Derechos humanos

Escribo este artículo el día 21 de Marzo, Día de San Benito y, cuando los mexicanos liberales recordamos con emoción, la trayectoria y ejemplo de Benito Juárez García. Así que una de sus frases más nobles y que demuestran su patriotismo, lealtad, honestidad y valor es: “NO SE ME JUZGUE POR MIS DICHOS, JÚZGUESEME POR MIS HECHOS. MIS DICHOS SON HECHOS”.

En los años veintes, en el diario “El cronista del Valle, de Brownsville, Texas, se publicaba un 26 de mayo, este poema de Guillermo Aguirre y Fierro (el autor del Brindis del Bohemio) y, hoy, nos cae como anillo al dedo:

 

“El león falleció triste desgracia!

Y van, con la más pura democracia,

a nombrar nuevo Rey los animales.

Las propagandas hubo electorales,

Prometieron la mar los oradores,

y… aquí tenéis algunos electores:

Aunque parézcales a ustedes bobo,

las ovejas votaron por el lobo;

Como son unos buenos corazones,

por el gato votaron los ratones;

a pesar de su fama de ladinas,

por la zorra votaron las gallinas;

la paloma inocente,

votó por la serpiente;

las moscas, nada hurañas,

querían que reinaran las arañas;

el sapo ansía, y la rana sueña,

con el feliz reinar de la cigüeña;

con un gusano topo,

que a votar se encamina por el topo:

el topo no se queja,

más da su voto por la comadreja;

los peces, que sucumben por su boca,

eligieron gustosos a la foca;

el caballo y el perro, no os asombre,

votaron por el hombre;

y con dolor profundo,

por no poder encaminarse al trote,

arrastrábase un asno moribundo,

a dar su voto por el zopilote.

Caro lector que inconsecuencias notas,

Dime ¿no haces lo mismo cuando votas?”.

Y este poema de tan ilustre poeta, nos demuestra que la realidad es ésta y que, por tal razón, los ciudadanos, debemos estar al pendiente de que los que nos representen sean en verdad dignos, honestos, preparados, leales, amorosos, valientes, que tengan la pasión y el valor para enfrentar y confrontar, así que, este día, también, en una reunión de periodistas en Oaxaca, se presentó el maestro Roberto López Sánchez, que lucha por ser el DEFENSOR DE LOS DERECHOS HUMANOS, y es claro que en tal condición, además de la preparación y del valor, se debe contar con el apoyo de la sociedad, porque no existirá ningún defensor de los Derechos Humanos que pueda, solo, enfrentar al poder y a los funcionarios violadores de los mismos, si no cuenta con el respaldo real que le brinde autoridad moral para hacer con honestidad y limpieza, valor y pasión, su labor. “Una nueva Visión de los Derechos Humanos” es lo que presenta este valiente profesionista que llama a los periodistas a ser parte integral y el tendón de vida para su labor, en esta contienda, existen otros valiosos defensores de los derechos humanos apadrinados por organizaciones políticas y sociales, pero, por esa razón, se debe entender que para guiar tan importante organismo, se debe contar con la acción de una gente preparada, honesta, leal, valiente, con experiencia en lo teórico y en la práctica de la defensa de los derechos humanos, por esto mismo llama la atención la experiencia demostrada por Roberto López Sánchez: quince años de catedrático en la Facultad de Derecho de la UABJO, catedrático invitado en varias facultades, catedrático del Instituto de Capacitación y Especialización del Poder Judicial del Estado. Maestría en Derecho Privado, Diplomado sobre derechos humanos por la Universidad Regional del Sureste, la UNAM y la Comisión Nacional de Derechos Humanos, diplomado en Pedagogía y Docencia y, sobre todo, un hombre que, en los hechos, demuestra ese espíritu juarista que brinda confianza y esperanza en la defensa de los derechos humanos tan lastimados en la entidad. También ha sido visitador de la Comisión del Estado y, actualmente, es visitador del Tribunal Superior de Justicia, donde ha realizado una limpia, honesta y valiente trayectoria, al igual que lo hizo cuando ha sido juez.

Sabemos que la definición no está en una perfecta democracia, pero existe la esperanza de que los diputados que tienen esta misión lo hagan con la honestidad y el valor que se requiere, buscando la protección de los derechos de los oaxaqueños y no la protección y la defensa de sus intereses como partido o como organización social. La imparcialidad y la honestidad deben estar presentes en tal determinación ya que es la esperanza de los ciudadanos el que se cuente con una institución fuerte capaz de enfrentar los retos y los riesgos más difíciles en la entidad, porque se tienen que romper grandes intereses, el control y la manipulación política de pandillas y cacicazgos. No es pues una posición política, es una obligación de los representantes populares brindar la dirección de la Comisión de los Derechos Humanos a los mejores ciudadanos que han demostrado experiencia, lealtad a los principios y valor en las luchas y que, hoy, requieren, además, una gran emoción y un gran talento para la conciliación y la negociación. Así que esperamos no caer en los vicios de los intereses que son contrarios a los intereses reales de las mayorías que esperan justicia y la aplicación cabal y respetuosa de la ley… es lo menos que esperamos en la defensa de los derechos humanos para este pueblo liberal y luchador…