Pues sí, no hay duda que, como dice mi abuelito: si la envidia diera tiña, muchos serian los que la tuvieran. Y con todo este relajo que ha generado el maestro Julio Scherer García sobre la entrevista con un capo, como lo es, sin duda alguna, el “Mayo Zambada” y como compadre de Guzmán Loera, “El Chapo”, con el compromiso de verse como un intermediario para nuevas entrevistas, a muchos comunicadores y columnistas que se sienten el ombligo del mundo, les ha dado tiña. No entienden que en el oficio del periodismo no solo es estar recibiendo las comunicaciones que les dan sus amigos o las filtraciones de notas que quieren dar las autoridades o servir solamente a los intereses de los que pagan a los medios de comunicación o estar bien con los que les llevan a las mesas y se convierten en sus mecenas y les protegen por medio de compromisos y negocios o les brindan facilidades para que ellos mismos puedan tener algunas publicaciones o tiempos de aire, para que puedan venderse bien y cobrar bien por sus servicios a los que les contratan y pagan.
Don Julio, es un gran reportero, siempre busca algo nuevo, nos ha sorprendido no solamente con sus notas diarias y con sus libros salidos de una reflexión profunda y un trato directo con los protagonistas. Por supuesto que no es hombre que se vea bien en los medios del poder, es un serio crítico del poder y no se anda por las ramas. No miente y esto es bien importante y goza del afecto y de la confianza de su público que siempre está atento a todo lo que escribe o dice. Por supuesto que no se puede estar siempre de acuerdo con lo que plantea, pero es la forma en que la discusión se procesa en la conciencia y genera la ruta a la verdad o cuando menos, a la verdad de ese momento. Pero quieran o no quererlo que no busca su cariño ni su comprensión en los demás y sobre todo, en esos “periodistas” banqueteros y de buenos restaurantes que se la pasan comentando lo que los demás les dicen o les filtran desde las fuentes del poder, creyendo que con esto contribuyen al mejor desarrollo del país, Don Julio, nos muestra que en el camino del reportero y del periodismo, lo mejor, es ser uno mismo y no estar en espera de los desechos de la información que nos dan los poderosos a los que en verdad sirve la manipulación de la información.
No dudo de que pronto tengamos nuevos libros que nos hablen de este tema que tanto sarpullido saca a muchos políticos y afecta a muchos policías y gentes ligados al sector empresarial o a los banqueros que saben que, cuando a algún narco se les suelte la lengua y crean que han sido traicionados por esos hombres de “buenas conciencias” saldrán muchas verdades, donde se conocerán las relaciones, la protección, la impunidad, las complicidades y las sociedades establecidas por medio de este negocio donde son parte importante y que se llevan la mejor parte y las grandes ganancias o, los robos que les hacen a los narcos y delincuentes que tienen esas complicidades con ellos.
Sabemos que muchos políticos tienen o sostienen esa red de complicidades y que les brindan protección e impunidad, pero la verdad de las cosas es que en el sector empresarial se han cobijado las grandes fortunas obtenidas por el narcotráfico, el tráfico de armas, el contrabando, el robo de vehículos, la piratería, el tráfico de gentes y no existe tampoco duda de que, todo esto, se logra por las relaciones criminales que existen entre políticos, policías, agentes de seguridad, funcionarios e incluso sacerdotes de varios ritos, como se ha comprobado en muchos casos. Y es lógico que todos esos grupos temen las declaraciones que puedan hacer sus socios o cómplices y tal vez, este, sea, el verdadero mensaje que se manda con tal entrevista proporcionada a Don Julio Scherer y este es, el verdadero temor, de muchos de los que han utilizado a sus “voceros” para que busquen descalificar a Don Julio y su labor en el periodismo nacional.
No son pocos los presidentes que han sido tocados por denuncias o declaraciones de periodistas sobre sus relaciones con los grupos del crimen organizado, no son pocos los gobernadores y funcionarios, militares y policías y, claro está que teniendo el “palito por el mango,” siempre, salen raspados los que han denunciado y no los cómplices y socios de esos delincuentes que han quedado en la impunidad. En fin el mensaje, si no lo han visto con claridad, es decirles a esos socios y cómplices que, tal vez, les han negado los apoyos necesarios o que creen les deben es que, ellos, están vivos y pueden hablar y declarar sobre muchos temas que pondrían en peligro la estabilidad de muchos y del sistema, en muchos sitios y lugares, niveles y puestos… así que, por esa razón, tienen que buscar la forma de descalificar a Don Julio, para que no impacte tanto lo que digan… esa es la manipulación que se ve en esas críticas de muchos “voceros” de los poderosos y de los políticos… como dice el dicho: “Solamente el perro de adelante sabe a qué le va ladrando… los demás, simplemente ladran”.
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