Hace algunos años circulaba un cuento sobre las opiniones del presidente: resulta que un grupo de amigos estaba comentado y casi todos coincidían en que, los cocodrilos, volaban. Uno de ellos que no sabía el origen de esta afirmación protesto, alegando que quién asegurara que los cocodrilos volaban era un soberano pentonto e idiota. Uno de los que aseguraban eso, señaló:” Pues el que lo asegura es el presidente”. Entonces el que alegaba, reformaba su aseveración diciendo: “Bueno, vuelan, pero bajito.. bajito”.
Y esto viene a cuento ante las declaraciones del presidente del Senado, Gustavo Madero Muñoz al considerar los escenarios “exageradamente catastróficos” como el planteado por Carlos Slim, alegando que no ayudan y diciendo: “El tema de no valorar adecuadamente y no generar confianza en nosotros mismos y en la capacidad de salir adelante, es generar un clima donde puede agravarse más la situación y no ayudarnos a salir rápidamente”, claro, siguiendo todas las enseñanzas de Og Mandino.
“El tema DE LAS PROFECÍAS AUTOCUMPLIDAS ES QUERER GENERAR ESCENARIOS EXAGERADAMENTE CATASTRÓFICOS, más allá de una realidad que es muy grave, pero que tenemos que valorar y no generar un clima de desconfianza entre nosotros porque entonces precisamente vamos a autocumplir esas profecías negativas… eso es lo delicado de los diagnósticos y de las declaraciones, tenemos que ser muy cautos y reconocer que es una situación grave pero manejable”. Chín, esas sesudas reflexiones deben ser escritas con letras de oro en los pasillos de la Cámara de Senadores y dadas como solución mágica al presidente Obama que, cuando menos, no se golpeará en los helicópteros.
No piensen ustedes que estamos en todo de acuerdo a lo que señala Carlos Slim, porque además de que oculta la confrontación existente con algunos burócratas del poder y de otras prácticas monopólicas que le permiten explotarnos al tener que utilizar los servicios que nos presta a los precios que nos impone y sin defensa de nada, no quiere decir que se encuentre equivocado en sus proyecciones. Como el hombre más rico del mundo, sabe que tiene la obligación de proteger su riqueza y no hay nada mejor que decir la realidad, porque no está cuidando un escenario político electoral donde esa realidad hace mucho daño a los proyectos políticos electorales de los panistas. No, él, no tiene necesidad de enredarse en tales temas como lo hacían anteriormente los ricos que trataban de influir en las determinaciones de los presidentes, porque éstos tenían facultades de dictadores de tal suerte que tenían que plegarse a sus determinaciones y acciones. Hoy, con los cambios que se han provocado en el país, la misión de los presidentes es la de defender los intereses de los poderosos que son los que gobiernan y controlan el poder. Por ello, los viejos mañosos que hablaban de política y compromisos decían que, cuando “alguien te soba el lomo, es porque te quiere montar”, así, los sobadores profesionales eran los políticos y los funcionarios públicos que les aprendieron la maña a los grandes y poderosos caciques, dueños del poder.
Si esa famosa reunión se convocó para que todos hicieran el “fuerte” y la Valona al presidente, sin contradecirle y menos sin explicarle la realidad o de cómo se observan y ven los acontecimientos del presente y sus posibles escenarios al futuro, pues les ha salido el tiro por la culata y es que, cuando menos, existe la idea de que todos tienen la obligación de entender las “señales” del presidente, olvidando que el presidencialismo de antaño ha cambiado de tal forma que ahora no es lo mismo y si bien existen los que aceptan que los “cocodrilos vuelan, pero bajito,” hay otros que no aceptan esas afirmaciones a pesar de que se puedan cumplir todas las profecías negativas, como si se hablara de temas esotéricos o de jalas por el estilo. Con todo ello, podemos concluir que a lo mejor la maestra Elba Esther Gordillo que aseguran no ha pasado su cumpleaños en México y que anda de gira por la India, se fue para allá pensando en que los brujos nos sacarán del problema y que la consulta de los gurús es obligada para determinar lo que vamos a hacer así que, todo esto, nos lleva a los no gratos recuerdos, cuando la señora Margarita López portillo, hacía las consultas sobre la sucesión presidencial por medio de adivinos y de brujos que, para acabarla, le atinaron en todas, menos ella que se encontraba empeñada y totalmente comprometida con Javier García Paniagua, sin saber que por un lado, el presidente ,le aseguraba una cosa y el destino y los gringos hacían su chamba para que no llegara al poder con la aportación de toda la información de sus actividades y de todos los serios problemas que podía enfrentar en caso de que se impusiera. Claro, los buenos brujos, para doña Margarita, eran lo que le decían lo que ella quería escuchar.
Y por esa razón, el respetado y suertudo ganador de la lotería, del poder y de los presupuestos, Fidel Herrera Beltrán, gobernador de Veracruz, que cuenta con todo el apoyo, las visiones y destino de las profecías, tiene tal poder con los demás políticos y es así que este libro donde se habla de los brujos del poder, ha tenido tanto éxito, no solamente para el investigador, sino para los propios brujos y gurús que están en este negocio. Es así que seguramente se ha llegado a la conclusión de que la economía, es una ciencia casi exacta, pero en la cual, a los economistas, les pagan no porque nos determinen las rutas del desarrollo sino para “explicarnos las razones por las que entramos en crisis y por las que estamos jodidos” así que salen mucho más baratos y atinados los brujos y gurús, que los analistas, que no dan una.
Cuentan en la frontera que un bolero tenía la fama de ser muy acertado en los pronósticos del tiempo y como el encargado de dar los pronósticos en la radio y la televisión no acertaba una, decidió ir a consultarlo y para ello, le solicitó que le boleara los zapatos. Estando en ello le preguntó si él era el que siempre atinaba al pronóstico del tiempo y al recibir afirmativa respuesta le solicitó que le dijera su secreto para saber cómo le hacía. El bolero le dijo: “Es bien fácil, solamente escucho al pelao ese que dice el tiempo en la radio o la televisión y le doy la contraria, siempre le atino…”. Así, pareciera que están haciendo en el país, cuando materialmente podemos decir que estamos hechos bolas todos en cuestiones de análisis y consecuencias de la crisis económica mundial y que, para algunos pelaos no existe ni existirá en México, como si hablaran de Mérida, donde no pasará nada si todo el mundo se destruye.
Pero horror a quién horror merece como diría el dicho popular, porque ahora, también, existen los “fatalistas de la crisis” y si bien el secretario Alberto Cárdenas no ha dejado huella que perdure en su labor, cuando menos, pasará a la historia como un buen dicharachero donde asegura que, sin decir el nombre de Carlos Slim, hay gentes que le apuestan a que el país entre en crisis para comprar empresas a precios de remate y por ello están dispuestos a quemar la casa con tal de ver quemarse la del vecino. Un discurso ranchero que no ha despertado los ánimos en el campo sobre todo cuando asegura que a los campesinos, no les importa si llueve o no llueve, si los precios están a la baja o a la alza en sus productos, total, como siempre los chingan, pues ya ni protestan y le dan pá delante. Bueno, es más o menos lo que el señor ha querido decir o cuando menos, lo que le hemos entendido, si quieren ver el discurso textual solicítenlo por Internet. Bueno, Slim, no solamente despierta pasiones y envidias, también genera dichos y pendejadas por todos lados, ojala las pueda comercializar en la cadena de Sambors… total, que le digan lo que quieran mientras no le toquen el bolsillo, las mentadas, como quiera resbalan, las pagadas si duelen… duele más una patada al bolsillo que a los testículos, dicen que dice… así, son los comerciantes ricos… nada personal ni catastrofista.
Y esto viene a cuento ante las declaraciones del presidente del Senado, Gustavo Madero Muñoz al considerar los escenarios “exageradamente catastróficos” como el planteado por Carlos Slim, alegando que no ayudan y diciendo: “El tema de no valorar adecuadamente y no generar confianza en nosotros mismos y en la capacidad de salir adelante, es generar un clima donde puede agravarse más la situación y no ayudarnos a salir rápidamente”, claro, siguiendo todas las enseñanzas de Og Mandino.
“El tema DE LAS PROFECÍAS AUTOCUMPLIDAS ES QUERER GENERAR ESCENARIOS EXAGERADAMENTE CATASTRÓFICOS, más allá de una realidad que es muy grave, pero que tenemos que valorar y no generar un clima de desconfianza entre nosotros porque entonces precisamente vamos a autocumplir esas profecías negativas… eso es lo delicado de los diagnósticos y de las declaraciones, tenemos que ser muy cautos y reconocer que es una situación grave pero manejable”. Chín, esas sesudas reflexiones deben ser escritas con letras de oro en los pasillos de la Cámara de Senadores y dadas como solución mágica al presidente Obama que, cuando menos, no se golpeará en los helicópteros.
No piensen ustedes que estamos en todo de acuerdo a lo que señala Carlos Slim, porque además de que oculta la confrontación existente con algunos burócratas del poder y de otras prácticas monopólicas que le permiten explotarnos al tener que utilizar los servicios que nos presta a los precios que nos impone y sin defensa de nada, no quiere decir que se encuentre equivocado en sus proyecciones. Como el hombre más rico del mundo, sabe que tiene la obligación de proteger su riqueza y no hay nada mejor que decir la realidad, porque no está cuidando un escenario político electoral donde esa realidad hace mucho daño a los proyectos políticos electorales de los panistas. No, él, no tiene necesidad de enredarse en tales temas como lo hacían anteriormente los ricos que trataban de influir en las determinaciones de los presidentes, porque éstos tenían facultades de dictadores de tal suerte que tenían que plegarse a sus determinaciones y acciones. Hoy, con los cambios que se han provocado en el país, la misión de los presidentes es la de defender los intereses de los poderosos que son los que gobiernan y controlan el poder. Por ello, los viejos mañosos que hablaban de política y compromisos decían que, cuando “alguien te soba el lomo, es porque te quiere montar”, así, los sobadores profesionales eran los políticos y los funcionarios públicos que les aprendieron la maña a los grandes y poderosos caciques, dueños del poder.
