El negocio de la inseguridad

UNO DE LOS GRANDES NEGOCIOS GENERADOS POR LA INSEGURIDAD ES EL QUE GENERAN LOS POLICÍAS, POLÍTICOS Y EMPRESARIOS, POR MEDIO DE LA LLAMADA “SEGURIDAD PRIVADA” Y ES DE TAL SUERTE EL GRAN NEGOCIO QUE, POR EJEMPLO, PODEMOS PONER UNA MUESTRA APARECIDA EN LA COLUMNA Capitanes DEL DIARIO Reforma: “¿A usted cuánto le cuesta estar seguro en México?” .

“Piense en lo que paga por la seguridad en su condominio, su cuerpo de seguridad privado, tal vez en su auto blindado… en todo eso.

La seguridad de José Octavio Reyes costó 488 mil dólares sólo durante el 2009

Ese fue el monto que pagó Coca Cola Company con tal de que su presidente para América Latina viviese seguro durante el año pasado en México.

Fueron 370 mi por los gastos de su automóvil y del hombre que lo conduce. Además de 118 mil por su personal de seguridad.

En este rubro, la empresa gastó 38 por ciento más que en el 2009.

Coca Cola gastó más incluso que en Muhtar Kent, el presidente de la compañía a nivel mundial, a quién por los mismos servicios asignó un gasto de 269 mil dólares durante 2009.

Ahora piense usted en lo que gasta para que su compañía opere con seguridad e imagine lo que debe pensar quien va a venir a invertir en el país.

Medite bien antes de quejarse ante el Gobierno por tener que hacer estos exorbitantes gastos… pueden tacharlo de hablar mal de México e ignorar que va usted ganando esta guerra”… sin comentarios. El artículo no tiene pierde.

La realidad es que no existen dudas sobre este asunto de la inseguridad cuando decimos que mucha de ella, la han generado los policías, los grupos paramilitares, los empresarios del ramo de la “seguridad privada”, los funcionarios y los políticos que gozan de los beneficios de este gran negocio por todo el país. Además, por este camino, han encontrado una nueva veta de negocios cuando intervienen teléfonos particulares, espían a los ciudadanos y políticos, empresarios o venden armas y se alquilan para filtrar informaciones que les sirven a los policías para “presentar trabajo” o bien, para involucrar a todos aquellos que les critican o hacen críticas sobre su labor o denuncian sus negocios y complicidades o corruptelas que han permitido que la inseguridad sea una constante en el país, al grado de que por este camino, han podido encontrar los negocios dados por el mismo gobierno y sus instituciones, al grado de que sus oficinas y los servicios de contrainteligencia o de vigilancia interna, la tienen contratada con las empresas privadas que sirven a los banqueros y a los grupos de poder, de tal suerte que la vigilancia y la seguridad de sus edificios e instituciones, las tienen, por medio de policías privados a los que contratan por medio de empresas de políticos, empresarios y policías que son los que gozan de tal negocio. En este negocio existen más de cien mil “vigilantes privados” que hacen las funciones de espionaje o de golpeteo a los ciudadanos para que, en vez e eliminar la inseguridad se provoque y se contraten más elementos que pagamos los ciudadanos, para dizque darnos protección y en la realidad, solamente estamos engordando las utilidades de los negociantes de la “seguridad privada en el país”, de tal suerte que hoy, “empresas extranjeras” son las que realizan estos trabajo de espionaje en contra de los ciudadanos mexicanos con la impunidad que les brindan los policías políticos en el país, a cambio de la información privada que obtienen de ciudadanos, empresas, partidos y grupos políticos o de las mismas instituciones a las que supuestamente “cuidan y vigilan”, cuando su verdadera labor es la de espiar y generar las denuncias que sirven a sus jefes y empleadores, o filtrar información, para desprestigiar a enemigos políticos en tiempos electorales...

Y es verdad que en el tema de las “filtraciones de información” juegan un papel importante los “testigos protegidos” que son delincuentes con impunidad, que pagamos los ciudadanos, no para combatir al crimen organizado del cual ellos forman parte a pesar de que digan que están combatiéndoles, la realidad es que gozan de impunidad de sus delitos gracias a este juego perverso que utilizan los policías políticos en el manejo del poder y de la eliminación de enemigos políticos de poderosos o de los grupos que están en confrontación en el juego político.

Hace tiempo que tenemos la seguridad de que por medio de los grupos de negociantes de la llamada “seguridad privada” ,los cuerpos y grupos de inteligencia de la policía política, para eludir las responsabilidades que se puedan generar en los espionajes a ciudadanos o grupos políticos, utilizan a esas empresas y a sus “sicarios de la información “ con el fin de filtrar a los medios de comunicación o a los comunicadores que se prestan al juego informes elaborados o falsos que desprestigian o incriminan a muchos ciudadanos y políticos, incluso a empresarios, cuando éstos están en confrontación con otros grupos poderosos en el campo empresarial o se utilizan, los espionajes y vigilancias especiales, para estar atentos a los movimientos financieros y empresariales o particulares, con el fin de dar esa información a los grupos de delincuentes o chantajistas y que sean utilizados en los delitos y represión que se hace contra los ciudadanos mexicanos y no hay forma de evitar esa acción de espionaje y de violación a los derechos y garantías de los mexicanos, simplemente porque los funcionarios, políticos, empresarios, policías y paramilitares son los que controlan esos negocios por medio de prestanombres y de empresas fantasmas, para eludir cualquier responsabilidad penal y civil que se les genere en sus actividades ilegales de espionaje y chantaje contra los mexicanos… mientras, continuamos viviendo en el terror y en el horror generados por esa inseguridad ficticia que se alienta desde los grupos de poder y de “seguridad privada”, para continuar con el gran negocio de la “seguridad”. Actúan, como incendiario y bomberos, para tal caso, el negocio es el negocio y, la información, proporciona poder y más negocios… así de simple. Pero continuamos haciéndole al Tío Lolo… pentontos solos. Y luego dice que, los policías, nos cuidan…