martes, 17 de marzo de 2009

Desde que conocí lo bueno...

“LAS DECISIONES, NO LAS CONDICIONES, DETERMINAN EL DESTINO.”

Y bueno, en este país, como en otros muchos, lo que se logra bien, se hace bien, es hacer promesas que no se cumplen, promesas y más promesas de que pronto las cosas serán distintas a lo que hoy son y por las que sufre uno. Hace unos días, un niño de diez años, me contaba este chiste: “Resulta que van tres políticos importante de México a bordo de un avión y van observando las difíciles condiciones de vida de los barrios marginales, empobrecidos y miserables. Entonces, uno de ellos, saca diez billetes de cien pesos y por la ventanilla los lanza a la zona diciendo: “con esos diez billetes de cien pesos voy a hacer felices, cuando menos, a diez familias pobres”. Viendo esto, otro de los que van, saca cien billetes de cincuenta pesos y hace lo mismo y declara: “con esos cien billetes de cincuenta pesos voy a hacer felices a cien familias de esa zona pobre”. El tercero, porque en política nadie se debe dejar rebasar, ni por la derecha, arroja mil billetes de veinte pesos y dice: “con esos mil billetes de veinte pesos voy a hacer felices, cuando menos, a mil familias de los barrios pobres”. El piloto, totalmente encabronado por las declaraciones y la demagogia de los políticos, les dice: “Señores, si ustedes tres se lanzan al vació y se matan, van a hacer felices a cien millones de mexicanos. Esto, si es hacer una buena obra”.

Así, vemos muchas reuniones para “comprender los problemas que suceden en el país y las posibles condiciones que pueden darse para su solución” y dentro de estas reuniones, a nadie sorprende ver las que agrupan a los procuradores y jefes de las policías, en tumulto, para buscar el retrato cerca del Secretario, del Procurador, del Presiso o del Secretario de Gobernación y que se puedan mostrar con orgullo, en los lujosos despachos. Claro que, los “jefes de comunicación social” o simples jefes de prensa, estarán atentos a que sus jefes puedan rendir muchas declaraciones a los medios y con ellas, hacer el álbum que forman parte de la “EGOTECA”, para que cuando tengan el nivel de ex, puedan presumirlas a sus cuates junto con sus “sesudas declaraciones” y, por esa razón, sorprende que políticos de talento, aseguren, en dichas reuniones, tal vez lo explican así para que les entiendan los jefes de policía y los procuradores estatales de que : “no se pactará con la delincuencia organizada y se combatirá con toda las fuerza de la ley” y, bueno, pensamos que no requieren hacer tal afirmación, simplemente, porque suponemos, que es parte de sus obligaciones y no hay cambio de rumbo o de instrucciones en lo que marca la ley y que, por cierto, ningún policía ni procurador brinda y realiza lo que la ley les dice que están obligados, a combatir a la delincuencia y asegurar la vida y propiedades de los ciudadanos y esto, esto es precisamente lo que no hacen. Mark Twain decía: “EL PROBLEMA DEL SENTIDO COMÚN ES QUE NO ES COMÚN”.

Ahora, cuando leemos la declaración de la señora Marta Fox en el sentido de que como no tiene proyecto político, se decide a retirarse de la política, solamente nos demuestra que, efectivamente, la política del grupo de Vicente Fox era ella y que, efectivamente, jugaba el papel que todos los medios de comunicación le dieron en su momento y se basaban en las filtraciones que realizaban sus cercanos colaboradores, que son bien chismosos y desleales. La realidad, según nos han comentado es que, la señora Marta, quería ser diputada para el proceso electoral del 2009 ya que consideraba podía aportar toda su experiencia y popularidad a que la bancada del PAN, pudiera realizar tareas importantes que trascendieran al poder actual, pero que, al ser rechazada de esa posibilidad, declara esto para mostrar que pese a todo, tiene el valor de dejar la política, porque no existe en su agenda, un proyecto político que justifique su estancia en la misma y por tanto, nos avisa, por si queremos estar enterados, de que todo su “humilde esfuerzo” se dedicará a la atención del Centro Fox, de la Fundación Vamos México y a su familia y bueno, es una lástima, les comentaba a un grupo de amigos que Doña Marta, dejara la política en el PAN, porque haciendo un análisis de sus militantes y de sus dirigentes vemos que, su caballada, no solamente está flaca sino que no vale la pena.

Si el presidente Calderón está nervioso porque sabe que no lograrán tener la mayoría en el Congreso, puede estar totalmente tranquilo, porque los priístas, solamente, responden a lo que señala el Ejecutivo y no el mandato del pueblo, los perredistas no dan una y anda peleando entre las tribus porque, por desgracia, cuando se está en el infeliciaje nacional y se cuentan con las sobras del poder, éstas, los deslumbran, como a los nuevos ricos que llegan a lo sencillito y cursi, cuando vemos a los diputados y senadores, codearse con la clase política y con lo más granado de la sociedad, donde ellos, seguirán siendo considerados como los invitados incómodos. Hace algunos años, escuchaba a un político que acababa de regresar de Cuba, en los tiempos del “trabajo voluntario” y de las brigadas de defensa de la Revolución cubana, que le decía al entonces presidente Luís Echeverría: “Señor presidente, si quiere terminar con los grupos de comunistas “nylon” que viven del presupuesto nacional y de las dádivas que les brinda la DFS y los políticos a los que se autoriza dar el apoyo a éstos grupos, para espantar a los pinches gringos, pues, la mejor solución, es enviarlos, a Cuba y convenir con el Comandante de que los mande a las zafras y a las vigilancias de los comités de defensa de la Revolución para que sepan lo que es trabajar y darse las chingas para sobrevivir en la miseria. Ya verá que se les terminan las ganas de estar en un gobierno socialista, porque está totalmente comprobado que, los comunistas: “DESDE QUE PROBARON LO BUENO, NI LO REGULAR LES GUSTA”.

Y es cierto, los “robolucionarios” incrustados en el PRD saben de ligas, de grabaciones, de apariciones en la televisión, de buenos vinos y de buena mesa, de lujosos vehículos y de buena ropa, ya no vemos en las cámaras a aquellos románticos comunistas que traían bajo el brazo un folletín de la URSS y vestían de mezclilla, con las ropas especiales de los ferrocarrileros, con las barbas crecidas y con las manos manchadas de tinta de los folletos que imprimían. Bien dice un amigo que “DESDE QUE ENTRAMOS A LA RUTA CRÍTICA, PERDIMOS LA RUTA DE LA REVOLUCIÓN, Y DESDE QUE LOS DIPUTADOS CAMBIARON LAS PISTOLAS POR LOS CELULARES Y LAS CHAROLAS POR LAS POLVERAS, NOS LLEVÓ EL TREN”, con ello, entramos a la era de los tecnócratas, de los tecnoburócratas, a la época de los júniors, de los riquillos, de los buenos vinos y dejamos a un lado las casas de citas para llegar a los TABLE Dance. Claro, también entramos a la temporada, nos dicen que, como mal del siglo, vemos como hombres contra hombres y viejas contra viejas entran en las orgías y se dan el sí en los matrimonios porque esto es lo avanzado y porque es la parte del respeto y su derecho a las “preferencias sexuales” y, no se piense que somos reaccionarios a esto, lo vemos normal, pero cuando menos, si respetamos las preferencias sexuales de los otros, los nuevos, los modernizados, también tenemos derecho a exigir que nos respeten el gusto por las damas.

Total, en realidad, el presidente Calderón, no se debe preocupar por la mayoría o la minoría en el Congreso, es verdad que en esta vida, todos tienen un precio y con lana, puestos, poder y riquezas, se pueden comprar las conciencias ya que parece ser que también, en la política, estamos en los tiempos de las vendimias y de las transas, no en las del servicio, la dignidad y las ideas. Esas cosas son las atrasadas, de los viejos tiempos, hoy, todo se vende y todo se compra, solamente hay que llegar a pagar el precio…

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