Si esa famosa reunión se convocó para que todos hicieran el “fuerte” y la Valona al presidente, sin contradecirle y menos sin explicarle la realidad o de cómo se observan y ven los acontecimientos del presente y sus posibles escenarios al futuro, pues les ha salido el tiro por la culata y es que, cuando menos, existe la idea de que todos tienen la obligación de entender las “señales” del presidente, olvidando que el presidencialismo de antaño ha cambiado de tal forma que ahora no es lo mismo y si bien existen los que aceptan que los “cocodrilos vuelan, pero bajito,” hay otros que no aceptan esas afirmaciones a pesar de que se puedan cumplir todas las profecías negativas, como si se hablara de temas esotéricos o de jalas por el estilo. Con todo ello, podemos concluir que a lo mejor la maestra Elba Esther Gordillo que aseguran no ha pasado su cumpleaños en México y que anda de gira por la India, se fue para allá pensando en que los brujos nos sacarán del problema y que la consulta de los gurús es obligada para determinar lo que vamos a hacer así que, todo esto, nos lleva a los no gratos recuerdos, cuando la señora Margarita López portillo, hacía las consultas sobre la sucesión presidencial por medio de adivinos y de brujos que, para acabarla, le atinaron en todas, menos ella que se encontraba empeñada y totalmente comprometida con Javier García Paniagua, sin saber que por un lado, el presidente ,le aseguraba una cosa y el destino y los gringos hacían su chamba para que no llegara al poder con la aportación de toda la información de sus actividades y de todos los serios problemas que podía enfrentar en caso de que se impusiera. Claro, los buenos brujos, para doña Margarita, eran lo que le decían lo que ella quería escuchar.
Y por esa razón, el respetado y suertudo ganador de la lotería, del poder y de los presupuestos, Fidel Herrera Beltrán, gobernador de Veracruz, que cuenta con todo el apoyo, las visiones y destino de las profecías, tiene tal poder con los demás políticos y es así que este libro donde se habla de los brujos del poder, ha tenido tanto éxito, no solamente para el investigador, sino para los propios brujos y gurús que están en este negocio. Es así que seguramente se ha llegado a la conclusión de que la economía, es una ciencia casi exacta, pero en la cual, a los economistas, les pagan no porque nos determinen las rutas del desarrollo sino para “explicarnos las razones por las que entramos en crisis y por las que estamos jodidos” así que salen mucho más baratos y atinados los brujos y gurús, que los analistas, que no dan una.
Cuentan en la frontera que un bolero tenía la fama de ser muy acertado en los pronósticos del tiempo y como el encargado de dar los pronósticos en la radio y la televisión no acertaba una, decidió ir a consultarlo y para ello, le solicitó que le boleara los zapatos. Estando en ello le preguntó si él era el que siempre atinaba al pronóstico del tiempo y al recibir afirmativa respuesta le solicitó que le dijera su secreto para saber cómo le hacía. El bolero le dijo: “Es bien fácil, solamente escucho al pelao ese que dice el tiempo en la radio o la televisión y le doy la contraria, siempre le atino…”. Así, pareciera que están haciendo en el país, cuando materialmente podemos decir que estamos hechos bolas todos en cuestiones de análisis y consecuencias de la crisis económica mundial y que, para algunos pelaos no existe ni existirá en México, como si hablaran de Mérida, donde no pasará nada si todo el mundo se destruye.
Pero horror a quién horror merece como diría el dicho popular, porque ahora, también, existen los “fatalistas de la crisis” y si bien el secretario Alberto Cárdenas no ha dejado huella que perdure en su labor, cuando menos, pasará a la historia como un buen dicharachero donde asegura que, sin decir el nombre de Carlos Slim, hay gentes que le apuestan a que el país entre en crisis para comprar empresas a precios de remate y por ello están dispuestos a quemar la casa con tal de ver quemarse la del vecino. Un discurso ranchero que no ha despertado los ánimos en el campo sobre todo cuando asegura que a los campesinos, no les importa si llueve o no llueve, si los precios están a la baja o a la alza en sus productos, total, como siempre los chingan, pues ya ni protestan y le dan pá delante. Bueno, es más o menos lo que el señor ha querido decir o cuando menos, lo que le hemos entendido, si quieren ver el discurso textual solicítenlo por Internet. Bueno, Slim, no solamente despierta pasiones y envidias, también genera dichos y pendejadas por todos lados, ojala las pueda comercializar en la cadena de Sambors… total, que le digan lo que quieran mientras no le toquen el bolsillo, las mentadas, como quiera resbalan, las pagadas si duelen… duele más una patada al bolsillo que a los testículos, dicen que dice… así, son los comerciantes ricos… nada personal ni catastrofista.
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