martes, 6 de septiembre de 2011

Partidos políticos

LOS MEXICANOS MÁS O MENOS INFORMADOS, sabemos, desde hace décadas, que los partidos políticos son una mafia de familiares y de amigos que tienen la concesión de explotar los recursos y los puestos que se generan en este enorme negocio que es la POLíTICA MEXICANA.

Desde que el famoso presidencialismo se buscó “acotar” y perdiendo la hegemonía priísta en el poder, con el cuento de la “alternancia”, se fortalecieron los cacicazgos en los estados por la simple razón de que ya no existía un “Tlatoani” que, todo poderoso, generara el miedo adecuado a los súbditos y se le obedeciera sin vacilaciones. La misma institución de la Secretaría de Gobernación, fue desmantelada, en los tiempos de Carlos Salinas de Gortari y dejaron fuera del juego político a hombres experimentados y fuertes que sostenían el control de los políticos y funcionarios, además, del control político de los adversarios y de los militantes en los partidos, por esa razón, Manuel Camacho Solís, Marcelo Ebrad y el francés, José Córdova Montoya, fueron los que instrumentaron que los controles en la información y el espionaje se controlara desde sus oficinas y que fuera un instrumento del presidente para operar, como él quisiera, olvidándose de los controles institucionales que de una u otra forma impedían el ejercicio dictatorial en el poder y así, ellos, se apropiaron de las funciones que le correspondían a la Secretaría de Gobernación ,convirtiéndola en una simple figura decorativa y de trámites, como la que es hoy, sin fuerza, corrompida y mediocre.

En tales condiciones, después del famoso operativo implementado por Ernesto Zedillo, para dar “una sana distancia con el PRI”, en realidad se ocultaban los motivos de operatividad que se encaminaban a entregar el poder a los panistas, porque sabía que no era bien visto entre los viejos militantes del PRI y que, su ascenso al poder, lo había logrado por el asesinato de Luís Donaldo Colosio y es por ello que sabía que no podía negociar su salida, sin tener serios choques y, como los norteamericanos le manejaban desde que era estudiante, pues aceptó dar el poder y operar para que el poder quedara en mano de un “gerente” de la COCA COLA, que jamás logró ser presidente, para que no se le investigara y que todo aquel proceso donde se dio el gran palo al pueblo de México con el ROBAPROA, que no fue más que el rescate con los recursos públicos de los bancos y banqueros, es decir, ayudar a los multimillonarios y saqueadores, en contra de los intereses del pueblo, un robo al estilo Hood Robin, que roba a los pobres para dar a los ricos.

Así, desde el manejo individual y caprichoso de los partidos se han cometido las peores injusticias y las más grandes burradas, no hay duda pues que si los partidos de la “oposición” en décadas jugaron el papel de “paleros” bien pagados y, por este mecanismo, muchos políticos de la “oposición”, como los actuales, logran puestos en la burocracia, concesiones, negocios, puestos políticos y en fin, el negocio es próspero, de tal manera que muchos que bien podrían encajar como delincuentes, por sus aficiones, hoy, destacan como políticos, funcionarios y policías y, llegado el momento, como empresarios, igual que en las mafias de cualquier parte del mundo.

Y bueno, cuando no es el grupo de amigos hampones o con alma de hampones y mafiosos, son los compadres o los familiares o los jefes de tribus y clanes que controlan los partidos y sus presupuestos, el reparto de negocios, concesiones o puestos públicos y, en algunos casos, pues dan para que puedan, sus cuates y familiares, hacer negocios con quesos, semillas, pepitas, venta de ropa, alimentos, bebidas en vez de tener que pasar por la vergüenza de “trabajar” y por ello, muchos, también, trabajan en el “servicio aéreo” de la alta burocracia como “aviadores” y cobran sin ir y sin trabajar, esto es lo bonito de los partidos y de los grupos de hampones con alma de mafiosos….

Y como son “tan dignos y honestos” pues, también, son sensibles y buscan rescatar la honra, muchas veces denunciada en las campañas o en los medios y es así que hacen cambios para que, desde la Cámara de Diputados, por medio de la comisión de Justicia, se promuevan los cambios al artículo 412bis del Código Penal, con una modificación dictatorial y fascista, como la que existió con el 145 y 145 bis, del Código Penal, que configuraba el DELITO DE DISOLUCIÓN SOCIAL, por medio del cual, decenas de honestos militantes, políticos, líderes, ciudadanos y periodistas fueron llevados a la cárcel o sometidos a la persecución, hasta llegar al asesinato. Esto es en realidad lo que están promoviendo y seguramente aprobarán los diputados y senadores ,porque dicen que no están dispuestos a que se “les señale ni critique, con razón o sin ella, ni desde la oposición, ni por sus adversarios, pero tampoco desde la ciudadanía. Y han decidido poner serias limitaciones a la libertad de expresión”, como escribe en, El Universal, Denise Maerker, con total indignación y ante el silencio y temor de muchos comunicadores que no dirán nada, porque temen las represalias, el terrorismo oficial, la represión y perder, en muchos casos, los beneficios de ser aduladores y escritores o comunicadores al servicio del poder y de los políticos en el poder… esta, es la verdad.

Así, se impondrán de 100 a 200 días de multa y prisión de 1 a 6 años a quien “INJURIE O DIFAME A LAS INSTITUCIONES, autoridades electorales, partidos y precandidatos, candidatos o coaliciones; si el responsable fuese funcionario o servidor público, la pena será de 200 y 300 días de multa y prisión de 2 a 9 años”. Es decir, ahora, podremos saber que son ladrones, ineficientes, corruptos, mentirosos, pero no se los podremos gritar ni decir en público a riesgo de que nos multen o nos lleven a la cárcel. Es lógico que los funcionarios, candidatos, precandidatos, coaliciones, funcionarios, pueden robarnos, mentirnos, difamarnos, acusarnos injustamente y, los ciudadanos, no podremos ni siquiera, un poquitín, “mentarles la madre” porque entonces complicamos nuestra situación, porque estamos atentando contra los dictadorzuelos y sus esbirros… y bueno, pues antes de que aprueben esas leyes, propias de una dictadura, pues que vayan y… tiznen a su sagrada mamacita y a sus hijos y su descendencia… total, yo no sé por que les apura tanto el asunto, si los ladrones, defraudadores, mentirosos, asesinos y delincuentes que salen de la función pública o de la política, ni siquiera pisan la cárcel y, las mentadas ,son como las llamadas a misa, van, si quieren…”En esta cárcel maldita donde reina la tristeza, no se castiga el delito, se castiga la pobreza”. Y bueno qué le hacemos si estamos ante el gobierno de los ricos y poderosos, no en un gobierno del pueblo y para el pueblo…

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