Mucho
me caló desde joven, aquella frase de que: LA LIBERTAD NO SE MENDIGA,
SE CONQUISTA y esta ha sido norma diaria en mi vida, sobre todo, cuando
desde la Vocacional iniciamos nuestros primeros pasos para hacer
realidad el primer periódico estudiantil, de esa escuela, llamado “El
Colmillo Atinado” , de ahí surgió al amor y la pasión que ha señalado mi
vida dentro del campo del periodismo.
Pero
también, por aquellos tiempos, comenzamos a entender lo que significaba
el control de la prensa y la presión que ejercían las autoridades
escolares y políticas en el país para mantener un control sobre todo lo
que se publicaba, porque dentro de ese control se mantenía la fuerza del
poder político y se ocultaban las represiones, las ineficiencias, las
complicidades y corruptelas que se operaban entre funcionarios,
políticos, empresarios, banqueros, policías y, todas las imprentas,
estaban condicionadas, porque tenían que comprar el papel en PIPSA que
era el monopolio del gobierno para operar las relaciones con la prensa,
así se les cobraba o no el papel a los
periódicos y era la forma en que se controlaban las líneas editoriales,
como hoy, lo hacen, por medio del control de los convenios o de los
subsidios que proporcionan directamente los políticos por medio de las
llamadas Direcciones de Comunicación Social que son, en la realidad, los
“ADMINISTRADORES DE LA CORRUPCIÓN EN EL MEDIO DE LA COMUNICACIÓN”,
administración que ejercen en las empresas con los convenios a modo o
bien, por medio de la distribución del “chayo” a los periodistas y
sicarios de la prensa, que les sirven para ocultar los robos, transas y
alianzas o bien, para denostar o difamar a los que el poder y sus
miembros consideran hombres o mujeres de peligro, para que no se les
descubran sus trafiques y negocios.
Por
ello, cuando contamos con diarios, radios o empresas de televisión que
se mantienen independientes a esos arreglos y cochupos y nos permiten a
los que colaboramos una libertad absoluta, damos
gracias y nos empeñamos en hacer mucho mejor nuestro trabajo diario, con
el fin de tener adecuada y libremente informados a los lectores,
radioescuchas o televidentes. La confianza y la credibilidad no es
sencilla de obtener, hay que vencer muchos obstáculos y quitarse muchos
golpes y tentaciones que las gentes del poder imponen o ponen en el
camino de los empresarios limpios o de los comunicadores independientes,
valientes y decentes
que saben que, su único compromiso, es con los lectores, radioescuchas y
televidentes, para ello, hay que afrontar muchas presiones y el boicot
para que esas empresas no logren obtener publicidad, ni oficial ni
particular, porque piensan, los políticos y
administradores de la corrupción del chayo que, al comprar publicidad o
espacios publicitarios en los medios, éstos, están obligados a ocultar
sus desmanes, ineficiencias o corruptelas y complicidades y no entienden
que, los medios o los periodistas, vendemos espacios, no la conciencia,
porque ésta está comprometida con la verdad y con los que nos leen,
escuchan o ven.
Y hemos
visto que la verdad les duele tanto a los hombres del poder que, por
esa razón, utilizan, hoy en día, a los sicarios y grupos del
narcotráfico a los que protegen sus policías y funcionarios, para que
sean los que violenten, lastimen o maten a los
periodistas limpios que les han denunciado, como hay tantos en todo el
país o, utilizan a los grupos manipulados de porros y delincuentes
políticos, para atentar en contra de las empresas o de los periodistas y
por ello, hay la convicción de que la libertad no se mendiga, sino que
se conquista día a día, con toda pasión y
responsabilidad, como lo hacemos en los medios en que aportamos nuestro
esfuerzo.
HACE
ALGUNOS AÑOS, un grupo de amigos, comentábamos la forma en que algunos
de los fejes de prensa, con la pomposidad que sostienen y la prepotencia
que mantienen, pensando en que son los verdaderos responsables de la
“imagen” de sus patrones o de los funcionarios a los que cobran por
hacerles bien su trabajito, hacía en reparto de “chayos”, es decir los
sobres donde se ponían sumas de dinero de acuerdo con el sapo la pedrada
y con el medio la fregada, llamaban a cada uno
de los reporteros que cubríamos algún evento o fuente y, lo metían a un
cuartito… pues sí, digan lo que digan los que
asistían a esos cuartos no hacían bien su papel de periodistas dignos,
sino de suripantas que vendían su pluma y más que eso y, comenzaba, el
reparto del Chayo… los que nos resistíamos porque no aceptábamos o
simplemente teníamos conciencia de nuestro trabajo y de la obligación
que tenemos de informar, no de manipular la información, éramos despreciados y alejados de esos grupos, por ello, como ocurrencia
y ociosidad, propusimos, la creación del FIFOCHA, el Fideicomiso para
el Fomento del Chayo, cuyos lemas iniciales eran: Político no definido
para entregar los chayo abultados, pasará a formar la nota de la página
roja o de sociales de Alarma. Sobre grande, se supone era boletín de
prensa, recibe tratamiento de nota chica, sobre chico y abultado que se
supone es dinero en efectivo o cheque, recibe tratamiento de nota
grande… De acuerdo a tu
chayote, hablará mi espíritu”… pues así se ponían muchas cosas
graciosas que descubrían la función de los chayos que, ya saben, son
como los chayotes, buenos y jugosos para algunos pero, también, llegan a
espinar…por esa razón, algún viejo periodista me decía algo que me
quedó en la mente: “A MÍ, QUERIDO AMIGO, YA NO ME PAGAN POR LO QUE
ESCRIBO, DIGO O COMENTO, SINO QUE ME PAGAN POR LO QUE ME CALLO”
Por
tales razones, cuando vemos la forma en que opera la información o se
manipulan las notas, se desvirtúan las mismas o se desvían de la
atención pública, sabemos la importancia que tiene para los políticos,
funcionarios, banqueros, empresarios, policías y demás miembros del
poder que sufren, cuando algunos bien intencionados y nobles periodistas
dan a conocer sus transas y negocios o sus truculencias y delitos y es
así como demandan a los “administradores del Chayo” que son sus jefes de
prensa, que operen para silenciar a los medios o callar a los
hablantines y denunciantes… y, cuando no pueden, pues ejercen la presión
y amenazan, si no, golpean o matan…
ejemplos hay muchos aquí y en todos lados… por ello, la mejor defensa
es el decir la verdad y no tener compromisos con los que operan, porque
se mueren los que no cumplen con sus compromisos o engañan u ofenden sin
sentido… ya está a la venta el libro: “MEMORIAS DE VIDA: ES UNA
PROVOCACIÓN. EL 68 VISTO A LOS 68” obra de 513paginas a un costo de 230
pesos, la puede ordenar a socrates_campos8@yahoo.com.mx,
así ayuda a la Fundación Aurobics: DE CORAZÓN A CORAZÓN que apoya a los
familiares de los niños con cáncer del Hospital Civil de Oaxaca.
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