martes, 15 de marzo de 2011

El tráfico de armas es oficial

Curiosamente, a pesar de las evidencias y de las denuncias realizadas por los miembros de las policías norteamericanas de que recibieron instrucciones de sus superiores para realizar lo que llaman “operación Rápido y Furioso” con el fin de introducir, sin el conocimiento de las autoridades mexicanas, más de dos mil armas de alto poder a un grupo del crimen organizado, dizque con la intención de seguir su ruta para despue´s liquidarlo, ninguna autoridad, ningún funcioanrio, político, empresario, financiero y menos policía, ha dicho: “esta boca es mía” y reclamado al gobierno de los Estados Unidos por esta franca agresión y violación a nuestras leyes y soberanía. Y es lógico que no lo veamos porque sabemos que los políticos, los funcionarios, los policías, los empresarios y los especuladores financieros que siempre se benefician del crimen organizado, deben sostener buenas relaciones con el gobienro de los Estados Unidos para que éste no les reclame y les genere un problema, al indiciarles en sus constantes violaciones a las leyes y sostener empresas o recursos provenientes de la delincuencia. En fin, esta es la verdadera hermanandad y la colaboración que tienen que sostener los hombres del poder para continuar enriqueciéndose con toda clase de cuentos, mientras en el país, llevamos la contabilidad de más de 35 mil muertos, producto de cuatro años de la “guerra de Calderón” que no ha dejado más que muertes y tragedias.

Tendríamos que contabilizar, porque de esto se trata para los políticos y funcionarios, también, más de 35 mil viudas y viudos, más de cien mil huérfanos y, por supuesto, miles de encarcelados y eso que nadie podría contar a los miles de desaparecidos por la delincuencia y por los grupos de las policías que siguen actuando como en los viejos tiempos, donde se generaban los grupos de liquidación de enemgios del poder, al mejor estilo de “la Brigada Blanca” y otros más que comandaban, desde las instituciones de seguridad y de inteligencia, tal vez, por esa razón, el Obispo, Raúl Vera, declara que: “tal parece que desde el gobierno, se protege a un grupo de la mafia del tráfico de drogas”.

Y conociendo lo que ha sucedido por instrucciones de funcioanrios norteamericanos de pasar armamento de grueso calibre al nuestro país para que sigan matando mexicanos y alguno que otro policía o espía de los Estados Undios, pues tendríamos que entender que el tráfico de armas también tiene que ver con la liga entre delincuentes, contrabandistas y policías de ambos países, porque si ellos pudieron pasar miles de armas que hoy matan a mexicanos, es lógico que tuvieron la complicidad de los agentes de Aduanas mexicanos y de las policías y militares que en todas las carreteras nacionales tienen retenes y que son los que, violando las garantías ciudadanas de los mexicanos, esculcan, paran y, muchas veces, lastiman a las familias que transitan por los caminos del país, cuando la Constitución General de la República “garantiza” el libre tránsito de los mexicanos sin intervención de ninguna autoridad y, si ellos son tan cuidadosos para no permitir que pasen ni cuchillos en los vehículos de los ciudadanos, pues no podemos entender como un grupo de policías norteamericanos pueden cruzar, miles de armas al país y venderlas, con total impunidad, a los grupos de delincuentes y luego pierdan la pista y son las mismas armas, de ellos, las que matan a su agente en los caminos de México, a menos que alguno de los gringos, se haya quedado con alguna de esas armas y ellos mismos hayan liquidado a su agente con el fin de generar un serio conflicto internacional y doblar la voluntad entreguista del presidente Calderón, con un escándalo de tal naturaleza... y bueno, ya conocemos las historias de las agencias norteamericanas para hacer este tipo de espectáculos, con el fin de tener los elementos para hacer las invaciones a otros países o liquidar a los funcionarios, policías o milietares que ya no les sirven para sus fines y protección de intereses y es que:” el que se quema con leche, hasta al jocoque le sopla”...

Lo que queda claro es que el embajador, Pascual, protege y garantiza los intereses de su país, los Estados Unidos y que, por esa razón, a pesar de la débil protesta de Calderón, acusando al embajador de haber provocado un insidente contra las fuerzas armadas del país, el gobienro gringo, pues hace la ratificación y se queda, y no hay duda que Calderón, sigue siendo solamente un títere, como lo han sido muchos de los presidentes de este país, para verguenza de los mexicanos... y ellos, seguirán metiendo miles de armas al país para que nos sigamos matando, y ellos vendiendo armas y equipos que de esto fortalecen a la economía de guerra de los Estasdos Unidos. Así pues seguimos siendo los buenos vecinos, nosotros, los buenos, y ellos, los vecinos, que nos meten armas con policías norteamericanos para que los mexicanos nos sigamos matando... a cazar a los “aminowuanas”...

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