Desde Huatulco

HASTA el día 6 de Enero me encotnraré con mi familia en Huatulco, desde aquí se pueden admira los bellos paisajes de Oaxaca, de la Costa Oaxaqueña y, por supuesto, aislarse de la realidad, esa realida terrible, desgarradora, espantosa, miserable, violenta, difícil en la que vivimos los mexicanos y, desde la zona hotelera de Tangolunga, por supuesto que tenemos que reflexionar sobre muchos temas al inicio de este año y es, cuando estamos en esta zona, donde todo se olvida y todo se aisla, que entendemos la razón por la que los políticos, los funcioanrios, los policías, los empresarios, los banqueros, evaden la realidad y al no conocerla, no la entienden, desde aquí, también, podemos observar y, no nos dejan acercar mucho, las residencias donde vivien y disfrutan sus vacaciones los poderosos, por supuesto que no son las casas cuchitriles que les venden a plazos y a créditos de treinta años a los trabajadores y a los “afortunados del foviste”, no, son residencias de varios millones de dólares, con vista al mar, con todos los servicios y claro con todas las vigilancias y seguridades por las que los podersoso y que gozan del poder gracias a la política, no se preocupan por robos o por posibles secuestros o extorsiones, no, ellos y sus familias la pasan lindo, no como los que siendo los verdaderos dueños de las bellezas naturales, se les niega.


Así que aquí es donde entiendo la razón por la que los políticos, los funcionarios, los banqueros, los empresarios, los policías y sus cómplices de la delincuencia organizada se aislan de la realidad, por esa razón protegen sus cotos de poder, por esas razones se empeñan en conservarse aislados, fuera del contacto con el “infeliciaje” que, como dicen algunos funcionarios de Sedesol, apestan y huelen mal, dan mucha lata y no se dejan robar fácilmente o como señalan los panistas y muchos políticos de la nueva clase, salidos y educados en los colegios privados y de formación confesional de que, ellos, son la élite y, los demás, son los lacayos y mugrosos que deben de gobernar para continuar con todos su privilegios y que nada perturbe su buena vida.

Aquí es donde entiendo la razón por la que los políticos se alían mucho más con los poderosos que con el pueblo que es el que les elige para el gobierno, porque es con esos grupos privilegiados donde ellos se sienten bien y donde ellos pueden hacer negocio y transas, robos de los presupuestos y hacer los contratos que les dejan millones de utilidades y ganancias, claro que a constillas de los recursos que se roban y que deberían de servir para atender las necesidades de los ciudadanos y que se les niegan porque el nivel de ellos es de ser carne en las votaciones y continuar pagando impuestos, para que esa clase privilegiada y que vive de la política, como negocio, continue siendo la que se aisla de la terrible y empobrecida realidad que vive el país…

Aquí me encontré a un gran amigo que había dejado de ver por muchos años ya que fue perseguido durante el gobierno panista de Vicente Fox, a pesar de servir durante muchos años en los cuerpos de seguridad e inteligencia de este país, aquí, él me preguntaba mi visión sobre el proceso electoral y la realidad trágica que se vive a causa de la masacre que se genera en México, gracias a la famosa guerra contra el narcotráfico que ha inventado Felipe Calderón, para desviar la atención del porceso electoral en donde se llegó al poder gracias a un gran fraude electoral y con todo el apoyo de los norteamericanos, cuando ellos han sido los responsables de introducir las miles de armas que se utilizan para asesinar a más de 50 mil mexicanos, muchos de ellos inocentes, para desparacer a miles más, para robar y continuar con los secuestros, para que ellos sigan ganando miles de millones de dólares por medio del narcotráfico y de la delincuencia organizada, al enviciar a los millones de norteamericanos que han caído en el vicio de las drogas gracias a las guerras injustas que los gringos han emprendido en todo el mundo para apropiarse de recursos natrurales, mercados y, sobre todo, para dar salida a su armamento, al ser una clásica economía de guerra, en fin, para lavar miles de milones de dólares que ellos reparten entre políticos, policías, funcionarios y paramilitares que son sus lacayos para continuar con su política intervencionista y violatoria de los derechos y garantías de los ciudadanos en todo el mundo.

Y bueno, al señalar que el país no aguanta mucho más una política represiva, intervencionista, intolerante, retrógrada, en contra de los intereses populares, en beneficio de los podersoso políticos y funcionarios que son los que hacen de la política el negocio, era seguro de que si no ganaba por buena lid el PRI o se respetaba el triunfo de Andrés Manuel López Obrador, en este proceso electoral, lo más seguro es que el país se viera envuelto en una contienda y violencia política y social de consecuencias terribles y en esto, este poderoso político que conoce bien las entrañas de la política nacional y que cuenta con información privilegiada, me refrendaba la tésis que le exponía y aseguraba que, si el presidente y los norteamericanos se empeñan en inponer, nuevamente, a un presidente de derecha en el país, existen ya muchos grupos guerrilleros y muchas organizaciones sociales, dispuestas y empreder una nueva etapa de cambio, aun por la vía violenta, porque la pobreza, la desocupación la violencia alentada por el propio gobienro y con claros fines y tines represivos, no puede continuar y es que la gente, efectibamente está en un punto de quiebre y de violencia, al no contar con políticas sociales y que vayan a mejorar la difícil condicion de vida.

Es lógico que desde el aislamiento de la realidad las cosas se ven con otra óptica, pero no se podrá negar que la realidad es difícil, la desocupación terrible, la miseria mayoritaria, el hambre y la desesperación brutal, la insalubridad es clara en muchas regiones, la falta de atención médica y hospitalaria a las clases marginadas, a los adultos mayores es impresionante, los costos de la vida aumentan y el poder adquisitivo de los salarios baja, en fin, la violencia es una forma clara de acción concertada entre el gobierno y la delincuencia, para mantener el estado de horror y de terror en contra de la población y que ésta se sienta desamparada y inútil para frenarla, es una forma de represión política que no podrá engañar el porpio gobierno, porque es la realidad a pesar de los grandes y dispensiosos gastos que se hacen por cencepto de “seguridad”, aumenta, y la violencia es mayor y se genera la violencia entre los grupos marginados y empobrecidos, la guerra no es contra el narco, es de pobres contra pobres.

Son los pobres los que pagan con su vida la violencia generada desde y por el gobierno, son los pobres los que son acusados y van a las prisiones por miles, son las familias pobres las que no pueden defenderse las que sufren la violencia callejera que no llega a las zonas de ricos, políticos, policías y funcionarios o banqueros, son los pobres los que sufren la desocupación, la miseria, la enfermedad, la violencia, la represión… los demás, los muy pocos, son los que viven y gozan en zonas como Huatulco, en las casas que han comprado con el dinero que le han robado a los pobres de Oaxaca… y tan campantes, protegidos, que gozan de impunidad, gracias al negocio de la política.