“EL QUE MATA A PUÑALADAS, NO PUEDE MORIR A BESOS”.
No hay duda de que la crisis financiera, económica, social y política que invade al mundo despierta muchas especulaciones dentro de las declaraciones políticas y es por esa razón por la que el presidente Felipe Calderón iniciaba las suyas con esperanzas de que en México, no había posibilidades de que se realizara la crisis de tal forma que, se decía, con toda sinceridad, de que a pesar de que a los Estados Unidos enfermaban de pulmonía, se insistía en que en el país no nos daría ni siquiera un catarrito. Esas declaraciones eran sustentadas por las declaraciones del Secretario Cartens, en Hacienda, que se supone, sabe muchas cosas en economía por su experiencia en los organismos internacionales financieros.
Pero como en todo o en muchas cosas, el presidente, actuando de buena fe y confiando en la capacidad de sus colaboradores, acepta el realizar las declaraciones con el fin de serenar a los mexicanos en los momentos difíciles y, como siempre, el presidente, puede ser fácilmente engañado y no se le dice la verdad sobre la realidad con la esperanza de que las cosas se modifiquen solas dado que el sistema se corrige por sí mismo, en esa enorme capacidad de sobre vivencia que tenemos los seres humanos en los momentos de peligro o de crisis. Hoy, ante la fuga de capitales que se nota, ante el acaparamiento de divisas que se realiza por parte de los especuladores bancarios y financieros, ante la pérdida de valor del peso frente al dólar al llegar a los casi $15 pesos, el presidente, Felipe Calderón, no tiene más remedio en aceptar la tragedia que se avecina y declara que no puede engañar a los mexicanos pero que se compromete a dar lo mejor de su capacidad para sortear el vendaval, a pesar de que este tipo de problemas financieros no se resuelve solamente con fianzas y dinero, sino con una adecuada dirigencia política que genere la confianza en la conducción de los mexicanos y con el apoyo incondicional que le puedan prestar, a su presidente, los mexicanos, y esto es lo que se ve un poco difícil, sobre todo, cuando vemos que la dirigencia del PAN, partido del presidente, se desgarra en las luchas intestinas por el poder o por la necedad y las ambiciones que despiertan gentes, como Manuel Espino, para imponer a los políticos incondicionales a su grupo, a pesar de que sean contrarios en la realidad, en la forma y en el fondo, al mismo presidente Calderón.
Así, no podemos más que aceptar, de muy mala gana y con el Jesús en la boca de que, el peso, en realidad, ha sufrido una devaluación superior al cuarenta por ciento en pocas semanas a pesar de la venta de dólares que se ha realizado y que solamente llegan a los bolsillos de los especuladores financieros que son los que ganan en los momentos de crisis y de terror para los mexicanos y, por si fuera poco esto, en dos años de la administración del presidente Calderón, “el endeudamiento del gobierno federal bajo las modalidades de DEUDA INTERNA y EXTERNA SE INCREMENTÓ EN 863 MIL MILLONES DE PESOS, al pasar de un total de un billón 080 mil 248 millones de pesos a 2 billones 843 mil 219 millones, lo que significa un aumento del 43.6 por ciento. Según lo revelan los informes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público”.
De esta forma, el saldo de la deuda del gobierno federal, pasó a representar el 18.5% del Producto Interno Bruto en diciembre del año 2006, a 22.6 por ciento en el mismo mes del año del 2008 y, “en los primeros treinta días del 2009, este saldo se ha incrementado en más de 11 mil millones de dólares por efectos de la devaluación del peso frente a la divisa estadounidense, dado que en diciembre del año pasado el dólar fix tenía un valor de 13.8325 pesos, lo que implicó un incremento de 50.7 por ciento en sólo dos años”.
“POR EL LADO DEL COSTO FINANCIERO DE LA DEUDA EXTERNA (ETERNA, DICEN LOS MEXICANOS), ASCENDIÓ A 6 MIL 181 MILLONES DE DÓLARES EN 2008, PERO SE INCREMENTARÁ A 12 MIL 378 MILLONES EN 2009, SOBRE TODO, POR EL PAGO DE INTERESES DE LA DEUDA A PIDEREGAS.”
