No hay tiempo que no se llegue y por supuesto, cuando toda una nación está buscando a los malvados que le confrontan y le han hecho daño, tenemos que pensar que más que buscar justicia y demostrar que los caminos de la ley son las vías adecuadas para mostrar lo malvado que pueden ser los terroristas, el gobierno de los Estados Unidos, que se encuentra en su derecho de tomar las decisiones que considere adecuadas, dentro de su país, y no violar las leyes y la soberanía de los otros países para conservar los niveles de respeto y de libertad de cada uno, tomó la determinación de asesinar al terrorista Bin Laden en un operativo de pocas horas, con un trabajo de inteligencia de varios años y a un costo de 1.6 millones de dólares. Curiosamente, casi nadie nos dice que este terrorista que es el responsable del ataque del once de Septiembre donde murieron miles de ciudadanos norteamericanos y otros muchos de más países que trabajaban o visitaban las Torres Gemelas, fue financiado y alentado, en sus inicios, por el mismo gobierno de los Estados Unidos y en especial por la familia Bush, con quién hicieron grandes negocios petroleros y una cercana amistad. Les sirvió cuando sus intereses se comprometieron en contra de la invasión rusa en Afganistán y al término de esta jornada, cambiaron de tal suerte que de asociado se convierte en un enemigo jurado.
Hoy, dicen que sus servicios de inteligencia y de comandos de liquidación que demostraron ser muy eficientes contra Bin Laden el cual, también dicen algunas informaciones de importantes jefes de la seguridad norteamericana, no se defendió en el ataque, señalan que se dedicarán a localizar y liquidar a los narcotraficantes más importantes de México, entre los que se encuentran Joaquín “El Chapo” Guzmán, al que considera el segundo hombre más buscado por los Estados Unidos, seguramente, a los dirigentes de la Familia, Los Zetas y el Cartel del Golfo, los que quedan de la mafia de los Arellano Félix, Los Templarios de Michoacán, los grupos que operan en Chihuahua, Morelos o Guerrero, en fin, la realidad, como la vemos los mexicanos es que por todo el territorio nacional operan los grupos de la mafia organizada y la desorganizada, tal vez, como dato, les quedaría bien a los norteamericanos que iniciaran con la búsqueda dentro de las instituciones del gobierno de México, donde se encuentran sus protectores y jefes inmediatos, al igual que con los grandes banqueros y especuladores financieros del país que son los que administran sus negocios o bien, con las corporaciones de policía y algunos grupos al interior del ejército y de la armada, pero sobre todo, podrían iniciar con las relaciones de la narcopolítica que están llevando al país a una gran crisis de credibilidad y confianza, que pueden iniciar una etapa de desestabilización que se convierta en una guerra civil de alcances terribles en México.
Algunos grupos de la ultraderecha piensan que solamente con una intervención de las fuerzas militares de los Estados Unidos se logrará controlar el clima de violencia y desestabilización que vivimos en el país, es más, para no andar con rodeos, creo, firmemente, que el mismo presidente Calderón que proviene de las fuerzas de la ultraderecha en el país, ha iniciado este proceso, para que los norteamericanos puedan intervenir directamente en todo el territorio nacional con el pretexto de liquidar y asesinar a los narcotraficantes y claro, de pasadita, dar una limpieza liquidando a los grupos políticos nacionalistas o contrarios a la administración actual, a los grupos sociales y a los dirigentes sociales que, por lógica, no aceptan esa intervención y violación a nuestra soberanía y a las leyes del país… pero una cosa es lo que quieren esas agrupaciones y líderes y otra lo que significa el orden y las seguridad de los Estados Unidos y si para esto se tienen que liquidar a mexicanos, no hay duda, el gobierno de los Estados Unidos, ligado y aprobado por la ultraderecha mexicana, podría intervenir directamente en el país… por esa razón, se debe demandar a las autoridades mexicanas, a los políticos y a los servicios de seguridad e inteligencia del país, que cumplan con su labor y no a hacerse pendejos como lo han venido haciendo para consolidar el poder económico de muchos grupos y políticos en el poder…
Lo que tampoco nos dicen es que las armas que usan esos grupos de narcoterroristas y los de las policías políticas que operan el procedimiento que denunciamos, provienen del gobierno de los Estados Unidos y que tendríamos que aclarar hasta donde se ha incrementado la violencia, sino es por esos operativos Rápidos y Furiosos que desarrollan tan bien los agentes y espías norteamericanos en nuestro país al lado de la complicidad de banqueros, policías mexicanos, funcionarios y políticos . Tendríamos que preguntarnos en dónde están los miles de millones de dólares que ocultaron o lavaron en los bancos y empresas privadas y públicas, los narcotraficantes muertos y los que actualmente están en operación, en dónde han sido canalizados los recursos que decían, las propias autoridades, forman las fortunas de esos grupos y que estaban o están en las bóvedas bancarias, en las grandes inversiones nacionales de políticos, policías y empresarios, pero sobre todo, en las manos de los grandes especuladores financieros que son los que, de un sexenio al otro, han mostrado mayor capacidad de enriquecimiento, como se puede demostrar con las grandes fortunas de muchos políticos, policías, funcionarios y especuladores en el país… pero ahí no se investiga nada, menos, se investigan las fortunas ligadas a los negocios del narcotráfico que siguen creciendo por todo México con la complicidad y sociedad de los políticos nacionales que forman la gran “mafia organizada” que sostiene la inseguridad en el país, con el fin de tener los pretextos para que las fuerzas norteamericanas vengan a hacer el trabajo y el control de seguridad que los mexicanos no sabemos, no queremos o no podemos hacer…
En fin, llegan los tiempos en que seremos testigos de tales acciones comando por parte de las fuerzas norteamericanas, lo que nos preguntamos es: cómo se terminarán los problemas generados por el narcotráfico si en los Estados Unidos no se limita el número de viciosos o se hacen acciones que tiendan a liquidar a las grandes mafias norteamericanas y a los grandes lavadores de dinero, producto de este enorme negocio, así como del contrabando, del tráfico de armas, gentes y tecnología que se inicia en ese país y cuyos beneficios se quedan en el mismo. Bueno, en verdad no nos importa, lo que no queremos es que los soldados norteamericanos realicen acciones de comando en nuestro país y si lo queremos evitar, tendríamos que demandar a los políticos y policías mexicanos que cumplan con su deben y la verdad, es que eso, está en chino…
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