viernes, 10 de junio de 2011

Caravana del consuelo

El remedio para la “Ruta del Dolor” es la “Caravana del Consuelo”. La vida me ha enseñado que no debemos ni tenemos razón para guardar resentimiento y odio a los que nos han dañado, esto, solamente provoca mayor malestar físico y espiritual y hace perder la razón de la vida. No digo que tenemos que olvidar las ofensas y las violencias de unos para los otros, no se trata de ponernos como en un trance de autoayuda o en esas formaciones que hacen los que dicen que, solamente, pensando bien, se terminan los problemas, no, hay todo un proceso de duelo y de perdón, no es una tarea sencilla y tampoco es simple, no se trata de que porque decimos que perdonamos y olvidamos ya se provoque esa reacción en nuestro corazón y en nuestra mente.

El duelo y el perdón no se adquieren con facilidad cuando la pérdida es uno de nuestros hijos, un padre o un hermano, nuestro compañero o un leal y cariñoso amigo. La realidad es que es muy difícil distinguir el origen de este dolor y culpamos, fácilmente, a los tiempos y las circunstancias, las podemos entender, pero no es sencillo el que podamos perdonar y el que podamos olvidar la forma y la violencia en las tragedias. Todos los mexicanos estamos convencidos de que es importante luchar contra el crimen organizado y contra los narcotraficantes, pero no podemos olvidar que, éstos, se han desarrollado al amparo de la ineficiencia, la complicidad o las corruptelas de los propios funcionarios, políticos, policías, empresarios y banqueros que de este proceso han logrado acumular enormes fortunas. Si el gobierno no quiere que los delincuentes existan, lo puede lograr sin afectar a la población que confía en que le brindarán la seguridad en sus vidas y propiedades, pero no es así, la gama inmensa de tejidos y corruptelas es enorme, y por esa razón, se encubren las acciones de la misma delincuencia con el pretexto de que se le combate o bien se piensa que las “guerras”, solamente son contra los “malosos” cuando en realidad encubren políticas represivas o bien, la utilización de este proceso para inculpar a los enemigos políticos o a los grupos contra los cuales se compite por el control del poder, sin importar que se lesionen a las familias inocentes, que se maten a inocentes a los que hoy, clasifican, cínicamente, como “DAÑOS COLATERALES” Y NO COMO ASESINATOS PRODUCTO DE LA INEFICIENCIA O DE LOS INTERESES QUE SE JEUGAN EN ESTE CAMPO Y TIEMPO.

No tengo dudas sobre el temor que existe en muchos funcionarios, políticos, policías y especuladores financieros si es que en un tiempo, como ha sucedido en otros países, de golpe, los mexicanos, nos demos cuenta que teneos un verdadero baño de sangre con el asesinato de unos y otros de más de 40 mil mexicanos, que existen muchos desplazados de sus viviendas y comunidades porque el gobierno no ha sabido garantizar la seguridad mínima a los mexicanos, que hay miles de desaparecidos en esta lucha y que, muchos, no se sabe bien a bien, si son eliminados por los delincuentes o existen grupos de “eliminación y provocación” de los mismos organismos de “seguridad” para encubrir sus muertos en los campos de tortura al tomar las “declaraciones” o para inculpar a muchos individuos que le son molestos a los mismos delincuentes o a los grupos de poder y que solicite una Comisión de la Verdad y es por ello que, la Caravana del Consuelo a la que ha convocado Javier Sicilia, es recorrida por cientos de simpatizantes y dolientes, víctimas de esta violencia sin sentido y sin control que ha generado los tiempos de la violencia y del entreguismo para dar “seguridad” y garantizar la zona fronteriza del Sur de los Estados Unidos, a pesar de que nadie ha detenido el consumo de drogas, el tráfico de dinero y armas que nos afecta por los consumidores y drogadictos de ese país, y cuando nosotros pagamos con un alto precio en muertos, heridos, desaparecidos, desplazados por el consumo de drogas de drogadictos norteamericanos y cuando somos víctimas de las intrigas de las instituciones de seguridad norteamericanas que, como en el cínico y violento esquema del RÁPIDO Y FURIOSO, aceptan que ellos mismos vendieron, introdujeron o regalaron cientos de armas que han sido las que han asesinados a los mexicanos, culpables o inocentes, pero mexicanos al fin.

Morelos, D.F., Estado de México, Michoacán, Jalisco, San Luis Potosí, Durango, Zacatecas, Nuevo León, Coahuila y Chihuahua son los estados donde han dejado la huella del dolor y del perdón los caminantes de la Caravana del Consuelo exigiendo paz, convertir el dolor en amor, no más odio, no más muertos, no más sangre y claro, el silencio y el cinismo de una autoridad y un gobierno ciego, terco, mudo, violento, ineficiente y corrupto en muchos sitios. A esta marcha se han aliado, en el dolor y en el perdón, cientos de periodistas, empresarios, amas de casa, obreros, empleados, fotógrafos, activistas, organizaciones no gubernamentales, en fin, una gran gama de mexicanos donde no existen los partidos ni las ideologías sino una causa común por la paz y por no más sangre ni más muertos.

Javier Sicilia habló de :”EL CAMBIO DE CORAZONES” QUE SE ESPERA LOGRAR Y QUE PERMITA “rescatar la vida democrática del país” Y SUENA A SUEÑOS E INOCENCIA ,PERO ASÍ ES LO QUE SE NECESITAPARA CAMBIAR: SUEÑOS E INOCENCIA, LIMPIEZA DE ESPÍRITU, DE ALMA Y NOBLEZA.

No estoy seguro si en los funcionarios, policías, políticos, banqueros que son los beneficiarios económicos y políticos de este gran conflicto de sangre puedan tener un cambio y una reflexión de corazón y de espíritu, tal vez, creo, que son demasiado materialistas y egoístas, que primero están sus intereses a los intereses de los demás, y por esa razón se dará el conflicto en cualquier momento, se están hablando dos lenguajes diferentes que no se entienden ni a señas, porque ellos no tienen dolor ni conciencia, no saben lo que significa la pérdida de la paz, de los seres queridos, ellos, solamente están preocupados por el poder y su control, su manipulación y sus negocios… lo demás, carece de importancia, y con cinismo declaran que no cederán, porque el ceder, dicen ellos, es reconocer que perdieron, cuando el saber dar un paso atrás, tal vez, es bueno para avanzar con mayor fuerza, con la fuerza y la voluntad de todo el pueblo, que hoy, no les tiene ni confianza ni les cree en sus dichos porque no corresponden a sus hechos. En fin, por un lado el dolor y el perdón, la reflexión, por el otro, la necedad y el cinismo, la ineficiencia, la complicidad y la corrupción. Dos los leguajes que se hablan: uno, con el corazón y otro, con el bolsillo y el poder, con egoísmo, con cinismo… pero sin duda, los cambios se lograrán, tarde o temprano, porque hay conciencia y hay verdad… muchos, abrimos los ojos y el corazón.

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