Hay mujeres que son verdaderas “Adelitas”, las que se
fajan en cualquier sitio, las que defienden sus amores, sus pasiones, sus
verdades, las que saben el valor de la amistad, del amor, del llanto, de la
pasión, las que reconocen las traiciones y se dejan llevar al crecimiento y no
se doblegan por la fuerza del dolor, las inteligentes que conocen lo que dice la
realidad, lo que significa la visión de lo pasado y de lo que viene, las que
controlan y son controladas con conciencia, las que determinan muchas vidas por
medio de sus palabras, sus ofensas, su lealtades, sus enojos, las que saben ver
lo que significa una institución como lo es el Ejército Mexicano, no con
ilusiones, con los que debería ser y no es, con su realidad, con sus virtudes,
enormes virtudes y sus limitaciones y, en este sentido, lo es Isabel Arvide, una
periodista que ha logrado construir éxitos y también sabe lo que es el uso de la
fuerza y del poder de la palabra, de la comunicación, del “cuarto poder” que es
la prensa.
Sin duda alguna
Isabel ha sido una pionera en muchos sentidos en el campo de la comunicación, lo
mismo escribe una nota, entrevista, hace reportajes, se involucra, lo vive, que
hace revistas, análisis, que lo mismo escribe encuerando al poder político que
al económico, al clero que a los militares, se puede decir que no tiene límites
y no sabe ni acepta de ellos, la visión de un periodista es la de ser un
revoltoso, un revolucionario, un intransigente, un buscar de verdades y de
tragedias, de mentiras y de bondades, de alimentos para el alma y el cuerpo,
como para destruir y matar todo, su vida ha sido un torbellino, una pasión, una
vida bien vivida, no hay duda, lo vemos en cada artículo o en cada escrito o en
cada libro. Hoy, ha escrito un libro: “MIS GENERALES. UNA CRÓNICA DE AMOR Y
DESAMOR SOBRE EL PODER MILITAR EN MÉXICO” Editado por la Editorial Planeta bajo
el sello de Temas de Hoy.
Conocer una
institución es ver con esa pasión, interés, desinterés, amor, vivencia,
realismo, lealtades, traiciones lo que escribe Isabel Arvide en este libro, por
supuesto que, como todo libro que habla de lo que es, de lo que se vivió, de su
verdad y de su tragedia y amor, no queda bien con todos ni es su objetivo,
tampoco es denostar a los que le traicionaron o dejaron de ver por
“instrucciones superiores”, por cobardías, por mezquindades. Se habla de muchos
generales de tres y cuatro estrellas, no se habla de secretos, se habla de la
realidad, de lo que son y dejan de ser o de lo que pretenden o pretendieron ser.
Vale la pena leer este libro porque nos lleva de la mano con el conocimiento
humano y simple, muy simple de lo que es la realidad, sin tapujos, sin engaños,
sin dobleces, lo que es es y así esta escrito, si hay alguien que lo pueda
desmentir, lo dudo mucho, porque si bien dice cosas fuertes y encuera
personalidades, la verdad es una guía y una constante en lo que escribe, dice,
habla, certifica la periodista decana de la fuente militar: Isabel Arvide:“Mis
Generales”…Un libro de realidad nacional.
ISABEL ARVIDE ES
PREMIO Nacional De Periodismo del año 1985, colaboró y colabora en casi todos
los diarios nacionales, es asesora en varios gobiernos estatales, de políticos,
consejera en visión y misión de muchos funcionarios, dicta conferencias, conoce
la seguridad pública como pocos, en fin, su vida la ha llevado a recorrer desde
las entrañas del Ejército muchos sitios, ver a muchos militares crecer y
destruirse o decrecer y acabarse, los conoce de dentro y de fuera, sabe de ellos
como pocos periodistas pueden saber de un grupo tan especial que sostiene a este
país en paz y en seguridad, por supuesto que es violentamente crítica, tiene
desajustes y confrontaciones cuando se trata de ver y comparar realidades
militares o de imponerse dentro de esa mística y de esa concepción que les hace
ser especiales en este país.
Es violenta en sus
concepciones, no es política, no conoce lo que es la “diplomacia” cuando se
trata de decir esto es negro o blanco, sabe pues fajarse y responde con gran
conocimiento no solamente en la concepción teórica de una institución, en su
mística, en su moral, en su moralidad, en su postura frente al poder civil; sabe
que los militares primero tienen la concepción de la obediencia y no hay duda
que muchos de sus errores, tragedias, brutalidades han sido ordenadas por los
políticos a los que sirven incondicionalmente por ese principio de lealtad a la
institución presidencial, saben pues guardar los secretos más trágicos o
brutales así como lo que lleva mayor sutileza, las intrigas ya que no dejan de
ser parte de ese mundo, pequeño y gran mundo en el que se desenvuelven las
fuerzas armadas.
Ella nos habla de
la concepción de la “seguridad pública” de la que afecta a los muchos y a todos,
la que nos ofende y lastima, poco habla de la seguridad nacional, no se atreve a
tanto no porque no lo sepa o conozca, sino porque al igual que muchos militares
de recia formación, ella, como periodista ligada íntimamente a lo militar, no
podría desentrañar o dar a conocer lo que son los secretos reales de la
seguridad nacional, nos habla, eso sí de un pasaje de cuando en los tiempos del
presidente José López Portillo, ella, viajó con un grupo de militares a recoger
armas para llevarlas o destinarlas a Nicaragua, en los tiempos de la revolución
sandinista-.
Nos conduce a sus
muchos amigos que limaron asperezas o impidieron bajezas o venganzas para con
ella o por ella, así, José Antonio González Fernández, tiene, al igual que lo ha
hecho en la vida política en los diferentes puestos donde se desempeño, la
virtud de conducirla por los caminos de la conciliación entre militares o con
militares de los que ella se separó con temor y terror en algún momento de su
vida y de su quehacer cotidiano en la lucha del diarismo o en la vida
personal.
Aparecen grandes
políticos y, sin duda, en cada personaje a los que analiza, encuera, ama o
lastima se puede ver una gran parte del desempeño de la vida militar en este
país que recorre varios sexenios con sus personajes reales, con los que se ha
topado y por los cuales se pueden desentrañar muchos silencios o ver muchas
verdades, tragedias, bajezas, amores y desencuentros de un gobierno o por un
gobierno. No se habla en este libro de ellos, de los militares o de los
políticos que se manejan, como simples oficiales que hacen su labor, los define
como seres humanos, los pinta tal como son en su realidad y en su misión o
visión en las tareas que son tan agobiantes y peligrosas. Se habla de muertos en
servicio o por el servicio, se describen muchas traiciones ,de las conjuras o de
las prácticas viciadas de las intrigas palaciegas de una institución formada por
hombres comunes y corrientes que tienen la responsabilidad de un gran poder, de
la vida o de la muerte de unos o de muchos, de la seguridad del presidente y del
país, de las instituciones y, esas responsabilidades no son pocas y no son
sencillas, ni comunes ni corrientes. Los generales son un grupo especial, de los
que han logrado sobrevivir a todo ese complejo mundo y por todo ese complejo
mundo. “MIS GENERALES” DE ISABEL ARVIDE ES UN LIBRO PARA ANALIZAR Y
REFLEXIONAR…
No hay comentarios:
Publicar un comentario