Pleitos de comadres y comadrejas

Parece mentira, pero hace doscientos años, los mexicanos, discutíamos no la independencia de España sino la creación de nuestro país, a los cien años discutíamos, en la Revolución, posteriormente convertida y prostituía como “ROBOLUCIÓN”, las garantías de los mexicanos y la justicia social, hoy, con los escándalos provocados por Juan Sandoval Iñiguez, al que vimos regañado en muchos momentos por el Nuncio, Gerónimo Prigione, ante las necedades y las historias que se inventaba por las especulaciones ante el asesinato del Cardenal Posadas Ocampo y Marcelito Ebrad, el patiño de Manuel Camacho Solís, quienes, moviendo a las masas de muchos y muchas las confrontan con la intolerancia de un mocho de verdad que goza de la protección del Yunque como brazo armado y político de la ultraderecha dogmática que desgobierna . En la actualidad, los mexicanos, estamos sumidos en los escándalos, pero también en la intolerancia de uno y de otro lado. Los políticos imponen las leyes a su mejor servicio y generan confrontaciones con los demás, ellos, cumplen con su imposición que para esto son “gobernícolas” y dogmáticos, lo mismo del “perderé” que de la “mochiza jaliciense”.

Ya podemos ver en los niños el ejemplo que están dando en las famosas festividades del centenario y del bicentenario, donde gastamos, como dice la chaviza: a “lo pendejo” miles de millones, solamente para que unos funcionarios se pavoneen, mientras la gran mayoría de la población se muere por falta de empleos, por falta de medicamentos, por falta de alimentos, por la desocupación, por la carencia de habitación, por la falta de atención médica, por la carestía, por la marginación, por el analfabetismo, en fin, por la inseguridad provocada por la ineficiencia, complicidad y corrupción de los policías, políticos y funcionarios ligados con los empresarios que “lavan, zurcen y planchan” los dineros de la delincuencia del cuello blanco y de los funcionarios y políticos, de los empresarios y de la delincuencia organizada y desorganizada”. Claro, a las instituciones de enseñanza pública se les niegan recursos por lo cual no pueden aumentar su matrícula, mejorar la investigación científica y tecnológica, esforzarse por controla la excelencia académica, pero a las escuelas privadas y confesionales que son el gran negocio de funcionarios, políticos, empresarios y religiosos, se les dan facilidades o a los bancos y algunos banqueros y especuladores no se les cobran impuestos en sus transacciones multimillonarias como en el caso de BANAMEX al ser vendida por Roberto Hernández y Alfredo Harp helú, quienes retornan migajas para encubrir sus millonarios robos y atracos a los mexicanos, pero, como pendejos, algunos, aceptan que son buenos y les creen sus “obras de caridad” cuando sabemos que sus inmensos recursos llegan por vías que ligan a la delincuencia con los grandes empresarios y especuladores financieros que conforman la gran mafia de la narcopolítica a nivel nacional.

Es increíble que en las pachangas de los “cangrejos del pan”, se festeje, cuando existe más del cincuenta por ciento de los mexicanos viviendo en condiciones de pobreza y millones en pobreza extrema al lado del hombre más rico del mundo, ligado a los presidentes, a los banqueros y especuladores como es Carlos Slim… no hay duda que estamos en un país surrealista y lleno de conformistas, agachones y pentontos que, por migajas, dejan que les insulten, roben, desprecien, asalten y engañen… si los españoles llegaron cambiando espejitos por oro, los dueños del poder político en el país siguen engañando y robando sin que nadie proteste y es, por esas razones, que esperamos que las cosas cambien sin los estallidos violentos que vemos en el horizonte…

En fin, así está la realidad, solo falta la voluntad y la conciencia para cambiarla….con organización, valor y honestidad. Les recordamos que para obtener el libro QUE HABLEN LOS PRESOS deben escribir a socrates_campos8@yahoo.com.mx con su datos y consignando el donativo que nos brinden para ser canalizados a la construcción de la casa para atender a los niños y familiares con cáncer del hospital civil de Oaxaca. No es para no pagar impuestos como le hacen los “mecenas de la ultraderecha”… es para ayudar sirviendo.