Apentontaditos

  Muchos se ha hablado de la famosa entrega de fondos para la seguridad de parte de los norteamericanos, se habla de cientos de millones de dólares entregados en equipo y armas, en sistemas de seguridad y claro, entendemos que todos esos sistemas, más que servirle al país, les sirven a sus servicios de inteligencia, porque según se ha consultado con los especialistas sobre el tema, nos comentan de que éstos sistemas están ligados y relacionados en sus datos directamente con los servicios de investigación y espionaje de los Estados Unidos. Nadie regala nada si no le sirve a ellos, es como dar cacahuates para recibir oro, y esto es lo que hacen los espías norteamericanos.

         Al inicio del gobierno de Enrique Peña Nieto, se sabe, los Estados Unidos entregaron varios sistemas de drones para la investigación, que según se dice, cuestan varios millones de dólares, al igual que el sistema para operarlo. Hace apenas unos días, la PGR opera el sistema, después de cuarenta días de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa. Este sistema es especial para descubrir aviones en camino o grupos de gentes en lugares donde pocos pueden ingresar..

 Los drones operados en México, son iguales a los utilizados por los Estados Unidos para la localización de  Osama Bin Laden, en Pakistán, así que todos se preguntan el por qué el grupo de inteligencia y seguridad de Peña Nieto contando con tan importante sistema tecnológico, no armado, no usaron el mismo de inmediato para ayudar en la recolección de datos para la localización de los normalistas. Estos drones que utilizara la CIA con éxito, proporcionan  coordenadas para localización de grupos y este podría haber sido utilizado de inmediato y no dejar las cosas complicadas como hoy están.

         La famosa Plataforma México es una obra de más de 600 millones de dólares y este proyecto de drones cuesta 70 millones de dólares, y sirve para una persecución en tiempo real de aviones de transporte de drogas o para la localización de grupos. Es afirmativo que los miembros del equipo de Peña Nieto, dicen los ex funcionarios de Felipe Calderón, conocían este avance tecnológico que han desaprovechado como han dejado a un lado muchas otras cosas que sirven para el control de la seguridad, claro que no aclaran que en el gobierno de Calderón,  ha dejado un verdadero río de sangre y de impunidad: Más de 70 mil asesinados en la Guerra contra el narcotráfico entre los que se encuentran miles de “daños colaterales”, y que jamás se aclaró o se les hizo justicia. Más de 22 mil desaparecidos que, como están las cosas, podríamos decir que son secuestrados y asesinados y enterrados en las cientos o miles de fosas clandestinas que existen en todo el país. A lo mejor, esos drones, también podrían señalar las miles de tumbas clandestinas que hay en el país.

Seguramente el gobierno de Peña Nieto tendrá que afrontar esta realidad y tienen el tiempo para aclarar lo que es de su responsabilidad y lo que es del gobierno anterior, si no lo hace, los datos y los enredos serán de tal naturaleza que la sociedad se puede confundir y culparle de estos asesinatos, desapariciones o secuestros forzados. Las instancias internacionales están interviniendo en este tipo de acciones e investigando lo que sucede en el país, y seguramente, demandará la consignación de muchos funcionarios y al gobierno mexicano en las cortes internacionales,  y es por ello que, Peña Nieto, tienen que deslindar los asesinatos y las desapariciones y buscar los responsables del gobierno anterior que son los que generaron esta matanza indiscriminada que ha generado la impunidad y la tragedia que vive el país. No hacerlo, es convertirse en cómplice de esto, y tendremos situaciones complejas y legales a nivel internacional y repudios nacionales que generan desconfianza en las instituciones y en los grupos políticos, de seguridad y en las relaciones que existen entre los narcotraficantes y los políticos, banqueros y empresarios, que nadie investiga, y que genera la NARCOPOLÍTICA, LOS NARCONEGOCIOS Y LA NARCOREPRESIÓN  en el país.

         La situación es de tal nivel que nadie niega que en cualquier momento las chispas puedan generar un gran incendio y que la violencia pueda provocar una confrontación de tal nivel que entraríamos a una especie de guerra civil, porque lo único que están dejando a los ciudadanos, es la vía de la violencia para reclamar derechos y justicia. Si esto es así, las cosas en vez de solucionarse, se complicarán, de tal suerte que los únicos que perderemos más seremos los ciudadanos y los que ganarán serán los políticos, los mafiosos de los partidos y los grandes empresarios socios y cómplices de esta gran corrupción y represión en el país.