domingo, 22 de noviembre de 2015

Sicarios baratos

HAY BUEN PRETEXTO PARA TODOS AQUELLOS QUE NO SON AFECTOS A LA LECTURA: POR CADA 200 MIL MEXICANOS HAY UNA LIBRERÍA… ahora entendemos aquello que sucedió en Guadalajara. Y grave es que en México existan más de 7.5 millones de jóvenes NINIS, el 24.7 % de la población juvenil que tarda para encontrar empleo, ya no escuelas, más de tres años y medio, y luego no quieren que mejor se afilien a las escuelas de la delincuencia y se conviertan, desde niños, en los sicarios preferidos, tal como se está observando. Al ser menores de edad no tienen riesgo de largas condenas y al cumplir los 21 años deben ser liberados por ley,  recordemos que por ejemplo, aquella criatura en Morelos que reconoció y se conoció como uno de los sicarios más despiadados del país a su minoría de edad, hoy, está en libertad, así los capos de la droga y del crimen organizado no tienen que mantener mucho a sus familias ni gastar mucho en abogados.
         Ahora se conoce y se reconoce que en muchos sitios existen los sicarios menores de edad, jóvenes desesperados por no encontrar escuela ni trabajo que utilizan su tiempo en las redes y por medio de ellas concretan los “trabajos,” como ha sucedido en Tijuana, Ulises Abraham, menor de 14 años que fuera contactado y contratado por medio de Facebook por sus empleadores, donde le dieron las instrucciones y el arma, así como las indicaciones de quién sería la víctima, asesinato por el cual cobraría 31 mil pesos; supuestamente el hombre que  asesinó de dos balas en el rostro, es Guillermo Gastélum Jaques, y después del crimen, seguramente, son denunciados por sus contratantes para ni siquiera pagarles por el “trabajito”…como ha sucedido en otras ocasiones.
         Y efectivamente, al contratarle y darle las instrucciones le llevó un taxi a un sitio donde le dieron un arma calibre 40, prometiéndole que al terminar el “trabajo” se le pagaría, después de señalarle al que sería su víctima
 En el 2005, se ubicaba a otro jovencito de quince años, César Manuel Ibarra García quién había cometido el crimen de su cuñada y sus sobrinos, solamente para demostrarles a los sicarios y narcotraficantes de que contaba con el valor suficiente para que se le contratara y se le llevara a su pueblo natal en Sinaloa, porque “nada más quería ser narco y tener dinero y poder”. Esta es la experiencia que estamos dejando entre los jóvenes a los cuales se les ha negado toda oportunidad, en este país que somos capaces de salvar a bancos y banqueros y endeudarnos por años  y no somos capaces de ayudar y salvar a los jóvenes que padecen tal miseria y discriminación.
         En una larga charla que sostuvimos con Jorge Gabiño, director del Metro, nos hacía referencia a los grupos de bandas de jóvenes que cada fin de semana llegan por ese medio de transporte a sus sitios de reunión y de cómo se tienen que realizar operativos coordinando a la policía para evitar que se enfrenten entre bandas y hagan uso de la violencia extrema como acontece en algunas ocasiones y lesione y ponga en peligro a los demás usuarios del Metro.
         En Oaxaca, durante los conflictos del 2006, una de las empresarias del transporte, Aurora López Acevedo, contrato a muchos jóvenes pandilleros ligados a los narcomenudistas para secuestrar e incendiar camiones para cobrarle el odio que mantiene en contra de Ulises Ruíz, quién la remitió a la cárcel después de habérsele comprobado una serie de irregularidades y corruptelas en el campo del transporte. Esos jóvenes que hoy son un peligro y que utiliza para continuar amenazando a todos aquellos que le caigan mal o le reclamen la falta de pago a sus adeudos o se confronten o accidenten con sus choferes, son contratados en las zonas marginales de la capital y son los que operan en los mismos camiones y otros transportes, el narcomenudeo, en todo el estado. Así que si bien tenemos el problema social y económico también tenemos “empresarios” que se dan el lujo de ser contratistas de sus servicios para amenazar o lastimar a sus “enemigos político”, tal como deberían investigar los policías en vez de estar apapachándola solamente porque reciben algunos de ellos o sus jefes algunas recompensas por su silencio, protección y servicios…

         Sin duda alguna estamos ante un nuevo fenómeno que se extiende y que en realidad desconocemos y no tomamos en cuenta ni resolvemos, las colonias marginales producto de la migración por pobreza de muchas comunidades son el bastión donde se generan esas pandillas, y después, se van convirtiendo en los grupos de narcomenudista y posteriormente de ahí salen muchos de los señores del narco tal como lo vemos cuando conocemos las historias familiares de muchos de ellos. Ahora, esos grupos, también se utilizan para las venganzas políticas y eso lo vemos en muchos sitios o bien, sus líderes, escalan a los puestos de dirigencia política para dar paso a la formación de la narco política y los narco negocios  como vemos van expandiendo sus temas y negocios en todo el país. Ni siquiera hay un estudio serio sobre este tema y como dice mi abuelito: ni lo tendremos, porque, después, ¿de dónde podrán obtener sus sicarios los políticos para controlar a sus huestes o para doblegar a sus enemigos?, ya saben, buscan sicarios baratos….

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