lunes, 13 de septiembre de 2010

La energía de la vida


En ocasiones es difícil escribir sobre uno mismo, por ese motivo estoy haciendo esfuerzos para iniciar lo que puede ser parte de una autobiografía, donde podré dar cuenta de muchos errores, muchas vivencias, muchas alegrías y tristezas, muchos solidaridades y  actos y valores que forman la vida, hoy, cumplo 66 años, no siento que hayan sido en vano o malos, al contrario, le estoy agradecido a la vida por todo lo que he pasado, a mis amigos por todos los gratos momentos y las lealtades en su amistad y confianza, a mis seres queridos por todos los momentos de amor y de aceptación a los malos y buenos momentos por los que hemos pasado, a todos aquellos que han sido parte de algún proceso en los días de mi existencia, gracias.
En realidad no sabemos cuánto viviremos más, espero que sean muchos días valiosos y alegres, finalmente, no creo tener mucho de qué quejarme o de qué estar dolido o resentido, a mis enemigos que fueron suspiros en algún momento les deseo lo mejor, con sus confrontaciones logré crecer y aprender lo que es la vida y su significado, a mis amigos la fuerza y la emoción de muchos gratos y buenos momentos, estoy seguro y convencido de que lo que he hecho en la vida, en gran parte, ha sido bueno,  todos cometemos errores y de ellos viene el aprendizaje.
Los actos que tuve que hacer respondieron a los momentos y a las circunstancias, es sencillo querer justificarse cuando han sucedido las cosas y los eventos, para muchos es la mejor forma de “hacer”, cuando en realidad lo que hacen es esconder su cobardía y sus miedos, sus temores, los actos son los que van formando la conciencia y, sobre todo, van dejando las huellas de nuestro paso por la vida, por ello estoy convencido de que mi paso ha sido bueno, no ha sido mediocre ni me he escondido en el resentimiento y en la negatividad, al contrario, creo que la vida se debe confrontar con alegría y con valor, así ha sido cada acto y cada día en mi trayecto, estoy seguro, porque lo siento y lo vivo con emoción, alegría y sigo aferrado no a las ideas torpes, sino a los cambios que se requieren en el continuo fluir y variantes en la vida.
Sigo construyendo porque no creo ni en las “jubilaciones ni en los descansos”, la naturaleza es un construir constante, un cambio permanente, es la fuerza de la vida, es la energía que no se destruye y que cambia construyendo cosas y valores nuevos en cada instante. La energía es lo que nos mueve al lado del corazón y de la conciencia, es lo que vale la pena vivir, por ello, no se pierde tiempo pensando en las venganzas o en los desquites y resentimientos, esos, son para aquellos que no crecen y se revuelcan en su propios detritus y se sacrifican porque no tienen luz en sus vidas.
Todo lo bueno y lo malo que pasamos lo hemos generado, sin duda alguna, nosotros mismos, no se puede responsabilizar a otros por los resultados de nuestros actos, acciones, emociones y vivencias. Si no sabemos confrontar lo que tenemos en nuestras manos, no podemos creer que lo que de cómo resultado es culpa de otros y no de nosotros mismos, no se pueden cambiar a los demás, se aceptan o se rinden, pero finalmente cada uno es como es y no hay duda que existen las almas gemelas que nos pueden hacer mucho más fuertes en esas alianzas de objetivos comunes.
Cada uno puede aumentar su energía de acuerdo a cómo quiera ser y estar en la vida, en muchos momentos he visto cómo, por tonterías y malos pensamientos se destruye gran parte de esa energía y amor, de ese valor y se provocan tragedias y se generan destrucciones, la realidad es que todos tenemos la capacidad de aumentar o reducir nuestra energía y lo que deseamos, se concede, sea bueno o malo, por ello, debemos cuidar lo que pensamos o lo que deseamos, así es como entendemos que debemos dar gracias por todo lo que tenemos y por todo lo que somos. Tenemos que entender que somos parte de este Universo en constante cambio y movimiento, que nada es estático, que todo cambia en la vida y en el pensamiento. Somos parte de todo este Universo, de la naturaleza y por ello debemos ser respetuosos de sus leyes y actuar en consecuencia. Crear y generar, para poder dar es la clave, así, encontramos el camino de la felicidad o cuando menos, lo vamos entendiendo.
Por todo esto y mucho, pero mucho más, doy gracias por este día y por todos los días que ha pasado y que vendrán en lo que me resta de vida, gracias, podría decir, como dice la canción: por haberme dado tanto y por todo lo que me sigue dando. Gracias a todos mis amigos, a mis seres queridos y a todos aquellos que han sido parte importante de mi vida y que me han permitido aprender y crecer, gracias en verdad, los aprecio y sostengo en que a todos aquellos que han sido ofendidos o de los cuales he recibido ofensas, también les aprecio hoy, porque así aprendí muchas cosas buenas y malas en este correr de mi vida, de todos he aprendido y de todos tengo que agradecer, así, a los 66 años, pienso tener la oportunidad de correr con los mejores tiempos en muchos años más, es verdad, es mi convicción y, por supuesto, con buena energía, lo lograré…

No hay comentarios: