martes, 17 de marzo de 2009

Profesionistas chacales

Y mientras en varios estados del país se dan golpes de pecho, tragan santos para defecar diablos, podemos entender que, como una medida distractora de las difíciles condiciones que se dan en la “inseguridad pública”, los gobernantes y los abogados, se dan el lujo de pagar cuotas multimillonarias al juez español, Baltasar Garzón, para que llegue a dictar conferencias que si bien no dicen mayor cosa, son especialmente caras por lo bien pagadas para este juez que se destaca por su buen gusto para las canciones rancheras y para el mejor vivir en los hoteles de lujos y los viajes en primera clase que le pagan con los impuestos recaudados por los mexicanos, en esos estados que no son garantía para la seguridad pública, pero que gastan para ofrecer conferencias al por mayor.

Es lógico que el juez Baltasar Garzón, al que le encanta la publicidad política a nivel mundial, no podrá ofrecer muchas reglas para mejorar la inestable seguridad nacional y pública en México, sobre todo, porque como el que paga manda, no podrá hacer las críticas a la ineficiencia, las complicidades y las corruptelas que demuestran sus contratantes, porque se correría el riesgo de que se dejaran encueradas las intenciones de esos políticos en utilizarle como un elemento de distracción y que la gente no se dé cuenta, como se da, de que la inseguridad en esos estados es una tragedia. Pero así somos de panchotes y de cobardes los mexicanos y pensamos que, por el hecho de que llegue un juez, al que le fascina la publicidad y vamos a sus conferencias, por las que le pagan verdaderas fortunas, las cosas cambiarán y la “seguridad” llegará de manera increíble por arte de magia.

En verdad que nos importa un soberano carajo, como dirían muchos gachupines, sobre la asistencias de Garzón a esas conferencias, pero por supuesto que no dejamos de indignarnos, porque el juez que no tiene nada de justo, cobra como si fuera a dar un concierto al lado de Luís Miguel o de Juan Gabriel, según sea el gusto y el despilfarro. Total, los que pagan son los contribuyentes de Tamaulipas y de Nuevo León y, esos, serían los que tienen la mano para realizar las protestas sobre los miles de euros que se gastan en dichas conferencias del juez que en vez de hacer su labor, se la pasa gozando las mieles del poder y, sobre todo, las tonterías de muchos funcionarios a los que poco les interesa gastar el dinero de los contribuyentes en soberanas pendejadas. En fin, cada país, tiene, los gobernantes que se merecen y los que aguantan…

Si los gobernantes y los políticos, los funcionarios, entendieran que la realidad exige hacer otras cosas, sabrían que, muchas familias, en este empobrecido y despilfarrado país, tienen muchos problemas, porque con el pretexto del aumento del precio del dólar, miles de gentes sufren por el aumento que se genera en el precio de los medicamentos y, por esa razón, miles de familias tienen que dejar sus tratamientos de salud, porque no hay dinero que les alcance para costear lo caro de los medicamentos ni los salarios que cobran los médicos en las consultas privadas. Por ejemplo, el día sábado, en una fiesta infantil, tuve la alegría de compartir nuestra mesa con la familia de un extraordinario médico que cumple con su función como Delegado del Seguro Social y, lo sorprendente es que, este profesionista, era el crítico más serio en contra del servicio que venían prestando los médicos de su institución, cuando con la seguridad y el talento que le permite su conocimiento y experiencia, se daba cuenta de que muchos doctores no recetaban los medicamentos de la institución y ellos, eran los primeros que decían que no servían y que era mejor que les recibieran en las consultas privadas, en sus lujosos consultorios. Así, muchos médicos, usan al Seguro Social como un medio para llevar clientes y pacientes a sus consultorios y realizar operaciones que no son necesarias y poder cobrar mucho dinero o bien, recetar medicamentos que sabemos, en muchas farmacias, les dan una comisión ya que, no las encontrarán en otros sitios, esto, es igual con los estudios y análisis o con las radiografías por las que ellos tienen comisiones de los laboratorios y es por esa razón que en todos los lugares exigen que se les den los datos del médico que les manda a realizar esos estudios, sin ton ni son, solo para que les puedan cubrir sus comisiones con toda puntualidad.

Y si en verdad, Garzón, tuviera el ánimo de brindar justicia y no cobrar sin escrúpulos, tal vez, tendría que llevar a juicio a muchos profesionistas que sin el mejor escrúpulo tratan de realizar operaciones que los pacientes no necesitan, solamente para poder cobrar mucho dinero y sostener el alto nivel de vida que se dan el lujo de tener, gracias a los engaños y transas que realizan con los pacientes. Muchos, serían los médicos que serían llevados a juicio al lado de dueños de laboratorios, de hospitales o centros de radiodiagnósticos porque se hacen muchos estudios que no tienen razón de ser y por los que se paga mucho dinero que ,en parte, para en los bolsillos de los médicos, gracias a las transas que realizan con esos laboratorios y en el cobro de las comisiones por el envío de los pacientes.

En fin, es lo mismo que sucede con los funcionarios públicos que, con total cinismo, imponen multas o generan problemas y realizan investigaciones en búsqueda de multas con las que pueden negociar y así vemos que ahora, uno de los nuevos negocios de los políticos y de los funcionarios, es hacer los replaqueos, con lo que ellos ganan muchos millones ya que los contratos se dan con unas cuántas empresas que tienen ese negocio. Así, también, vemos como muchos políticos que cargaban los portafolios de papeles, no de dinero, de otros políticos a los que solamente les lamían los traseros y los zapatos, ahora, son prósperos políticos y enriquecidos funcionarios que cuentan con muchos ranchos de su propiedad y construyen casas y tienen otros negocios gracias a los contratos que consiguen con el gobierno en turno o con los funcionarios que controlan los presupuestos estatales, municipales o regionales y así vemos a otros más que, de pronto, son prósperos inversionistas y constructores de edificios y manejan millones de pesos, gracias a las complicidades, corruptelas y transas que se hacen al amparo del poder político en este país.

Así que, por supuesto, que tendríamos que hacer una profunda revisión de las transas de los médicos, de sus relaciones y negocios que se hacen al amparo de la impunidad y de las mafias de médicos, jugando y explotando la salud de los pacientes y de los ciudadanos a los cuales sacan, incluso, de las instituciones de seguridad pública, con el fin de ganar más recursos por esos manejos inescrupulosos que hacen de ellos, una casta despiadada, chacalera, sangrienta, a la que poco les interesa la moral y la ética, sino el gran flujo de dinero que pueden ganar, engañando a miles de ciudadanos y explotándoles, con el terror a las enfermedades y padecimientos.

Así, mientras evitamos tratar con seriedad los verdaderos problemas que padecemos los mexicanos, muchos funcionarios y políticos, prefieren, gastar muchos miles de pesos para traer a jueces a dar conferencias y distraer la atención de los problemas, por eso estamos como estamos y seguiremos estando, jodidos, mientras soportemos esos abusos y transas que se hacen con toda impunidad y con la pasividad de los mexicanos...

Y mientras tanto, felicito a mi hijo, Sócrates Gabriel, que ganó el concurso de oratoria de su escuela, en la categoría del quinto grado. Es un buen esfuerzo y, por supuesto, una enorme satisfacción para toda nuestra familia. Gracias, Sócrates Gabriel, por ese triunfo que te honra y satisface.

No hay comentarios: