Decía Epícuro: “No es pobre el que tiene poco, sino aquel que, teniendo mucho, desea tener más todavía”.
Winston Churchill, explicaba: “El político debe ser capaz de predecir lo que va a pasar mañana, el mes próximo y el año que viene y de explicar después porque no ha ocurrido”.
Curiosamente, muchos analistas nos dicen que con el cambio climático en México, las condiciones de cosechas y siembras de productos básicos se ha destruido de tal forma que tenemos que prever que dentro de algunos meses no tendremos suficiente frijol, arroz, verduras, maíz, por tanto, tendremos carestía y faltante de alimentos y básicos. Es lógico que los alimentos que faltan en las zonas marginadas y pobres en todo el país serán menores en esos sitios, es decir, las zonas pobres sufrirán mayor pobreza, carencias, desempleo, insalubridad, desesperación, tragedias, brutalidades, carestías, muerte, inseguridad. En fin, los problemas serán mayores en los sitios de mayor pobreza y, en este caso, tendríamos que decir que es seguro que las políticas sociales no están en la visión del actual gobierno. Al contrario, en vez de fortalecer la educación popular y laica, fortalecen los estímulos a la educación privada y confesional y esto es lógico, cuando vemos que, por ejemplo, los colegios confesionales y privados son, hoy por hoy, un enorme negocio y es lógico que cuando se pretende estimular el que las familias manden a sus hijos a estudiar a esas escuelas que son el gran negocio de algunos financieros ligados a los grupos del poder político del clero, se buscan los incentivos fiscales para que los recursos populares se desvíen a esos centros en vez de alentar la educación pública y laica en las instituciones de gobierno. El objetivo es eliminar a la educación popular para convertirla en educación confesional y privada.
Negocios son negocios y uno de los más rentables es la educación, así al igual que hicieron con la seguridad, los gobiernos de la derecha estimulan la formación de policías privadas, cuando el gobierno tiene la obligación constitucional de proporcionar a los ciudadanos la seguridad por medio de la policía institucional, pero no, ellos, hicieron que se pervirtieran las instituciones de seguridad, se corrompieran, fueran ineficientes y por este mecanismo crearon las policías políticas privadas que hoy, tenemos que pagar los ciudadanos, además de que son el gran negocio de un grupo de hampones del gobierno ligados a los policías más corruptos del país que, hoy, controlan la policía política, encargada de eliminar a los líderes sociales y políticos que se consideran enemigos del gobierno, del presidente y del partido que representan en el poder. Esto no es una imaginación o una volada, es la realidad, por este mecanismo lograron, como hoy buscan eliminar la eficiencia en la educación popular, la eficiencia en los cuerpos de seguridad y hoy, buscan eliminar la eficiencia y la calidad en las universidades e institutos de enseñanza media y superior del país, alentando la educación privada y confesional que es la fuente de formación de sus cuadros técnicos y políticos que controlan el país.
La estrategia de Felipe Calderón al hacer deducciones de impuestos dizque a las familias que mandan a sus hijos a las escuelas particulares, no sirven a las mismas, ellos, de todas formas pagarán más, la realidad es que es el mecanismo para que el gobierno desvié recursos públicos a fortalecer la educación privada y confesional y le brinde incentivos fiscales y le genere subsidios adicionales que deberían ser canalizados a la educación popular. Este es un engaño y por ello, deberían, las universidades, tecnológicos y normales, hacer un gran reclamo a este gobierno y a Felipe Calderón, para que los recursos del pueblo sean canalizados a las instituciones a donde van a estudiar sus hijos y no a las escuelas privadas y confesionales que son las que utilizan las familias que tienen la capacidad de pago en la educación de sus hijos. Así se generaría una real política social de calidad y no una forma de eliminar la calidad en la educación proporcionada por el gobierno que debe ser gratuita y laica.
Si hoy vemos en el futuro del país hambruna y falta de alimento, también vemos caos y crisis social en muchas partes de México, como si el México bronco comenzara a despertar, porque no hay duda de que las condiciones objetivas y subjetivas de un movimiento de descontento están cada día más cercanas, recordemos que, cuando los alimentos y los productos básicos faltan, se genera descontento y hambre, el maíz, es, en este país: “Alimento, cuchara, tortilla, plato y sobre todo, paz social”. Nadie podrá negar que los gasolinazos y los aumentos de precios son reales, a pesar de los cuentos chinos de los funcionarios y los políticos en el poder. La desocupación no cede, al contrario, vemos cada día mayor número de desempleados, mayor carga impositiva, mayor inseguridad y represión, caos en el control de las políticas públicas de atención social e ineficiencia total en la seguridad pública y salud, deserción escolar, miedos y pánico entre la población, en fin, las cosas no están para continuar pensando en que nadie hace nada porque todos tenemos miedo a la represión del gobierno y de sus policías. Esto es un mito, la gente cada día tiene mayor conciencia y está muy disgustada por la ineficiencia del gobierno y reclama soluciones reales, de no hacerlas y darlas, el estallido social es muy cercano y, con la violencia, perdemos todos…
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