Que hablen los presos: nuevo libro.

En lo personal, no me quedan dudas sobre la acción intimidatoria que realizan policías, políticos y delincuentes en contra de los periodistas, en lo que hemos denomina la CONSPIRACIÓN DEL SILENCIO, que es una forma de guerra preventiva en contra de la misma sociedad. La idea, proviene de los “asesores de imagen y de comunicación contratados por la presidencia de la República, que se han encargado de establecer la misma política generada en España, para no hablar nada que pueda perjudicar la imagen y descubrir las transas, trácalas, complicidades, ineficiencias y corruptela de los famoso reyes de España, bajo pena de ir a la cárcel y de impedirles continuar ejerciendo la profesión y la libertad de escribir”, esto, les ha dado resultados en todos los países donde la ultraderecha ha tomado el poder y establece una política intimidatoria, represiva y antipopular, imponiendo, en la práctica, una dictadura policíaco-militar. Es así que el mismo Manuel Espino, destacado ultraderechista del PAN, duro, en todas sus acciones políticas, “espantado”, compara a Felipe Calderón con Hugo Chávez de Venezuela y, a decir verdad, no se encuentra tan errado. El secuestro de varios periodistas en Durango, lugar donde los presos “trabajan en su rehabilitación, como sicarios de tiempo completo, con la protección y apoyo de funcionarios, políticos y policías”, nos muestra que, este operativo, va dirigido a que los periodistas callen o se conviertan en voceros de los delincuentes y sus grupos por medio de las filtraciones que realizan los policías, funcionarios, empleados, abogados o cómplices. La realidad es que se busca silenciarnos, intimidarnos, generar la idea de que todos los asesinados por esas complicidades, ineficiencias y corruptelas entre policías, funcionarios, empresarios y políticos con la delincuencia organizada están involucrados en malos pasos y manejos y, con ello, reducirnos a un estado de indefensión. Así, el gobierno, como en otros miles de casos, se quita responsabilidad y solamente declara que: tal vez, están involucrados con la delincuencia organizada o son víctimas de las luchas por el poder de los grupos de la delincuencia, cuando en realidad son víctimas de las acciones emprendidas por el gobierno para proteger sus intereses y lucrar con el gran negocio de la “inseguridad”. Hay, por supuesto, declaraciones y filtraciones de muchos policías y funcionarios que en verdad conocen del tema o tienen intereses y complicidades con los delincuentes, que aseguran que el gobierno mexicano no quiere que suceda lo que ha sucedido, por ejemplo, con las declaraciones y filtraciones que realizan algunos cápos del narcotráfico en los Estados Unidos, como “testigos protegidos” o que involucran a los funcionarios, políticos y empresarios que en realidad están ligados y comprometidos con la delincuencia, para generarles conflictos y problemas, por ello, la instrucción oficial es la de matar a los delincuentes en donde se les localice, así que, ellos, no podrán hablar y menos declarar… claro que todo esto tiene sentido y por ello, veremos que en el transcurso de las acciones operativas, se verán más muertos con el pretexto de que “se defendieron o trataron de huir”, cuando en la realidad es que se les liquida para que no hablen ni declaren o involucren a los grandes socios que, desde las instituciones, los empresarios, comerciantes, políticos y banqueros,  tienen  complicidades y sociedades. Los prefieren muertos a detenidos hablando y confesando… Sabemos que esto es parte de las instrucciones desde el poder y tiene sentido y lógica lo que decimos, no son simples informaciones aventuradas o con el fin de desprestigiar la labor del presidente y de sus socios y cómplices o funcionarios que les sirven, no se trata de esto, es verdad que no simpatizamos con el panismo ni lo que la derecha representa, pero una cosa es esto y otra la obligación de ser realistas, honestos y claros en los análisis e informaciones que presentamos, tal como lo hemos hecho con el nuevo libro donde hablamos de las transas, trácalas, complicidades y corruptelas que se generan en los penales del país, como un nuevo negocio para los policías, políticos, funcionarios y, ahora, como nuevo centro de protección, selección y reclutamiento de los sicarios que les hacen el trabajo sucio a los políticos en el país, así, el libro, QUE HABLEN LOS PRESOS, donde cuento muchas de esas cosas, lo pueden adquirir escribiendo a socrates_campos8yahoo.com.mx  y, si nos apoyan con algún donativo, este, será destinado a la labor que realizamos a favor de los familiares que tratan a los niños con cáncer en el Hospital Civil del Oaxaca, Oaxaca. CUANDO ESCRIBIMOS, BUSCAMOS DAR LUZ, ORIENTAR, GENERAR CONCIENCIA O DENUNCIAR LO QUE SUCEDE EN LA REALIDAD Y QUE LAS AUTORIDADES BUSCAN OCULTAR, por ello, hablamos del libro: QUE HABLEN LOS PRESOS, porque en él podrán ver mucho de lo que sucede y de cómo los poÍíticos que hacen de todo un negocio, buscan aumentar sus utilidades y ganancias, vendiendo  y administrando los penales con el sentido de la privatización, que no es otra cosa que generar los negocios a los cuates y darles legalidad… si no, lo veremos al tiempo.,que está el proceso de la privatización de la seguridad y del negocio de la inseguridad…por ello: “EN ESTA CÁRCEL MALDITA, DONDE REINA LA TRISTEZA, NO SE CASTIGA EL DELITO, SE CASTIGA LA POBREZA…”