En tales condiciones, no nos extraña lo que está aconteciendo en muchas partes del país, donde además de la desocupación, de la pérdida de empleos, de la falta de inversión, del terror a producir y de construir, a la paralización de la economía, a la falta de circulante, por ejemplo, en Monterrey, Nuevo León, la tierra del ejemplo en materia económica y de desarrollo, “alrededor de 25 mil trabajadores del sector industrial de Nuevo León están recibiendo entre un 10 a un 50% menos de salario por reducción en sus jornadas laborales” y según las apreciaciones de Federico Toussaint, presidente de la Canaintra, las empresas de la industria metal-mecánica, automotriz y acero, entre otras, son las que más están padeciendo reducciones en sus niveles de producción y están a un paso del cierre”.
De continuar en este proceso, no es de extrañar que los conflictos sindicales, políticos, económicos y sociales tiendan a radicalizarse en sus manifestaciones y que muchos grupos opten por una salida fácil en el proceso electoral que se avecina y se carguen, en su votación, a favor de todos aquellos que les puedan prometer soluciones sencillas y de corto plazo, a pesar de que todos sabrán, en su fuero interno, que no son soluciones y que todo lo que se busca con el discurso político es comprometer el voto a pesar de que no tienen intención de cumplir con sus promesas y, por esa razón, no son pocos los políticos que recuerdan a cada instante de que, el presidente, Felipe Calderón, se mostraba con la cara de que sería el “presidente del empleo” a pesar de que todo apuntaba en la pérdida del mismo y en la desocupación que genera la crisis mundial, que afecta seriamente al país, a pesar de todas las “declaraciones optimistas que se realizan por los funcionarios y políticos, ligados a Felipe calderón.”
“El estar jodido y en la desocupación, el ser pobre, cuesta muy caro. Porque compras en abonos y sale más caro; si te cortan la luz, tienes que pagar la reconexión, el agua, por igual, el gas, ni se diga, no hay forma ya de robar la señal del cable y hay que pagarlo, bueno, está tan jodida la cosa, nos decía Tobías, que ya no pagan ni por ver, menos por votar y por esa razón, ahora, pagan porque les deje uno la credencial de elector a los que las venden a mayoreo. Si estar jodido y ser pobre sale muy caro en la actualidad, porque ni da chance para hacerla de cura en las misas, ni de monaguillo, porque ya nadie pone dinero en las limosnas. Bueno, a San Juditas Tadeo, solo lo pueden ver cada día 28 del mes, porque ya no deja el pedir cada día de la semana, total, para los milagritos pequeños que les hace a los jodidos, no son grandes, pero son muchos… en fin, estar pobre, sale en verdad muy caro”… esto es lo que dice nuestro amigo Tobías cada vez que, con cara de llanto, llega para desayunar y se acuerda de que a los pobres, les sale muy caro el vivir…”.
Y para que ya no sufran ni se acongojen los políticos es claro que el PRI, tendrá para Nuevo León, como candidato a la gobernatura a Rodrigo Medina y, para presidente de Monterrey a Abel Guerra, con el cual si sufrieron un poco, también ha sido negociable, a decir de todos y sale ganando, porque no deja el presupuesto a pesar de todas las declaraciones de sus cuates y amigos. En el caso del PAN, el gallo triunfador por su calidad y por su experiencia que cuenta con el apoyo incondicional del partido a nivel nacional y, como lo dijimos, es Fernando Elizondo y, como posible candidato a Monterrey, el arquitecto Fernando Larrazabal, que dice, se medirá con otro arquitecto, Abel Guerra, en los comicios para la capital. Total mucho ruido para las nueces y si todos sabían que tanto Rodrigo Medina como Fernando Elizondo serían los candidatos, la cuestión es hacerla de tos para estar presentes y tener una buena negociación… eso fue todo el escándalo en el proceso de selección en el PRI y el PAN.
No hay duda de que la crisis financiera, económica, social y política que invade al mundo despierta muchas especulaciones dentro de las declaraciones políticas y es por esa razón por la que el presidente Felipe Calderón iniciaba las suyas con esperanzas de que en México, no había posibilidades de que se realizara la crisis de tal forma que, se decía, con toda sinceridad, de que a pesar de que a los Estados Unidos enfermaban de pulmonía, se insistía en que en el país no nos daría ni siquiera un catarrito. Esas declaraciones eran sustentadas por las declaraciones del Secretario Cartens, en Hacienda, que se supone, sabe muchas cosas en economía por su experiencia en los organismos internacionales financieros.
Pero como en todo o en muchas cosas, el presidente, actuando de buena fe y confiando en la capacidad de sus colaboradores, acepta el realizar las declaraciones con el fin de serenar a los mexicanos en los momentos difíciles y, como siempre, el presidente, puede ser fácilmente engañado y no se le dice la verdad sobre la realidad con la esperanza de que las cosas se modifiquen solas dado que el sistema se corrige por sí mismo, en esa enorme capacidad de sobre vivencia que tenemos los seres humanos en los momentos de peligro o de crisis. Hoy, ante la fuga de capitales que se nota, ante el acaparamiento de divisas que se realiza por parte de los especuladores bancarios y financieros, ante la pérdida de valor del peso frente al dólar al llegar a los casi $15 pesos, el presidente, Felipe Calderón, no tiene más remedio en aceptar la tragedia que se avecina y declara que no puede engañar a los mexicanos pero que se compromete a dar lo mejor de su capacidad para sortear el vendaval, a pesar de que este tipo de problemas financieros no se resuelve solamente con fianzas y dinero, sino con una adecuada dirigencia política que genere la confianza en la conducción de los mexicanos y con el apoyo incondicional que le puedan prestar, a su presidente, los mexicanos, y esto es lo que se ve un poco difícil, sobre todo, cuando vemos que la dirigencia del PAN, partido del presidente, se desgarra en las luchas intestinas por el poder o por la necedad y las ambiciones que despiertan gentes, como Manuel Espino, para imponer a los políticos incondicionales a su grupo, a pesar de que sean contrarios en la realidad, en la forma y en el fondo, al mismo presidente Calderón.
Así, no podemos más que aceptar, de muy mala gana y con el Jesús en la boca de que, el peso, en realidad, ha sufrido una devaluación superior al cuarenta por ciento en pocas semanas a pesar de la venta de dólares que se ha realizado y que solamente llegan a los bolsillos de los especuladores financieros que son los que ganan en los momentos de crisis y de terror para los mexicanos y, por si fuera poco esto, en dos años de la administración del presidente Calderón, “el endeudamiento del gobierno federal bajo las modalidades de DEUDA INTERNA y EXTERNA SE INCREMENTÓ EN 863 MIL MILLONES DE PESOS, al pasar de un total de un billón 080 mil 248 millones de pesos a 2 billones 843 mil 219 millones, lo que significa un aumento del 43.6 por ciento. Según lo revelan los informes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público”.
De esta forma, el saldo de la deuda del gobierno federal, pasó a representar el 18.5% del Producto Interno Bruto en diciembre del año 2006, a 22.6 por ciento en el mismo mes del año del 2008 y, “en los primeros treinta días del 2009, este saldo se ha incrementado en más de 11 mil millones de dólares por efectos de la devaluación del peso frente a la divisa estadounidense, dado que en diciembre del año pasado el dólar fix tenía un valor de 13.8325 pesos, lo que implicó un incremento de 50.7 por ciento en sólo dos años”.
“POR EL LADO DEL COSTO FINANCIERO DE LA DEUDA EXTERNA (ETERNA, DICEN LOS MEXICANOS), ASCENDIÓ A 6 MIL 181 MILLONES DE DÓLARES EN 2008, PERO SE INCREMENTARÁ A 12 MIL 378 MILLONES EN 2009, SOBRE TODO, POR EL PAGO DE INTERESES DE LA DEUDA A PIDEREGAS.”
En tales condiciones, no nos extraña lo que está aconteciendo en muchas partes del país, donde además de la desocupación, de la pérdida de empleos, de la falta de inversión, del terror a producir y de construir, a la paralización de la economía, a la falta de circulante, por ejemplo, en Monterrey, Nuevo León, la tierra del ejemplo en materia económica y de desarrollo, “alrededor de 25 mil trabajadores del sector industrial de Nuevo León están recibiendo entre un 10 a un 50% menos de salario por reducción en sus jornadas laborales” y según las apreciaciones de Federico Toussaint, presidente de la Canaintra, las empresas de la industria metal-mecánica, automotriz y acero, entre otras, son las que más están padeciendo reducciones en sus niveles de producción y están a un paso del cierre”.
De continuar en este proceso, no es de extrañar que los conflictos sindicales, políticos, económicos y sociales tiendan a radicalizarse en sus manifestaciones y que muchos grupos opten por una salida fácil en el proceso electoral que se avecina y se carguen, en su votación, a favor de todos aquellos que les puedan prometer soluciones sencillas y de corto plazo, a pesar de que todos sabrán, en su fuero interno, que no son soluciones y que todo lo que se busca con el discurso político es comprometer el voto a pesar de que no tienen intención de cumplir con sus promesas y, por esa razón, no son pocos los políticos que recuerdan a cada instante de que, el presidente, Felipe Calderón, se mostraba con la cara de que sería el “presidente del empleo” a pesar de que todo apuntaba en la pérdida del mismo y en la desocupación que genera la crisis mundial, que afecta seriamente al país, a pesar de todas las “declaraciones optimistas que se realizan por los funcionarios y políticos, ligados a Felipe calderón.”
“El estar jodido y en la desocupación, el ser pobre, cuesta muy caro. Porque compras en abonos y sale más caro; si te cortan la luz, tienes que pagar la reconexión, el agua, por igual, el gas, ni se diga, no hay forma ya de robar la señal del cable y hay que pagarlo, bueno, está tan jodida la cosa, nos decía Tobías, que ya no pagan ni por ver, menos por votar y por esa razón, ahora, pagan porque les deje uno la credencial de elector a los que las venden a mayoreo. Si estar jodido y ser pobre sale muy caro en la actualidad, porque ni da chance para hacerla de cura en las misas, ni de monaguillo, porque ya nadie pone dinero en las limosnas. Bueno, a San Juditas Tadeo, solo lo pueden ver cada día 28 del mes, porque ya no deja el pedir cada día de la semana, total, para los milagritos pequeños que les hace a los jodidos, no son grandes, pero son muchos… en fin, estar pobre, sale en verdad muy caro”… esto es lo que dice nuestro amigo Tobías cada vez que, con cara de llanto, llega para desayunar y se acuerda de que a los pobres, les sale muy caro el vivir…”.
Y para que ya no sufran ni se acongojen los políticos es claro que el PRI, tendrá para Nuevo León, como candidato a la gobernatura a Rodrigo Medina y, para presidente de Monterrey a Abel Guerra, con el cual si sufrieron un poco, también ha sido negociable, a decir de todos y sale ganando, porque no deja el presupuesto a pesar de todas las declaraciones de sus cuates y amigos. En el caso del PAN, el gallo triunfador por su calidad y por su experiencia que cuenta con el apoyo incondicional del partido a nivel nacional y, como lo dijimos, es Fernando Elizondo y, como posible candidato a Monterrey, el arquitecto Fernando Larrazabal, que dice, se medirá con otro arquitecto, Abel Guerra, en los comicios para la capital. Total mucho ruido para las nueces y si todos sabían que tanto Rodrigo Medina como Fernando Elizondo serían los candidatos, la cuestión es hacerla de tos para estar presentes y tener una buena negociación… eso fue todo el escándalo en el proceso de selección en el PRI y el PAN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario