las “buenas conciencias” darán el pésame a José Alberto Castro, al que la Gaviota dejo a sus hijos para volar con libertad en busca de fama, honor, fortuna ay felicidad. El problema, porque en todo existe un problema, la felicidad no puede ser tan sencilla y a pesar de que las hijas de Enrique no ponen peros en el asunto, el mismo gobernador, acepta que “salvo el niño si es… el rebelde es mi hijo” y aquí, los talentosos escritores de telenovelas podrán tener un nuevo tema para otra y de paso lanzar al estrellato a los niños de la pareja, total ahora pueden ser políticos o artistas y por este motivo el pueblo llegará con el grito de que “bonita pareja hacen” una mártir de novela y el otro “príncipe Azul” que llega a despertar a la “cenicienta de rancho”. No hay duda, no existe el mal todo el tiempo porque nadie lo aguanta y es por ello que, ahora, se bendice esta nueva relación de farándula y circo en la política y para ello, los políticos a los que encantan ser vistos con hembras de verdad, con mujeres que despiertan la compasión en las novelas y detestan a las villanas, se logrará la magia de la publicidad y ya veremos a, Quique el Gavilán con la Gaviota a su lado… y esto es bueno, para hacer una gran fiesta, total, el pueblo con esto se divierte, con fiestas, mercados, cohetes y bebidas, bolos de bautizo y mariachis, para que por un rato crean que se cumplen los sueños de la vida.
Y no es que los galanes tengan mala suerte con las mujeres, lo que sucede es que se cuidan más que las señoras y como en todo, la intriga y la infelicidad llegan día a día a tocar a las puertas de los “castillos de la ilusión”. Esto para que los jodidos no piensen que la felicidad la tienen comprada por siempre los ricos, ellos también lloran, ellos también sufren y no dejan de ser humanos a pesar de que en la publicidad política de todo se vale. Ejemplos, hemos visto muchos, y tal vez, los contratos matrimoniales deben ser motivo de análisis serios de los despachos más importantes en el país, sino tendrán los problemas como los tuvo el ex gobernador Montiel a quién no lo han salvado de la chinga que le ha colocado su señora ex esposa, que desde Francia, se desquitó de las derrotas napoleónicas. Pues sí, se salvó de la cárcel, pero no de chinga y por tal motivo este ejemplo tan cercano a Enrique Peña Nieto, debe recordar que los matrimonios para justificar la lucha por la presidencia, pueden resultar muy costosos y esto es simple porque en cuanto sales de candidato de inmediato los enemigos sacan los “tripitos al Sol” y todas las cosas malas con la que pueden destrozar una vida, una carrera y cuando esto no es suficiente, pues ahora recurren a los sicarios, a los secuestradores o los policías.
La verdad es que los galanes en la política son necesarios, no se puede mantener a los viejitos, a los políticos de oposición y por esa razón, ahora, con la muerte de Mouriño, solamente quedan dos galanes: Marcelo Ebrad y Enrique Peña Nieto. Y para no quedarse atrás entran en la carrera de la publicidad con artistas de tele, cine radio o pintoras, para esto, ya le hacen la competencia a Enrique, con ese programa de la Central de Abastos, donde las historias de los pobres que se convierten en ricos gracias a la especulación y al manejo de alimentos, demuestran que México también es un país de oportunidades, si no las tienen bien, pues se puede entrar a la política o a la artistiada… de todo se vale.
A la gente en general ya poco le importa lo que sucede en la política, todos hemos entendido que la política está destinada a un selecto grupo de hampones de “cuello blanco” que propicia que la misma sea un enorme negocio, donde nos distraen para que cuando nos damos cuenta, aumentaron los impuestos, inventaron algún otro, nos aumentan las penas para que las “mordidas” sean jugosas y atractivas para los servidores públicos que supuestamente deben conocer de la seguridad, nos cambian de funcionarios o nos dan “atole con el dedo”, en fin, la política como es un espectáculo y los espectáculos se hacen política es como vemos las transformaciones de los “viudos” de la política y ahora podemos esperar que Enrique Peña Nieto, uno de los nuevos “galanes de la política mexicana” nos brinde una boda al mejor estilo de televisa o de telerisa con toda las sencillez y las cursilerías de las que nos han venido acostumbrando para que los políticos aparezcan en las revistas de espectáculos y esto lo podemos esperar ya que el mismo Galán toluqueño, dejando el “chorizo” a un lado se destapó en otro programa que conduce Katia D´Artiqgues y Sabina Berman, declarando con picoretes que efectivamente sostenía una relación formal, seria, que seguramente culminaría en boda de rancho con caballos y mariachis con “La Gaviota”, Angélica Rivera.
Y lo decía de esta forma: “Bueno, que juntos decidimos, en razón de la campaña que me hizo favor de hacer para el Estado de México, realmente ahí la conocí. Salimos y como todo proceso de noviazgo, surge que te ves alguna vez o varias veces y luego empiezas a ser novio, entonces… quería ser su novia, para darle formalidad a la relación, a la que catalogó como “un noviazgo joven”… derrochó inteligencia, poesía, se le iluminó el coco ya que sus asesores no le podían pasar tarjetas para decir lo que debería decir y tomado por sorpresa, pues se ilumina y se desnuda de alma no de cuerpo. Seguro que el otro artistilla, galán de verdad, empresario tequilero, amoroso y sincero estará destrozado por lo que se podrá producir otra telenovela para idiotizar más a las vieja y viejos que pierden el tiempo con tales pentonterías.
