martes, 29 de diciembre de 2009

Los verdaderos intocables

Y BUENO, éstos días son para reflexionar sobre lo que hemos venido haciendo, en cómo nos hemos comportado, en qué salidas sencillas y humildes, llenas de amor y de encanto hemos podido lograr para hacer más alegre y confiada la vida de los demás, de nuestros seres queridos, de los que son parte de nuestros afectos y de los que están con nosotros en el mundo. La realidad es que todos queremos dar lo mejor, tal vez, por la alocada carrera del tiempo, de los espacios, de las obligaciones, del trabajo, de la comercialización, no nos damos cuenta de lo que debemos hacer en la realidad y que no sería nada compatible con lo que hacemos diariamente en esa vorágine en donde estamos destruyendo todo, nosotros y a los demás.

Y es bueno reflexionar porque en los tiempos de espera, en los tiempos donde tenemos que poner a prueba la paciencia, la modestia, la humildad, el perdón a nosotros y a los otros, es como podemos tener una visión mucho más clara de lo que realmente nos sucede y sucede, de todo lo que nos afecta. Por ello, cuando vemos los aumentos de precios en cascada alentados y promocionados por los hombres del poder, entendemos que los hacen en éstas fechas porque son las fechas en donde todos queremos perdonar y perdonarnos, en donde de una u otra forma se nos dan, no nos regalan los excedentes de nuestro esfuerzo y trabajo que en los tiempos actuales les llaman aguinaldos, cuando en realidad son parte de lo que nosotros mismos hemos producido y generado, no no nos dan, no es gracia de los hombres del poder o de los poderosos, es parte de lo que generamos y, por ello, debemos recibir.

Así, cuando vemos todo lo que no he cumplido el gobierno o el presidente en sus abundantes declaraciones durante la campaña política y vemos que sus declaraciones no tienen nada que ver con sus hechos, por supuesto que nos indignamos, nos sorprendemos y no tenemos más que declarar que es un cobarde, mentiroso y demagogo, que lo que dijo no tiene nada que ver con lo que hace y, para los lambiscones que se la pasan todo el día rascándole u oliéndole el trasero, esto puede resultar muy violento y decir que, tal vez, como tecleadotes, somos más locos que lo que suponen algunos que somos, porque no tenemos “pelos en la lengua” y porque nos encanta decir lo que sentimos, porque, finalmente, ya no tenemos ni esperanzas ni miedos…

Pero veamos lo que decimos con esa certeza que nos brinda la realidad y la verdad de lo que acontece. Por ejemplo, ahora, se habla mucho de esa “Guerra contra el Narcotráfico”, pero la verdad es que no ha sido otra cosa que una maniobra encaminada a distraer la atención pública en la realidad política, donde, el presidente, Felipe Calderón, por más que quieran ocultarlo sus operadores de imagen política, quedó con un triunfo muy discutido en el proceso electoral y si bien pensamos que gano con ese pequeño margen, no quiere decir que cuenta con todo el apoyo que, por ejemplo, tuvo, en su momento, Vicente Fox y que hecho a las letrinas de la política por su pésimo manejo y resultados políticos de su gestión. Así que se enreda y se mete en las garras de la policía política, de los operadores de la policía que en realidad, solamente estaban esperando este momento para imponer la política norteamericana de control y represión, para que ellos nos vendan armamento, nos impongan controles en el manejo administrativo y operativo de las policías, de los equipos necesarios para este espacio del manejo en el espionaje política nacional, en el control de los mecanismos financieros y de operación bancaria que deben ellos controlar, no para luchar en contra de los narcotraficantes sino para el control económico del país y de sus finanzas, en fin, el control, esta destinado a que seamos nosotros los que establezcamos el escudo de protección a sus intereses y no a los nuestros, pero sobre todo que, carguemos con los costos financieros, políticos, morales, éticos en esa su lucha en contra del “terrorismo” que no es otra cosa que el mecanismo por el cual, ellos. generan y alientan las guerras en otros países para controlar la producción de petróleo o de otras materias primas, necesarias para su bienestar y desarrollo financiero.

