Decía un amigo el día de hoy en el desayuno: “Si a tu mujer la van a atender de parto, no contratas a un plomero, contratas a un ginecólogo” y esto es así en toda la vida. Los problemas, cuando se tiene ánimo para resolverse, se deben encargar a una persona especializada en el tema: si es político a un especialista en política, si es de comunicación a un especialista en comunicación, si es administrativo a un buen administrador, si es de agitación a un buen agitador, si es económico a un buen economista, en fin, cada cosa tiene a su especialista y cada especialista resuelve lo propio de su especialidad. Lo curioso, con los políticos es que creen que son especialistas y todólogos, que saben de todo y opinan como si para resolver, solamente dieran instrucciones y órdenes que a sus subordinados no les cuadran o bien, hacen lo que les viene en gana. Peor es el asunto cuando los políticos, gobernadores, presidentes o secretarios, ordenan a sus “esbirros” que resuelvan y éstos, se pasan la bolita unos a los otros o buscan ponerse trabas para hacer quedar mal a otro y presentarse como los indispensables y salvadores de las situaciones difíciles. Esto es común cuando los intereses, las cargas de trabajo y la fuerza para resolver se reparten entre muchos y se generan disputas y competencias que solamente se complican, cuando se buscan defender los intereses particulares y no la solución de los conflictos y problemas sociales, que les han encomendado. El poder no se pude compartir, menos, cuando es hacia abajo o a los lados, a los secretarios particulares o a las secretarias, finalmente, ellos, se supone, deben atender las “cosas secretas de los políticos o funcionarios que les contrataron”, no deben ser operadores, porque entonces, el político está a su merced, en sus manos, copado y engañado, la mayor parte del tiempo..
Comentando con mi amigo, quién fuera un hábil y eficiente funcionario con el gobernador Diódoro Carrasco Altamirano, cuando este era todavía un furibundo priísta decía que cuando le consultaban sobre un tema que debería resolver un secretario y este se presentaba ante él para consultarle, normalmente, la respuesta era: “esto que me consultas lo debe resolver el secretario, tal, que creo que eres tú o cumples con dicha función. El que debe conocer del tema, saber las soluciones y las alternativas, eres tú, el que tiene la responsabilidad y el apoyo político al lado de la voluntad política, eres tú, así que en vez de consultarme, debes resolverlo e informarme cuando esté resuelto… si no puedes, pues no tienes la capacidad para la función que estás desempeñando…” y tan tan…
Quieran o no entenderlo sus enemigos políticos, que no son pocos, porque los políticos cuando ya no tienen el poder, a pesar de que tengan influencia en el poder, aumentan sus “enemigos”, Diódoro Carrasco, hizo un buen papel en muchos niveles, de tal suerte que, en poco tiempo y con su proyecto personal y político, logró alcanzar la confianza del presidente para ser el Secretario de Gobernación y hoy, quieran o no reconocerlo, él y sus allegados políticos tiene la estimación, el respeto y la confianza del actual Gobernador, Gabino Cué, al grado que muchos de sus amigos y funcionarios formaron, en su momento, equipo político con Gabino, y este, les ha otorgado muchas posiciones importantes, pero tal parece que, en algunos casos, no están respondiendo y en vez de solucionar conflictos y problemas, los complican y generan, porque no han entendido que una cosa es estar en campaña política y otra diferente es el ejercicio del poder, donde se debe entender que el poder, es un acto de equilibrios y de atracción y compromisos con los contrincantes, no solo para beneficiar a un grupo de amigos o a un grupito con ánimos revanchistas y conflictos emocionales; el poder es frío y de acuerdos, no de desacuerdos… pero en fin, no estamos como las putas viejas que de viejas les da por dar consejos, la realidad es esta y estamos seguros que Gabino, cuando menos, sabe de qué estamos hablando y dónde tiene que aplicar las normas de la administración y poner a cada funcionario en su lugar para que cumplan con su responsabilidad, no que anden de metiches, donde no les llaman. El buen político sabe que: no debe hacer guardias que no le toquen ni comisiones que no le den. Claro que, cuando uno quiere ser el sustituto del gobernador o el coordinador de las transas y manejos en los negocios o el que controla la agenda a su favor, y no para resolver, con ánimo, los diferentes intereses de los grupos que conforman un gobierno de transición y de “alianzas”, esa acción coordinadora es difícil que se logre, así solamente llegarán a conformar y definir a un gobierno no de alianzas ni de transición, sino de transas y de complicación…
Hemos sostenido que Gabino Cué es un hombre bueno y de buena fe, honesto en muchos sentidos, tal vez, complicado en sus propias relaciones y compromisos personales, no es de muchos amigos, pero si sabe respetar a sus amigos a pesar de que muchos de ellos, abusan y transan en su nombre y esto complica mucho las relaciones políticas en un gobierno donde las esperanzas son muchas y los conflictos y problemas son enormes, con grandes rezagos sociales, económicos, culturales y políticos. Por desgracia, los que conformaron la alianza, buscan de inmediato el pago de “cuotas” y quieren hacer los negocios y tener posiciones políticas o administrativas que les fueron negadas por muchos sexenios, pero no han entendido que los que tienen la capacidad y la experiencia son aquellos viejos políticos y burócratas que quedaron en el pandero, y ellos, no cuentan con esa experiencia y por esto, en vez de resolver complican muchos problemas, porque las soluciones las quieren manipular para aumentar la influencia o el poder político o de negociación. Así que todo el poder en este estado tan complejo, se ha dejado a un grupo y a un poderoso secretario particular que hace funciones operativas y administrativas, que coordina y ordena a nombre del gobernador muchas cosas y que sin duda tiene ya una corte y una burbuja que complica más las cuestiones en la entidad, tiene a un secretario que en vez de hacer las funciones de la secretaría, hace las funcionarios de “coyote”, porque es el que reparte y comparte las obras y contratos o negocios que se realizan en el gobierno, esto es público y no faltarán amigos personales que le pueden aclarar, al gobernador, el tema, pero en fin, la política cuando se entiende como un negocio y no como una manera de servir, si se entiende y se ejerce para servirse y enriquecerse, la verdad es que termina como muchos otros chiqueros que se investigan en los Estados… cuando se habla claro, es lógico que los políticos piensan que se atiende a un grupo o se busca un beneficio personal, la realidad es que si vivimos en Oaxaca, lo que queremos es que todos vivamos bien y en paz, con un gobierno de cambio real, no de promesas incumplidas por conflictos de intereses de un grupito de amigos y “colaboradores” que, al tiempo, serán, los peores enemigos del gobernador…LOS CARNICEROS DE HOY, SERÁN LAS RESES DE MAÑANA…
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