En
la “real politik” como gusta definir a los politólogos que abundan en los medios, existe convicción de que el gobierno de Peña Nieto no
dejará los niveles de “negociación” que
tiene establecidos con los miembros de la CNTE y para ello, tiene como
interlocutores de base a Gabino Cué que demostró para sorpresa de algunos de
que no es un “tecnócrata” sino que tiene cartas escondidas en la política y ha
sabido operar bien el control de la difícil sección 22 y, por esa razón, con
ellos en las aulas y él en la negociación, ha logrado impactar para que
diputados y senadores reconsideren algunos puntos para lograr que los maestros
adquieran tiempo y espacio para imponer su visión en la evaluación y en el manejo de
plazas, cuando menos en algunas regiones del país y esto, digan lo que digan,
es un avance en las demandas operadas por la CNTE.
Los grupos de los partidos de oposición ligados bajo el férreo
control de José Murat, que logró “convencerlos” para agruparse en el Pacto por
México, rinde frutos, sin dejar de ver la parte operativa ligada a las gentes
del Secretario Osorio Chong quién, cuando menos, no ha perdido ni el piso ni la
calma para operar con brazo firme el manejo de la situación que pretendía
llevarse a un nivel de provocación para generar, en la represión, a los mártires
que buscan algunos grupos radicales. Lo que tenemos que ver es el inadecuado
uso que se hace de los grupos de la policía comunitaria dizque para cuidar a
los maestros, cuando solamente se les ve como un acto grave de provocación que
tiene que ser manejado y controlado, para que esos grupos paramilitares, que no
cuentan con control, no caigan en manos
de la delincuencia organizada o de los grupos guerrilleros que son tan constantes
en su presencia en esos lugares.
Entendemos
que en las zonas serranas y marginales, los maestros tienen una fuerte influencia
en las comunidades y, ellos, están politizando algunos grupos pero que utilicen
a esos grupos paramilitares llamados policías comunitarias para mostrar un nivel
de fuerza y es grave, ya que esto no se puede permitir en el país porque se
saldría de control y es así que, ellos, deben reflexionar para reducir a esos
grupos a la vigilancia y protección de las comunidades y no para las
manifestaciones y movimientos políticos, porque esto podría dar el pretexto que
buscan algunos grupos de la derecha nacional para implementar un golpe
represivo en esas regiones y continuar con la violencia que ha afectado a esas
zonas del país, con ello, no se lograría la revuelta nacional que esperarían
algunos revolucionarios, sino, pondrían en peligro a esas bases de apoyo social,
porque la represión, ya la han vivido en la región de la Montaña y otras partes
de Guerrero, se da en forma indiscriminada, con lo que aún tienen como ejemplo,
los estragos de la “guerra sucia” de los años setentas en esa región. Si la
historia no les muestra la realidad y pretenden volver a los mismos pasos
creyendo que tienen fuerza y condiciones para su “revolución”, lo único que
lograrán será matanzas y represión y, esto, solamente afecta a los grupos marginados
y empobrecidos que caen en ese juego. Así que debemos estar pendientes de que
esto no suceda ya que sería brutal y grave para todo el país. La Reforma
Educativa, no tiene marcha atrás, así que los maestros deben ajustar su lucha
dentro del marco sindical en la defensa de sus agremiados, porque un
movimientos sindical de este nivel, no puede arrancar el proceso revolucionario
que algunos acelerados pretenden…
Los
tiempos y las circunstancias son las que imponen los métodos y estrategias de
una lucha política y existen razones importantes para entender que el gobierno
de Enrique Peña Nieto, ha implementado una estrategia para atender los problemas
más urgentes del país de ahí la
iniciativa encabezada en su implementación por Rosario Robles, una política de izquierda
que entiende las formas y necesidades de los más pobres, para aplicar el primer
programa contra el hambre y la pobreza que abarca la atención de más de siete
millones de mexicanos que se encuentra en las zonas urbanas y municipios más
pobre de México. Algunos, señalan, que es un programa “electorero” pero es lo
mismo que se podría decir cuando gobiernos de “izquierda” implementaron
programas similares, la única realidad es que existen esos pobres en
condiciones terribles de miseria y de marginación y que si hay un programa para
atenderles es importante y vital que se haga con honestidad y eficiencia y, si
esto genera simpatías políticas y tienen un resultado electoral se verá al
tiempo, y no se pude condenar a proyectos de este tipo a un fracaso, solamente
porque algunos políticos consideran que no cumplirá con sus objetivos, porque
lo critican antes de que se inicie y se puedan evaluar resultados del mismo. A los
pobres, poco les importa de qué partido político lleguen los apoyos, les
interesa el que alguien les ayude y apoye y así hay que hacerlo.
Si
el magisterio revolucionario que se ha dejado utilizar por un grupito de
líderes oportunistas como “carne de plantón y de manifestación” y que al final
de las jornadas, además de lo que logran para la generalidad, ellos, obtienen
prebendas políticas, puestos y presupuestos, entendiera su misión en el campo de la educación y el
desarrollo, como lo entendieron los maestros en los tiempos de Lázaro Cárdenas,
donde jugaron un vital papel en la reforma agraria, en la educación y en la
organización productiva, hoy, se deberían unir a esos esfuerzos para la atención
a los grupos en extrema pobreza y a aumentar el nivel educativo en muchas
regiones. Por ejemplo, en Oaxaca, es importante y eficiente el programa de “COCINAS
COMUNITARIAS” que ha avanzado con honestidad la señora Mané Cámara de Cué en
las zonas marginales y es ahí, donde además de la amplia participación de las
mujeres y hombres de las comunidades que reciben esos apoyos para dar alimentos
a los niños que más lo necesitan, se debe aprovechar la infraestructura social
para implementar y desarrollar los planes económicos que se inician en el
proyecto encabezado por Rosario Robles. Y, en este proceso, deberían participar
los maestros, ligándose mucho más con las comunidades y no confrontándose con
ellas, como ha venido sucediendo ante políticas equivocadas en los plantones y
manifestaciones que han generado irritación en su contra por parte de la
ciudadanía que, no tiene ni información real sobre los motivos de su lucha y
está expuesta a la manipulación de los grupos políticos, por medio de algunos medios
de información y organizaciones de derecha, de tal forma que en algunas
comunidades se han provocado enfrentamientos con la población que han llegado
al desalojo de maestros y actos violentos que se pueden radicalizar.
Hay
momentos de reflexión en cualquier lucha política, la evaluación de los
resultados y de la organización debe ser constante y no solamente se deben
empeñar en la acción por la presión…
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