La realidad es que para justificar y fortalecer la fuerza política que dejaba en el camino y que demostraba que a pesar de que había ganado, su triunfo, solamente, era producto de una maniobra electoral que dejaba mucho que desear y que fomentaba, en cualquier momento, la confrontación de otros grupos políticos que demandaban también ese triunfo electoral, ante la raquítica cantidad de votos por los cuales llega a triunfar Felipe Calderón. Es por ello que, el presidente, asumió una guerra que en realidad era alentada por los grupos del mismo narcotráfico a nivel nacional e internacional pero, donde las acciones fundamentales se dejaban en manos de los grupos de la policía nacional, de la policía política, de los grupos paramilitares que sostenían por medio de la protección e impunidad que le dan los políticos, funcionarios , financieros, banqueros, empresarios y, sobre todo, los especuladores financieros que son el brazo operativo en el campo del manejo de los recursos de los miembros de la delincuencia organizada y que cuentan con la complicidad y protección de los políticos, policías, de los banqueros y empresarios nacionales e internacionales.

La realidad es que en esa “guerra” en donde sin opinión ni apoyo emprende el presidente con los policías políticos y con los norteamericanos en México, llevamos más de 15 mil asesinados, donde el gobierno no ha investigado solamente porque, para quedarse sin sostén, ellos mismos, declaran que son asesinados por su participación en el narcotráfico o bien que tienen ligas con los narcotraficantes, jamás, dicen, que existen las ligas con los policías, funcionarios, banqueros, empresarios, especuladores financieros, políticos o paramilitares, con esa simple declaración se deja sin investigar la muerte y el asesinato de miles de mexicanos, pero sobre todo, se manda una idea del terror y del horror que deben soportar los ciudadanos, porque en caso de no aceptarlo o rebelarse en contra del gobierno y de sus cuerpos de represión, ellos mismos están indefensos porque pueden ser asesinados por los grupos especiales del gobierno que encubren las operaciones especiales al viejo estilo de las utilizadas en la eliminación de gentes que le son estorbo a las políticas e intereses del gobierno y de sus aliados.

La única realidad en este tiempo es que se han destinado miles de millones de pesos para el fortalecimiento de los cuerpos de represión y, sobre todo, para el control y el aumento del poder de los cuerpos de la policías política y no quiere decir que esos recursos sean destinados para aumentar la seguridad de los ciudadanos, son para aumentar la seguridad de los grupos del poder político no de los ciudadanos. La represión y el manejo del espionaje político, el manejo de los recursos financieros de las propias mafias, se han canalizado por medio de los grupos de políticos, policías, banqueros y financieros y es, por esa razón que, cuando ellos tienen asegurados esos enormes recursos, son, ellos mismos, los que ponen en operación la política de eliminación de jefes mafiosos, porque es así que esos grupos se quedan con los enormes recursos financieros de esos jefes y por ello, cuando se hace un recuento de los acontecimientos, no vemos los miles de millones de dólares que se suponen tenían en su poder los jefes mafiosos que han sido asesinados por sus rivales o por medio de los grupos especiales que se sostienen con el apoyo de gobernantes y de políticos en el poder y, donde los banqueros y financieros, especuladores, tienen tan amplios espacios de operación. En fin, con el cuento de las guerras, unos, ponen los muertos y las víctimas de la represión y otros, muy pocos, selectos y miembros del poder político y financiero, son los que se llevan las grandes utilidades… son temas para la reflexión, no hay duda, ciertos pero peligrosos. Así, seguiremos reflexionando… mientras tanto, siguen las matanzas de inocentes y de alguno que otro malandrín… claro, de ningún político, policía importante, financiero o empresario poderoso ligado al poder. Esos son los verdaderos INTOCABLES…

No hay comentarios: