HAY PROVERBIOS QUE DEFINEN TODO: “UN CAPO CONOCIDO ES UN CAPO MUERTO”
y es que en el mundo de la mafia y de la delincuencia organizada todo se mueve
con sigilo, con secreto, discreción, cuidado, en cualquier error va la vida, la
libertad, hay riesgos vitales que son profundos en todo el conocimiento y la
relación que existen entre los grupos, los socios y los cómplices, en cada peso
se juegan la libertad y la vida, esto es así y además todo tiene un precio. La
protección lo tiene, la discreción igual, el secreto cuenta todo, por esa razón
se busca la protección del poder, de los mandones, de los que tienen el poder
de dominar y encarcelar, proteger, brindar la impunidad y es ahí donde entran
en juego las relaciones entre políticos, funcionarios, policías, jueces,
empresarios, banqueros y, esa relación es vital para su presente y su futuro,
ahí es donde se entierran los delitos o se ocultan las verdades, se pierden los
caminos, se acumulan las riquezas. Por esa razón, no se puede entender que los
delitos y los delincuentes puedan existir sin la protección del poder o de los
poderosos, de la policía, de los que pueden mandar y entender que todo esto es
parte de un juego. Perverso, pero juego peligroso o juego que deja mucho, pero
mucho dinero.
Hace algún tiempo se discutía el derecho de informar y se
daban razones para que esto se diera con veracidad por parte de los que
controlan la información y la verdad o la realidad, lo que acontece y son los
hombres del poder, pero no entendíamos bien a bien lo que sucedía, porque no
habíamos captado que, el derecho de informar, es el DERECHO DE CONOCER que
tenemos todos sobre lo que se hace desde el poder y que, el poder, no es de
ellos, se los hemos dejado por medio de los votos a pesar de que no tengamos la
fuerza para imponer y para mandar, delegamos el poder que es nuestro poder a
los poderosos, políticos, banqueros, policías, empresarios, funcionarios
que nos arrebatan ese poder y, ellos, si no sufren como pueden sufrir los
mafiosos conocidos a los que les atrae la muerte, al contrario, los hombres del
poder buscan las luces y los reflectores, son parte de su vestimenta, sin las
luces y sin que les conozcan no son nada, y es así que, en esa luz y sombra se
dan las relaciones entre unos y otros, todo en lo oscurito, recibiendo dinero,
mucho dinero, a cambio de no hacer nada y de brindarles protección y así, ellos,
en la oscuridad, buscando que no se les conozca porque, capo conocido es capo
muerto, los políticos, jueces, policías, empresarios, banqueros, funcionarios
que les brindan la protección, los mantienen en la clandestinidad y el
desconocimiento y, eso, cuesta mucho dinero que es con el que los hombres del
poder se siguen enriqueciendo.
Y hoy, cuando el presidente anuncia su programa de lucha por
la tranquilidad, la paz y seguridad en el país, me pregunto. ¿Cuántos políticos,
policías, empresarios, funcionarios, banqueros, jueces son los que mantienen a
muchos capos en la oscuridad, protegiendo el que no se les conozca, porque,
entonces, los mandan a la muerte, a la cárcel o la destierro?, sin duda son
muchos y, el verdadero enemigo lo tiene cercano el presidente con muchos
políticos que están en eso, en la protección y brindando impunidad para
enriquecerse. Ya sabemos que, CAPO CONOCIDO ES UN CAPO MUERTO. Esperamos pues
que el presidente se de cuenta y se sacuda a los que le van o están traicionado
en este conflicto nacional, para alcanzar la seguridad…la neta, que los tiene
muy cercanos…
HACE APENAS UNOS DÍAS LOS PANISTAS QUE NO SUPIERON GOBERNAR
pero son buenos para criticar, señalaban que en los dos meses que lleva el
gobierno de Peña Nieto, las matanzas siguen igual, el secretario de Gobernación
Osorio Chong habla de que los cambios serán poco a poco, que la estrategia será
otra, que se tomará en cuenta la prevención y no la reacción que ha provocado
tales matanzas, en fin se habla de grupos especiales que perseguirán a los jefes
de jefes y a los capos de capos, pero la realidad, a lo mejor lo podrá saber
después, como todo lo que sucede en este país donde los de “arriba” no saben
bien a bien que sucede allá abajo, sobre todo, porque los guardianes del orden y
del desorden siguen en sus puestos, no se mueven, ellos, los policías ahí están,
saben que es lo que sucede, cómo pasan las cosas, dónde están los que no se
deben de “conocer” porque en cuanto se conozcan son hombres muertos y, por ese
silencio y sigilo cobran ellos lo que nos les alcanzaría en años los pagos
oficiales y este es su negocio, el de ellos, total, saben que más arriba también
se van los dineros, como que vuelan, como que arriban, como que se pierden como
se pierden las caras y las identidades con la distancia, con la oscuridad, con
la lejanía. Por esa razón, tan simple como contar dinero y dar protección, es
que no avanzan las cosas y tal parece que se estancan y quedan
igual.,.
La verdad es que existen cambios de visión y de misión, las
cosas no serán como fueron con la “docena trágica”, no pueden ser iguales, todos
los sabemos y todos lo deseamos. Hay millares, más de cien mil muertos que
testifican una matanza que ha quedado en la impunidad, en el silencio, nadie
quiere recordarla cuando al parecer hay miles de viudas, viudos, madres
dolientes, hijos ausentes o huérfanos, encarcelados, desaparecidos y, los que
pueden señalar y parar la tragedia no hacen lo que deben hacer porque o tienen
miedo o simplemente están acomodados para que eso suceda, para que nada
suceda.
El Presidente, Enrique Peña Nieto y Osorio Chong, Murilo
Karan como Procurador, el Secretario de la Defensa y el de Marina, saben que no
puede estar en lo mismo la tensión y el dolor que nos acumula dudas y
descontentos, miedos y crueldades, odios y resentimientos, para caminar juntos
debemos tenernos confianza y saber que vamos por el mismo camino y con el mismo
destino, no es uno para allá y otro para acá, no, juntos es como hacemos crecer
a nuestras casas, a los estados, al país, queriéndolo, amándolo. México, son
muchos Méxicos: el del norte, el del centro, el del sur, el rico, el mediano, el
de la costa, el de la sierra, el pobre, el indio, el desamparado, pero todos, no
importa como seamos y cómo vistamos, como nos comunicamos y en qué lugar
estamos, somos mexicanos y amamos a este país y, debemos recobrar el
nacionalismo, la dignidad perdida y entregada, la soberanía, sin esto, pues no
hay nada, no se camina ni se avanza. Ya lo vimos, lo comprobamos cuando los
gobernantes o desgobernantes en vez de cuidar la patria, la entregaron y, en vez
de tener honor, se dieron de nalgas, de culo, dicen en mi pueblo, entregados
como suripantas a los gringos, y es por esa razón que hay tanto dolor, matanza,
desesperanza, muerte, guerras sin sentido, porque ellos viven de la muerte y,
nosotros, pues la respetamos, la adoramos, pero nos encanta la vida y es así
que, juntos, avanzamos, que nadie lo dude, hay cambios y por esos cambios hay
que estar atentos, dominados, alertas, podemos ser mucho más que antes, porque
tenemos una gran calidad y una gran patria que defender y amar. México, te llevo
en el corazón…
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