Ya vemos las actitudes del “galán de las estrellas” Enrique Peña Nieto que como cacique de pueblo o como virrey de estado, dice que todo empieza en su amor, “con la campaña que le hizo el favor de hacer para el Estado de México” y por loa que le pagaron por sus servicios y por la promoción de “la Gaviota” en las pantallas chicas, de tal suerte que, ahora, los chorizos no son los toluqueños, sino los tacos de moronga que se pueden comprar en el camino, en La Marquesa”, en la región de las “cabezas” y de los ejecutados, o promoviendo las empresas al estilo del chino Shenli Ye Gong.
En fin locaciones le sobrarán a Don Enrique Peña Nieto, claro que el otro galán, Eduardo Yañez, el despreciado en la telenovela y que sufría los estragos, las mal querencias, las mentiras, las intrigas rancheras y de vecindad, ahora se estará revolcando de dolor ante la confesión de Enrique Peña Nietro que seguramente tiene sobra de tiempo para andar de novio y de galán, promoviendo, apareciendo en los programas de tele, y tal vez, buscando la locación de boda que bien puede ser en la Hacienda del Chope Albarrán o en los sitios turísticos del Estado de México o en los campos de golf donde puedan estar los miles de invitados para esta boda del año, que promocionará en mucho ante la clase media y media baja a Enrique y La Gaviota,
Claro que las “buenas conciencias” darán el pésame a José Alberto Castro, al que la Gaviota dejo a sus hijos para volar con libertad en busca de fama, honor, fortuna ay felicidad. El problema, porque en todo existe un problema, la felicidad no puede ser tan sencilla y a pesar de que las hijas de Enrique no ponen peros en el asunto, el mismo gobernador, acepta que “salvo el niño si es… el rebelde es mi hijo” y aquí, los talentosos escritores de telenovelas podrán tener un nuevo tema para otra y de paso lanzar al estrellato a los niños de la pareja, total ahora pueden ser políticos o artistas y por este motivo el pueblo llegará con el grito de que “bonita pareja hacen” una mártir de novela y el otro “príncipe Azul” que llega a despertar a la “cenicienta de rancho”. No hay duda, no existe el mal todo el tiempo porque nadie lo aguanta y es por ello que, ahora, se bendice esta nueva relación de farándula y circo en la política y para ello, los políticos a los que encantan ser vistos con hembras de verdad, con mujeres que despiertan la compasión en las novelas y detestan a las villanas, se logrará la magia de la publicidad y ya veremos a, Quique el Gavilán con la Gaviota a su lado… y esto es bueno, para hacer una gran fiesta, total, el pueblo con esto se divierte, con fiestas, mercados, cohetes y bebidas, bolos de bautizo y mariachis, para que por un rato crean que se cumplen los sueños de la vida.
Y no es que los galanes tengan mala suerte con las mujeres, lo que sucede es que se cuidan más que las señoras y como en todo, la intriga y la infelicidad llegan día a día a tocar a las puertas de los “castillos de la ilusión”. Esto para que los jodidos no piensen que la felicidad la tienen comprada por siempre los ricos, ellos también lloran, ellos también sufren y no dejan de ser humanos a pesar de que en la publicidad política de todo se vale. Ejemplos, hemos visto muchos, y tal vez, los contratos matrimoniales deben ser motivo de análisis serios de los despachos más importantes en el país, sino tendrán los problemas como los tuvo el ex gobernador Montiel a quién no lo han salvado de la chinga que le ha colocado su señora ex esposa, que desde Francia, se desquitó de las derrotas napoleónicas. Pues sí, se salvó de la cárcel, pero no de chinga y por tal motivo este ejemplo tan cercano a Enrique Peña Nieto, debe recordar que los matrimonios para justificar la lucha por la presidencia, pueden resultar muy costosos y esto es simple porque en cuanto sales de candidato de inmediato los enemigos sacan los “tripitos al Sol” y todas las cosas malas con la que pueden destrozar una vida, una carrera y cuando esto no es suficiente, pues ahora recurren a los sicarios, a los secuestradores o los policías.
La verdad es que los galanes en la política son necesarios, no se puede mantener a los viejitos, a los políticos de oposición y por esa razón, ahora, con la muerte de Mouriño, solamente quedan dos galanes: Marcelo Ebrad y Enrique Peña Nieto. Y para no quedarse atrás entran en la carrera de la publicidad con artistas de tele, cine radio o pintoras, para esto, ya le hacen la competencia a Enrique, con ese programa de la Central de Abastos, donde las historias de los pobres que se convierten en ricos gracias a la especulación y al manejo de alimentos, demuestran que México también es un país de oportunidades, si no las tienen bien, pues se puede entrar a la política o a la artistiada… de todo se vale.
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