TRAGEDIAS. Todos sabemos que el perder las pocas cosas que tenemos,
por necesidad, es una tragedia. Tener que empeñarlas es una angustia y se
convierte la mayoría de las veces en tragedia para toda una familia. Las CASAS
DE EMPEÑO, son “empresas de agiotismo” y que no están reguladas por las
autoridades, así, pueden despojar y robar a los que empeñan por necesidad, es
como dijeran los viejos sabios de mi pueblo: “el que juega por necesidad, pierde
por obligación” y el que empeña lo poco que tiene por necesidad, normalmente, es
robado por los agiotistas que manejan el negocio con la impunidad y falta de
vigilancia de las autoridades y esto es explicable, porque muchos políticos
saben lo que significa el agio y hacen sus empresas de empeño para robar a los
que más necesitan.
Las autoridades saben que “OPERAN SIN NINGUNA REGULACIÓN MIL
CASAS DE EMPEÑO AGIOTISTAS QUE COBRAN TASAS ANUALIZADAS DE HASTA 120%” y bueno,
lo saben pero no regulan ni hacen anda por evitar el AGIO y el robo que se hace
a los que más lo necesitan, porque roban el patrimonio de los mexicanos, tal
como lo señala el director general de la Sociedad financiera FICREA, que explica
que hace unos quince años, sólo había 40 instituciones, pero hoy, se calcula que
hay más de 6 mil 5000, de las cuales, más de mil no tienen regulación alguna en
todo el país. Y ya sabemos que los que dejan mayores utilidades son los pobres,
con ese cuento de los “pagos chiquitos” que, al final, se hacen “muchitos” y que
van a los bolsillos de los especuladores financieros, políticos, funcionarios y
agiotistas que roban con impunidad a los que tienen necesidad de empeñar lo que
tienen, para salir de un problema. Anteriormente, se decía que el “MONTE DE
PIEDAD”, AL QUE LA GENTE LLAMABA “MONTE DE IMPIEDAD” tenía tasas de usura y
actitudes de agiotistas, por esa razón, se alentó la formación de las famosas
“casas de empeño” y así, se logró que un grupito de especuladores y agiotistas
hicieran el gran negocio con lo poco que tienen los pobres para empeñar y ser
despojados de sus bienes y propiedades, por la “vía legal”. Con esas casas de
empeño se legaliza el robo, el agio y el despojo que se hace a los más
necesitados de este país…y es que el mercado no es para menos ,porque más de
cuarenta millones de mexicanos son los clientes recurrentes en esas casas de
empeño que recurren a los prestamistas y agiotistas en los préstamos prendarios
por la que cobran intereses terribles, de usura y de agio y, mientras, los
“inversionistas de empeño” se enriquecen, millones de mexicanos son despojados
por empresas “legales” que tienen protección e impunidad por parte de
funcionarios, políticos y “empresarios financieros”… los demás, que se jodan,
para que son pobres… ¿Usted cree que al secretario de hacienda le importa lo que
cobran las casas de empeño? Pues yo creo que no, porque él, no tiene necesidad
de empeñar joyitas, terrenos, vehículos o casas para salir de algún problema
para pagar colegiaturas o sacar del hospital privado a sus seres queridos… y,
cuando no se sabe, es como el que no ve…ciegos e insensibles…Bueno dicen los mal
pensados y “malnacidos” que en las casas de empeño se paga más que en las “casas
de citas” y algo han de saber sobre el tema.
Y así como no podemos creer en la “buena fe” ni en la verdad
de los prestamistas y agiotistas en el país, los ciudadanos, tampoco creemos en
lo que nos aseguran los políticos y funcionarios cuando se trata de
explicaciones que no son lógicas y no es que queramos insistir o queramos ser lo
suficientemente necios para imponer nuestras “conclusiones” en temas como el
del la explosión en las torres administrativas de PEMEX, porque en la realidad,
“el que se quema con leche, hasta al jocoque le sopla” decimos en Hidalgo, de
donde es originario mi paisano, Jesús Murillo Karam y el Secretario de
Gobernación. La explicación de que la explosión es una acumulación de gas, que
nadie olfateó, ni a nadie mareó o le hizo daño antes de producirse, es como una
explicación en “chino”, como en chino están las tasas de interés que cobran las
“casas de empeño” que nos dan algo de solución a un problema inmediato y, con
eso nos roban lo que dejamos en prenda o nos cobran más por lo que nos dan… es
como cuando llega el borrachito a su casa diciéndole a la señora que le abra la
puerta porque le han robado y, cuando la señora ve que trae el reloj y no está
golpeado, le dice que le explique cómo le robaron y él, cínicamente señala que,
le robaron en la casa de citas, porque en vez de recibir a una suripanta con
bellos pechos, los tenía chiquitos y, esto, es un robo, tal como les roban a los
que empeñan con el cuento de que pagarán en abonos “chiquitos” ,cuando en
conjunto se hacen muchitos…
Conociendo a mi paisano Jesús Murillo Karam y al señor
secretario de Gobernación, creo en su buena fe y en su calidad, para no
prestarse a hacer algo indebido, pero el caso es que la sociedad que ha sido
engañada en forma permanente ya no cree en ningún político ni funcionario y,
menos, cuando acompañados por las declaraciones, aparecen, desde los Estados
Unidos, publicaciones que despiertan escándalos nacionales, donde se involucra a
importante general en la corrupción y en las drogas y se dice que, gracias a los
funcionaos de los Estados Unidos se “salvó” México, porque no dejaron llegar a
este general. Así que todos sabemos que, cuando hay conflictos serios en el
país, de una manera u otra, siempre, se hacen escándalos para distraer la
atención de los mexicanos, si no aparece el Chupa Cabras, aparecen los políticos
en las pasarelas o se habla de ellos o se generan escándalos que nadie piensa en
lo que hay, sino en lo nuevo que distrae la atención y así se la llevaban los
políticos, con blablábla y con escándalos, pero no con soluciones y verdades,
sino con mentiras que son mostradas como “verdades a medias”…
Me crean o no, pienso que el presidente Enrique Peña Nieto
es un hombre de buena fe y si bien, de buena fe está empedrado el camino a los
Infiernos, el quipo en el poder, tuvo el valor y la eficiencia de llegar a “dar
cara” ante el grave problema que enfrentábamos en las torres de PEMEX y esto,
nos dice mucho sobre su valor y eficiencia, claro está que hoy en día se asegura
que, los mexicanos, somos afectos a los rumores y especulaciones, pero esto no
es de gratis, lo han mostrado y enseñado los políticos y los funcionarios cada
vez que tratan un problema de gravedad nacional y de cómo ocultan la mierda,
como los gatos, cuando no se ve, pero se huele, así que el problema no es de los
mexicanos, es un problema que tienen que resolver los políticos y funcionarios
para que, con hechos, podamos confiar en su verdad, eficiencia, honestidad y
como hasta el momento no tenemos esa certidumbre, pues nos da mucho por
especular y hacer rumores… porque, simplemente, hay “tela de dónde cortar”. Es
claro que la información que genera los rumores y especulaciones, nos llega
desde PEMEX, porque hay muchos empleados que saben lo que sucede y no están
involucrados en las transas, robos y venganzas de los políticos, empresarios y
funcionarios que nos roban y saquean.
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